Dos chicos cruzaron sus miradas, sus cuerpos, sus almas, sus corazones, ¿acaso son el destino del otro?
Nuestra vida es un conjunto de decisiones que nos acercan a nuestra persona destinada, pero, si nos equivocamos terminaremos muy lejos de ella.
U...
Nos leemos en el próximo capítulo, lamidas para tod@s 👅 l@s quiero
– fin de la nota –
👅 👅 👅
👅 57. Dime Sr. Xiao
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- ¿Y si está tu suegro?, y te pregunta por mí, ¿qué le dirás? – pregunto con la mirada preocupada
- Últimamente no asiste a la oficina y cuando lo hace se encierra en su despacho y yo acudo a rendirle informes de todo y si llega a preguntar por ti le diré que eres mi amigo – Yibo cerró los ojos y reclino su cabeza en el asiento resignándose a la situación, unos minutos después llegamos a la empresa, él a unos pasos de mí, juntos, pero conservando una distancia políticamente correcta
- Buenos días Sr. Xiao – apenas salíamos del ascensor cuando ya se acercaba a nosotros y con prisa mi asistente – que bueno que ya está usted aquí, he estado llamándole, me tenía preocupada hasta creí que algo le había sucedido – mi asistente, una señora cuyos cabellos plateados ya pintaban su edad hablaba algo acelerada y nerviosa
- Tranquila, tranquila, gracias por preocuparse por mí, aquí estoy, bien y a salvo – mencioné mientras reposaba suavemente una mano sobre su hombro y sonreía a plenitud
- Si, ya veo que anda usted muy risueño, muy contento está mañana, mientras que yo vivo con el Jesús en la boca – guarde silencio, en ese momento caí en cuenta que mi felicidad se percibía, debo ser más neutro con mis emociones anoté mentalmente, pues mi asistente no es tan perspicaz, ni inquisitiva cómo mi suegro, si ella notaba algo en mí, él definitivamente también lo haría – me da gusto que su viaje a Corea le haya sentado también – ¿cómo había ella llegado a esa conclusión?, de forma tan inmediata, me pregunte, por la comisura del ojo observe la tensión en Yibo, él también se preguntaba lo mismo
- ¿Y que es aquello tan importante por lo que me buscaba? – pregunté de inmediato intentando cambiar el tema de conversación, pues mi viaje a Corea era un asunto del cual no quiero dar explicaciones
- Aahh,- suspiró fuerte - su suegro vino a la oficina, pregunto por usted, le dije que no había llegado y que probablemente se había tomado unos días para descansar, me dijo que quería saber cómo había estado la inauguración en Seúl y que si había llegado con bien a Beijín, así que intenté comunicarme con usted, pero como no me respondió, su suegro se incomodó demasiado, por decirlo de alguna manera, ¡ay dios!, yo ya estoy muy vieja para estos sustos – mi asistente remataba su relato con aquella exclamación mientras señalaba su pecho agitado - ¿lo comunico con él? – pregunto de inmediato
