Dazai Osamu ex miembro de la
PorfMafia se encuentra delante de un nuevo reto, la paternidad, podrá hacerse cargo de una pequeña vida mientras evita a la Mafia y ayuda a la Agencia Armada de Detectives.
También podrá detener a la nueva organización q...
El castaño se encontraba en compañía de una hermosa mujer de pelo negro, había sido un día muy agitado para ambos y la mujer no tenía un lugar en donde quedarse.
- Por favor, señorita, pase, debe estar muy cansada - dijo el castaño mientras dejaba pasar a la mujer a su departamento, cosa que sorprendió a la mujer, era claro que el castaño no vivía solo pero tampoco que hubiera una mujer viviera hay.
- Es un lugar muy bonito Dazai, de casualidad estas casado - dijo mientras tomaba una foto del castaño y una pequeña castaña de no más de 2 años, ganándose la curiosidad de la mujer.
- Para tu fortuna, estoy completamente soltero pero mi vida ya le pertenece a una señorita - dijo en juego ganándose una mirada llena de curiosidad por parte de la mujer.
- ¿Enserio? ¿Y quién es la mujer tan afortunada? - dijo siguiéndole el juego al castaño, ahora tenía curiosidad de quien podría domar a aquel hombre que parecía un alma libre.
- Te gustaría conocerla, es una señorita muy curiosa y a veces puede ser grosera con los extraños - dijo mientras hacia una pose dramática sacándole una risa a la mujer quien ahora tenía más curiosidad.
- Seria un placer ver a la persona más importante de el gran Dazai - dijo después de soltar una suabe risa el castaño solo le sonrió a la mujer.
- En ese caso espera un segundo - dijo mientras salía del departamento y la mujer admiraba cada detalle del lugar, era un lugar muy colorido y lleno de varios tipos de libros, desde libros infantiles hasta psicología o pedagogía.
Mientras tanto el castaño se encontraba afuera del departamento de Naomi y Tanizaki, esperaba a que los hermanos abrieran la puerta, después de todo cuando solía tener misiones que podrían demorar tanto ellos eran los encargados de cuidarla.
- Ya ha regresado Dazai, pensé que les tomaría más tiempo, espera deja llamó a Kyoko está jugando con Naomi - dijo mientras se adentraba a su departamento y comenzaba a buscar a la menor.
- Papi me alegra verte - dijo la pequeña que tenía varios arreglos en el cabello era claro quien se estaba divirtiendo y más al ver a Naomi con más arreglos de cabello en la mano.
- Que mal, yo quería seguir probando otros arreglos - la pequeña recogía veloz mente sus cosas y se acercaba a los brazos de su padre mientras se despedía con la mano, en cuanto los hermanos Tanizaki serraron la puerta Dazai hablo con la pequeña.
- Kyoko hoy practicaremos todo lo que has aprendido con una mujer que está en casa, dime ¿Me darías una mano? - la pequeña comprendió perfectamente a que se refería su padre, así que solo asintió al abrir la puerta el espectáculo había comenzado.
- Ya estamos de regreso, señorita Sasaki le presento a la mujer más importante en mi vida – la pequeña bajo de los brazos de su padre y se acercó a la mujer con una gran sonrisa.
- Mucho gusto soy Kyoko Dazai tengo 4 años – dijo con dulzura y una gran sonrisa, algo que habían practicado desde que la pequeña tenía memoria.
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