Prólogo| Error

192 18 1
                                    

Una sala llena de computadoras, personas con comunicadores siempre pendientes de cada nueva noticia.

Una dama, de cabello liso, recogido en un rodete, examinaba información ansiosa, y no era para menos; ese mes había estado repleto de respuestas fructíferas y estimulantes. Alisó su saco por segunda vez todo el día y le llegó una alerta de mensaje de uno de sus informantes, que después de un tiempo, gracias a la intervención de su mejor agente había conseguido infiltrarse en el personal de servicio de los Desmond.

Colocó los auriculares en sus oídos y escuchó pacientemente las noticias, en su caso, el código correspondiente.

Un sonido seco inundó la sala de operaciones.

- Lo logró – musitó sin creerlo la empleada de WISE, con un intento de sonrisa en ese rostro que había mostrado solamente seriedad en mucho tiempo – Twilight lo logró – pronunció incrédula por las buenas noticias, con los vítores exclamados a medida que la buena nueva se extendía por la organización.

La misión Strixx fue completada.

.

EL líder del partido de Ostania, Donovan Desmond, ha muerto a manos de una enfermedad terminal este trimestre. La divulgación de información comprometedora y los últimos escándalos en los medios terminaron por debilitar su ya maltrecha salud.

Consisten en acusaciones serias, Helen. Tenemos también la noticia de que el primer vástago de lo que fue una de las familias más influyentes tomará las riendas del partido pese a su edad. Prometió investigar las asociaciones de naturaleza dudosa de su padre y limpiar el apellido.

¿No crees que es contradictorio, Richard? Son familia, es natural que un hijo defienda el honor de su fallecido padre, que no pida... investigarlo.

Es una de las muestras de patriotismo más claras de la época, Helen! Un líder capaz de dejar de lado uniones por el bien de Ostania. ¡Que salve Ostania!

La mente humana es un misterio insoldable, y tal vez, junto con ella están las emociones y lo contradictorio de las acciones.

Damian había sido prácticamente obligado a recoger cada una de las pertenencias en Edén, no tenía nada en que escudarse para evitar ser expulsado, ni siquiera el poder del apellido de su familia si es que aún existía. Demetrius se estaba encargando de que no se destruyera del todo.

La nueva cabeza del grupo Desmond, exigía a Damian salir del ojo público de la escuela en donde los hijos de personajes influyentes eran educados. En las palabras de su propio hermano, su apellido ya no daba para resistir los incesantes caprichos de su hermano menor, ni le podía permitir ayudarlo a doblegar a sus compañeros. La opinión pública y su mejora luego de los infames rumores de las asociaciones delictivas de su padre habían hundido tanto su honor como su bolsillo, era lo mejor si desaparecían del mapa.

No consideraba a Damian apto para la diplomacia y reconstrucción de su imagen.

- Habla con él, Jeeves.

Anya se arremolinó contra la pared, intentando en enfocarse en escuchar otra cosa que no fueran pensamientos ajenos. Agradecía el hecho de que Damian no podía leer mentes, de lo contrario su amigo sufriría con lo que la gente a su alrededor pensaban.

Forger, ¿uh? Esa niña, el mocoso altanero de Desmond no perdía la oportunidad para hacerle la vida miserable. ¿Viene a regodearse en su rostro? Jah, eso es karma

Anya estuvo a nada de negar la afirmación de ese niño tan grosero, pero dejó la ira de lado y empujó la puerta de la habitación del Segundo.

Era un desastre, tenía ojeras enormes como antes lo era su orgullo, llevando lágrimas acumuladas debajo de sus ojos, con el uniforme hecho un desastre y una palidez que confirmaba el hecho de que Desmond no había dormido ni comido esa penosa semana.

Ladungen ▪ Spy x FamilyWhere stories live. Discover now