Capítulo 14

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"Quizás algún día puedas entrenar con Clarke y conmigo". Anya le ofrece a Lexa.

"Sha. Así podré mostrarte lo mucho que he mejorado. Hace años que no luchamos".

"No físicamente". comenta Anya, sonriendo.

"Discutes con Titus más que conmigo". señala Lexa.

En este punto, estoy algo perdida y no entiendo exactamente de qué están hablando.

Anya resopla: "Titus se cree tan grande porque ha servido a cinco comandantes. Yo sólo le digo la verdad".

"Una vez preguntaste si el hecho de que esté calvo es consecuencia del estrés que yo le causo".

Lucho contra el impulso de reírme de eso. No sé quién es el tal Titus, pero no deja de ser gracioso. Aunque por lo que he visto, no sé cuánto estrés podría causarle Lexa.

"Probablemente sea cierto, Heda. Cuando tomaste el poder le quedaban algunos pelos, ahora no tiene ninguno. Tu imprudencia ha causado estrés a muchos".

"No soy imprudente". protesta Lexa.

Es sabia para su edad, pero puedo creer que sólo tiene unos años más que yo cuando discute así con Anya. Las dos se comportan como niñas, y es interesante verlo. Su dinámica es extraña, como si Anya fuera la hermana mayor de Lexa.

"No tienes consideración por tu vida". Anya dice sin rodeos.

"Mi alma se reencarnará, Anya. Mi vida no importa".

"Sabes tan bien como yo que tu espíritu no siempre elige tan sabiamente como debería. Los clanes te necesitan, no otro Heda". Dice Anya con sinceridad, mirando fijamente a los ojos de Lexa.

"No te preocupes, Anya, no planees que mi lucha termine hasta que la Coalición sea más estable y se eliminen las amenazas para nuestro pueblo".

"Eso no es tranquilizador". Anya refunfuña: "Más vale que no mueras hasta años después que yo".

"Sabes que no puedo hacer promesas sobre eso".

Ahora siento que me estoy entrometiendo en una conversación sincera. Intentaría irme para darles tiempo a hablar, pero sé que lo notarán.

Anya asiente y deja escapar un suspiro, sus ojos parpadean hacia mí. "¿Te gustaría entrenar con nosotros hoy, Heda? Puede que te levante el ánimo para esta noche". Al ver mi expresión de confusión, explica "Habrá una fiesta para celebrar la llegada de Heda a TonDC".

Frunzo el ceño, tratando de entender qué quería decir exactamente. Me giro para mirar a Lexa. "¿No te gustan las celebraciones?"

"Sí me gustan, Anya sólo sabe que viajar es algo que me agota. A pesar de mis guardias, me gusta mantenerme alerta para vigilar a los enemigos y asesinos. El entrenamiento me relaja".

"¿Asesinos?" Palidezco.

Estoy acostumbrada a que se hable de enemigos (aunque no sé exactamente a quién o a qué se refieren el noventa por ciento de las veces), pero ¿asesinos? ¿Quién querría matarla?

"Sha. Sólo he tenido veintitrés atentados contra mi vida".

"¿Sólo?"

"Mi predecesora tenía más de cien en el momento en que era Heda como yo. Con los Maunon y los Destripadores más activos que nunca, hay peores enemigos en los que centrarse". explica Lexa.

"Algún día tendrán que explicarme exactamente cuáles son. Anya me ha dado una vaga idea, pero nada concreto".

Lexa mira fijamente a Anya, que se encoge de hombros. "Pensé que te gustaría explicárselos. De todos los de los doce clanes, tú eres la que más sabe de ellos".

"Puede ser, pero mantenerla desinformada podría matarla. Tiene que saber cuáles son nuestros enemigos".

"Entonces explícaselos. ¿Pero prefieres entrenar o explicar eso?"

Puede ver la expresión de conflicto en la cara de Lexa (en sus ojos realmente, me he dado cuenta de que no muestra mucha expresión con su cara). "Puedes decírmelo otro día. No quiero que vayas a una fiesta en tu honor estresada".

"Gracias, te lo diré mañana. Le enviaré a Artigas cuando debas venir a mi tienda".

Anya le sonríe (todavía es raro verla sonreír) a Lexa, mirando entre ella y yo, mientras ella le devuelve la mirada. creo que me estoy perdiendo algo aquí.

"Espero que tengan un... tiempo informativo mañana en la tienda de Heda". Anya balbucea, su sonrisa se convierte en una mueca cuando Lexa suspira exasperada.

"Anya, el anillo de entrenamiento está libre, y ya hay una multitud reunida". Dice Artigas, abriendo la trampilla pero sin entrar.

"Mochof, Artigas. Ven, Heda. El entrenamiento te espera". Anya también me hace un gesto.

Lexa y yo vamos detrás de Anya, Lexa a su izquierda y yo a su derecha. La gente nos saluda calurosamente, algunos se detienen para agradecerle algo a Lexa. Estas paradas me dan tiempo para volver a mirarla. Ella regala a las personas que nos paran pequeñas sonrisas genuinas y acepta humildemente su gratitud, a menudo agradeciéndoles a su vez lo que hacen. Tengo que admitir que me asombra lo buena que es con la gente.

Cuando por fin llegamos a la pista, hay una multitud de personas.

"Están aquí para ver el combate de Heda". Me dice Anya. "Es un espectáculo que rara vez se ve fuera de Polis, a menos que esté de visita en otra ciudad". Se vuelve hacia Lexa: "¿Estás lista?"

"Sha".

Lexa saca sus espadas de la funda que lleva a la espalda. La multitud reunida deja escapar palabras de emoción en voz baja.

"Primero entrenaré con ella para que puedas ver cómo lucha, luego les tocará a ustedes".

Anya desenvaina sus espadas y yo retrocedo hasta el borde del ring. Lexa y Anya se rodean mutuamente. Anya es paciente, pero parece que Lexa también lo es. Siguen dando vueltas hasta que Anya se da por vencida y ataca. Lexa la bloquea sin esfuerzo y la empuja, haciendo que Anya retroceda a trompicones.

"Has mejorado". comenta Anya.

He pasado suficiente tiempo entrenando con ella para saber que está impresionada por las habilidades de Lexa. Yo también lo estoy.

Lexa sonríe y hace girar sus dos espadas simultáneamente. "Tú también has mejorado ". Un momento después sus espadas se juntan con un tintineo.

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Al parecer alguien ya está shippeando a cierto par...

J

The Ones Who's Fallen  [En Curso]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant