Skaters

Capítulo 10: "Un día interesante":

PoV Blake:

Llegué a casa con el corazón el la boca. Como lo imaginaba no había nadie.
Subí a mí habitación y dejé mis cosas. Bajé y me preparé algo para comer.

La casa estaba tan sola, que era triste. Estaba sentado en la isla de comiendo algo preparado por mí.
El lugar se veía muy elegante, moderno, sofisticado y limpio pero no era un hogar, no era cálido y acogedor como lo era cuando era pequeño.
De un momento a otro y sin darme cuenta las lágrimas comenzaron a correr por mis mejillas. No entendía porqué tenía esta vida. Me enojaba no poder cambiar y odiaba todo lo que me estaba pasando. Escondí mí cara entre mis manos frustrado.
Me levanté y salí al patio de atrás. Me senté bajo un árbol y me quedé sin pensar nada, solo mirando al cielo.
Mí mente estaba en cualquier parte menos en la Tierra.
De pronto alguien hace que vuelva
— ¡Ey! Hola Blake — reorganizo mí cabeza y miré a la persona que me estaba hablando
— ¡Maison! — exclamo poniéndome de pie
— ¿Qué tal? — pregunta con una media sonrisa
—Bien, ¿y tú? — le sigo caminando hacia en limite de mí patio
"Eres un mentiroso" ¿Qué acaso crees que voy a decirle que estaba llorando como una niña por mí maldita vida? Cielos...
—Nada, aburrido — dice encogiéndose de hombros
—Vi a tus padres salir, son muy elegantes — afirma con cierto tono de admiración
"Olvidaste mencionar: Estrictos en exceso, nada atentos, distantes y desalmados" ok... es suficiente
—Si, lo son — digo ocultando mis pensamientos
— ¿Estas solo? — pregunta señalando mí casa
—Si — respondí y sonrió
— ¿Te gustaría venir a mí casa? Coop y Owen están por llegar — no quería estar solo en mí casa, y Maison parecía ser un buen chico
"Hay que hacer nuevos amigos, los de Irlanda quedaron atrás" como odio admitir que eso es verdad
—Si, sería excelente — dicho eso, me fui con Maison a su casa.

Era agradable tener a mí amigo como vecino
—Bien, bienvenido a mí hogar — dice haciendo un ademán para que entrara
" ¿Escuchaste? Esto es un hogar..."
La casa era muy linda, con paredes color blanco y madera marrón hasta la mitad, el recibidor tenía unos sillones color hueso con una mesita en el centro. Se veía excelente
— ¿Maison llegaron mamá y papá? — pregunta un niño bajando las escaleras, el pequeño se detuvo y miró a Maison confundido
— ¿Quién es él? — pregunta poniéndose junto a Maison
—Él es Blake Stevenson, nuestro nuevo vecino, y mí nuevo amigo — responde Maison mirando al pequeño
—Hola Blake, soy Charlie, hermano de Maison, tengo cinco años — dice estirando la mano
—Un placer, Charlie — le respondo estrechando su pequeña manito.

El hermano de Maison era muy simpático
— ¿Tienes hermanos pequeños Blake? — pregunta Charlie
—No, pero sí me gustaría — respondí, el pequeño asintió.
Alguien tocó la puerta y Charlie salió disparado a abrirla
— ¡Coop y Owen! — se escuchó el gritó desde la otra sala
— ¡Charlie no grites! — lo regaña Maison
—Este pequeño, es terrible — Owen traía a Charlie cargado sobre su hombro
—Él es Blake — les informa Charlie a los recién llegados
—Es nuestro nuevo amigo — dice Coop y el pequeño asiente
—Tengo que ir a la casa de Josh, vamos a jugar, ¡tiene juguetes nuevos! — dice emocionado
—Bien, te llevo luego — añade Maison —Voy a mirar televisión arriba — dice Charlie y Owen lo baja para que el niño subiera las escaleras corriendo como si no hubiese un mañana.
Me senté, y ellos frente a mí
—Es todo un personaje, ¿no crees? —
me pregunta Maison sonriendo
—Es un gran niño — respondí igual de sonriente
— ¿Qué te parece nuestra escuela? —
me pregunta Owen
—Es...interesante — afirmo y ellos rieron
— ¿Interesante? ¿por? — preguntan ambos
—La verdad, porque tiene de todo. Jamás había conocido personas así — asintieron como grandes filósofos
—Eres todo un filosofo Blake — afirma Owen y Maison coincide.

Me quedé en la casa de Maison unas cuantas horas.
Cuando llegué a mí casa y ese maldito sentimiento volvió, con más fuerza. Me quedé frente a la escalera mirando hacia ninguna parte.

Después de no hacer nada por un buen rato, llegaron mis padres.
Como me imaginaban ni siquiera notaron mí presencia. Se acordaron que existo solo cuando me llamaron a cenar.
Mientras ellos hablaban de cosas aburridas yo imaginaba cada momento de mí vida en Irlanda y de como todo se fue a la basura de una manera completamente espantosa.

No entendía porqué Sally me había engañado y para colmo con mí mejor amigo, la persona que creía que era como mí hermano estaba besándose con mí novia.
Me levanté de la mesa y después de lavarme los dientes me metí a la cama. Quería desconectar mi mente por algunas horas. Por lo menos aquí podría comenzar de cero.

*****~~~~*****

Desperté y me puse mí ropa. Estaba sin energías, mí cuerpo se movía solo porque era impulsado a seguir adelante.
Bajé y mis padres no estaban. Supuse que habían entrado a trabajar antes, la verdad mucho no me interesaba, estaba acostumbrado a estar solo.
Me preparé el desayuno y luego subí a lavarme los dientes.
Cuando estuve listo tomé mí mochila y alguien tocó a mí puerta. Me sorprendí al ver a Owen, Maison y Coop en mí puerta
—Hola Chicos — los saludé
—Hola Blake — me reciben
— ¿Tienes tu skate? — pregunta Owen
—Por supuesto — respondí
—Entonces toma tu skate y vamos a la escuela — dice sonriendo, lo tomé y fuimos a la escuela todos juntos.

Me gustaba tener nuevos amigos, ellos estaban conmigo y les caía bien y ellos a mí. Me pasaron a buscar por mí casa y eso me sorprendió.
Tal vez tendría que preguntarme por que después de todo parece haber más cosas por delante.

Llegamos a la escuela y mientras algunos estaban charlando otros terminaban sus tareas antes de entrar.
Me detengo y tomo mí skate, los chicos hicieron los mismo y entramos.
A duras penas recordaba donde estaba mí casillero.
De pronto un grupo de chicas pasa por un costado y me escanean con la mirada, eso era incómodo sin mencionar lo escalofriante que era.
Tomé mis libros
— ¿Qué clase tienes Blake? — me pregunta Maison
—Química — dije mirando mí orario
—Diablos — se queja Owen mirando su teléfono
— ¿Qué pasa amigo? — le pregunta Coop
—Nat está enferma y no puede venir a la escuela — se queja
—Uh, que se mejore — dice Maison y Owen asiente
— ¿Coop tú qué clase tienes? — le pregunta Maison
—Francés — dice balanceándose sobre sus pies.
No coincidía con ninguno de mis amigos, pero aún así en la próxima hora quedaba con Owen para ir a Filosofía.
Las horas pasaron rápido.
Iba caminando por el pasillo cuando me cruzo a Sean que iba sosteniendo una bolsa de hielo en su cara
—Hola Blake — me saluda con una media sonrisa debido al golpe
—Hola Sean, ¿qué te ocurrió? —pregunté señalando su evidente herida
—Nada, es solo que una pelirroja me hizo enojar, es todo — respondió dándose crédito como si fuera un héroe
"Dijo "pelirroja" debe ser Addy" eso es más que seguro
—Lo lamento amigo, pero que carácter esa chica — dije cruzando mis brazos
—No te preocupes, esa sexy rojita caerá a mis pies más rápido de lo que ella cree — dice alardeando
"Para ser honesto no creo que Addy termine con un chico como Sean "
—Fue una pena, pero no te preocupes Sean, la chica seguro se arrepiente de haberte golpeado — dije riendo a carcajadas por dentro, sabía perfectamente que Addison Hudson jamás se arrepentiría de haberlo golpeado
— ¿Sabes? Comienzo a creer que lo disfruta — confiesa pensando
—Bueno Sean tengo, que ir a clases, nos vemos. Que te mejores amigo —
¿no puedo ser tanto maldito verdad?
— ¡Nos vemos Blake! — me dice mientras se va por entre los pasillos de la escuela.
Llegué a mí salón y vi a Addy sentada sumergida en sus pensamientos.
No me vio llegar, pero igual me senté junto a ella.
La saludo y al parecer la saqué muy de repente de sus pensamientos. Estaba sonrojada.
Comento el incidente como haciéndome el bobo para confirmar que era ella la causante de esa fea marca en la cara de Sean. Era la cosa más obvia que había visto en mí vida, era evidente que había sido ella.

Addy si que eres una chica de carácter sin igual.
La clase terminó y tomamos nuestras cosas para irnos.

El resto del día continuó igual. No me cruce con Addy, pero sí con algunos de sus familiares y amigos. Creo que no les agrado.
Al volver a mí casa un poco más relajado subí y me cambié. Este día había sido un día interesante.

Capítulo 10: Pobre Blake.

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Un Beso!!

-Clari!