Posesivo [Dekubaku] {+16}✅

Capítulo Cuatro

Bakugo

Faltaban tan solo días para el cumpleaños de Toga, todo el castillo estaba igual que en el mio o el de Camie, con la delicada salud de mamá las tareas se dividieron entre papá, Camie y yo, en mi caso de enviar las invitaciones y verificar la asistencia de los que confirmaran, la mayoría de los nobles ya habían confirmado su asistencia y de los reinos sólo tres al menos se nota la lealtad que nos tiene cada reino, como siempre Lýkos fue el primero en confirmar incluso antes de que mandara la invitación, esa maldita doble cara.

-La señorita Mayu me dijo también que confirmaba sus asistencia al cumpleaños de la princesa.

Siempre se me adelanta a las cosas al menos una molestia menos en la lista de invitados, la carta fue entregada con éxito, aunque sabía de Dabi se enteraría esos dos no se guardan secretos, aunque son más posibilidades de triunfar en el plan.

-Mi señor - Deku entró ganándose mi atención - Llegaron - anuncio, eso sí que fue rápido.

-Bien, vamos -mejor decir pocas cosas a decir algo más, si Deku estaba aquí los fisgones también.

La celebración de Toga era una buena excusa para que llegarán antes de esta, más cuanto Mayu traía extravagantes regalos, al llegar a la entrada principal la vi de pie junto a su amado esposo, lleva un bonito vestido color azul pastel sencillo y tallas más grande, aún así su abultado vientre se dejaba ver, al verme sonrió haciendo una leve reverencia pues no podía hacerla adecuadamente.

-¡Tio Kats! - la nena de siete años de edad corrió abrazarme al verme bajar por completo.

-Yurio tus modales - regaño su padre.

-No te pongas celoso de que me quiere mas a mi que a ti - lo rete cargandola, aunque no lo admita en voz alta la mimo demasiado.

-No cambias Bakugo - mi amiga se acercó saludandome.

-¿Como te encuentras? - mire su abultado vientre.

-Es algo revoltoso pero voy bien - acarició su barriga sonriendole con cariño.

-Yurio vayamos a la habitación debes cambiarte - Deku le hablo sonriendole a lo que la niña asintio alegremente para luego bajar de mis brazos - Su majestad la acompañaré a sus aposentos temporales - me indicó a lo que asentí.

Mayu y su hija comenzaron a subir las escaleras, Deku la ayudaba a subir y procurar que no fuera a resbalar y caer, Yurio daba saltos en las escaleras y se detenía a esperar a su madre, mi mirada se centro en el hombre parado enfrente mío, alce una ceja cuestionando por que no va con ellas.