✳️ CAPÍTULO 13 ✳️

770 92 11
                                    

Jimin.

No, no era cierto. TN jamás sería capas de engañarme y menos con el.

— Park, baja el arma— pidió mirando la pistola que tenía contra su cabeza.

— lávate la puta boca antes de hablar de mi mujer— escupí

— ya no es tu mujer, dejó de serlo hace ya mucho tiempo.

Lo mire con repudio.
No podía confiar en su palabra, había sido mi enemigo por muchos años.

— Jeon Jungkook, más joven que tú, más atractivo y más inteligente— soltó una carcajada— claramente lo es porque estuvo con tu mujer bajo tus narices mientras tú creías que eras un mal esposo.

— vas a llevarme ahora a su casa.

JK.

— Buenos días— susurró mientras sus labios bajaban a mi cuello. Sonreí abriendo los ojos del todo y viendo la hermosa imagen de ella sobre mi totalmente desnuda.

— buen día. ¿Te supo a poco lo de anoche?— Pregunté acariciando su desnuda cintura.

Se sentó sobre mi y comenzó a moverse sobre mi miembro.

— contigo nunca estoy totalmente llena— beso mi pecho— siempre quiero más.

Sonreí y me apoye sobre mis codos.

así pasamos gran parte de la mañana. A las doce en punto decidimos darnos una ducha y salí a comer a un lugar alejado.

Cuando volvimos a mi departamento sentí un mal presentimiento.
Encendí las luces y ambos nos sorprendimos al ver la casa con todo tirado. Como si alguien hubiera entrado a buscar algo.

— quédate aquí, iré a revisar.

Reviste todo el departamento y nada o eso creí hasta que revise la habitación.

— maldito hijo de puta.

Era Jimin.

— Park — murmuré con repudio

Ningún de los dos dijo nada en los próximos segundos.
Hasta que oí un gritó ahogado por parte de TN, pero antes de que pudiera moverme Jimin ya había sacado su arma y está apuntaba directo a mi pecho.

— en estas últimas horas me he enterado de muchas cosas— sonrió de lado como un maldito criminal.

Tenia los primeros botones de su camisa rotos, como si los hubiera roto en un ataque de ira.
Tenía los ojos rojos — había llorado— y se le marcaba la vena del cuello.

— una de ellas es que tú y MI mujer me están viendo la cara...

— ya no es tu mujer— apreté los dientes enojado.

— es mía, mi mujer y lo seguirá siendo después de que te mate— le quitó el seguro al arma.

Sonreí de lado ante su terquedad.

— a demás de cornudo eres ridículo... ¿ O piensas que ella te seguirá soportando luego de enterarse que eres un maldito traficante?— escupí dejándolo sorprendido— ¿crees que querrá estar con alguien que la exhibe como un trofeo?, Con alguien que no puede ni siquiera tocarla por un ridículo trastorno men...

— ¡CIERRA LA PUTA BOCA!— gritó acercándose a mi y pegando el cañón a mi pecho.

— se todo sobre ti Park y no importa cuantos balazos me des, tu terminarás preso y lejos de TN.

Pasaron unos segundos los cuales solo nos miramos con odio, hasta que uno de los matones entro con TN inconciente en brazos.

Y ahí, al verla inconciente supe que no podía dejarla en manos de alguien tan inestable y peligroso como Park.

Y ahí, al verla inconciente supe que no podía dejarla en manos de alguien tan inestable y peligroso como Park

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
El pecado en carne propia.Where stories live. Discover now