𝕱𝖆𝖎𝖓𝔱

𝖈𝖊̄𝖗𝖔̂

En el seno de una familia millonaria, el presidente de Jung Enterprises ha fallecido dejando a un solo heredero; su único nieto: Jung Ho-seok.

⁂𖣔⁂

El el lecho de su muerte El señor Jung Min-Ho cambio su testamento dejando a su pequeño nieto de 7 años como único heredero de su fortuna, sus bienes y al ser mayor de edad, el control de toda su compañía, cosa que a sus hijos no les pareció, ya que siempre les había parecido un niño sin gracia ni carácter, era casi una burla que un niño con tan poco temple fuera el único que tendría todo el control además de que se creían más merecedores de todo.

Siendo huérfano desde los 4 años Jung Ho-seok había sido criado por su abuelo paterno quién había sido su único apoyo y fuente de educación, había recibido educación en casa de los mejores profesores de toda Corea y además tenia la mejor educación con respecto a valores éticos. Era todo un príncipe.
A pesar de que el pequeño Ho-seok parecía no faltarle nada, su familia nunca lo había aceptado y mucho menos querido, ya que decían que su nacimiento había sido una maldición tanto para su madre que había muerto durante el parto, como para su padre que había fallecido en un accidente de auto de un viaje de negocios.

⁂𖣔⁂

Cuando Ho-seok se enteró del deceso de su abuelo se escondió en el armario su habitación,lloro ahí escondido hasta que sus ojos se hincharon y se quedó dormido hasta que se hizo de noche.
Al salir nuevamente al pasillo arrastrando los pies y abrazando aquella frazada que su abuelo le había regalado a los 5 años, camina el despacho de su fallecido abuelo y escucha una conversión de sus tios Ji-hu y Mi-Suk, algo que no debió haber oído:

-y bueno ¿Que vamos a hacer con ese niño maldito?- pregunta su tía con voz aguda- padre le ha dejado todo a él...

Ho-seok sabía que a sus tíos no les agradaba porque siempre ponían caras muy serias al mirarlo, pero escucharles llamarle de esa manera era un shock.
Se recarga en la pared y comienzan a salir lágrimas de sus ojos, pero decide seguir escuchando porque finalmente se encontraban hablando de él.

-Pues diría que matarlo sería la mejor opción...-responde el tío y Ho-seok da un chillido, después se cubre la boca para que no noten su presencia ahí.

-¿Escuchaste eso?-dice la tía Mi-Suk interrumpiendo a su hermano.

Ambos se quedan en silencio en ese momento y Ho-seok ruega mentalmente que no lo hayan escuchado.

-Estas muy paranoica...-se queja Ji-Hu-...te decía, no podemos matar a ese niño ya que podríamos necesitarlo en el futuro porque el viejo le dejo todo. Así que he pensado algunas opciones durante el funeral...-la pequeña mandíbula de Ho-seok se tensa para no gritar y pone mayor atención a lo que dicen - pensé en llevarlo a un orfanato pero podrían adoptarlo lo que significaría un riesgo, también pensé en dejarlo en la calle pero que pasa si las autoridades lo encuentran, así que pensé que la mejor opción será llevarlo a un Hospital de psiquiatría, ahí podrán medicarlo y en una de esas podría cedernos toda la fortuna...

Sus parientes eran unos monstruos y ahora sabía la magnitud del desprecio que le tenían.
Corrió a su habitación y cerro con pasador la puerta, después se metió en el armario y se mantuvo en silencio escuchando, intentando respirar tranquilamente ya que se sentía ahogarse por todo lo que había oído de sus dos tíos.
Respiraba profundamente e intentaba no quedarse dormido, pero su fuerza de voluntad flaqueo hasta fallar cuando se quedó cerro lo ojos y el sueño lo venció.

Cuando despertó iba acostado en los asientos de atrás de un auto, se enderezó y vio que su tío conducía, trago saliva. Era verdad lo que estaba hablando con la tía Mi-Suk.