Amor de reemplazo

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Cuando cayó la noche Jimin se había sentado en en pasillo con Yejun en sus brazos para que durmiera... Cuando este lo hizo esperó un rato más hasta que no hubiera riesgo en despertarse.

En un momento de la noche se levantó del suelo y fue a dejar a Yejun en la cama... Dejó la puerta abierta y se volvió a sentar en el pasillo esperando por Jungkook.

Las palabras de su padre rondaban en su cabeza una y otra vez... No podía imaginarse a Seokjin y Jungkook juntos en un plan romántico, pero debía admitir que ellos sí se llevaban demaciado bien y también debía admitir que jamás había escuchado que Jungkook tratara a Seokjin como un empleado... Suspiró pesado y secó sus lágrimas con fuerzas. Ahora no sólo sentía celos de Yungyeom sino también de Seokjin, su padre y Tae se habían encargado de hacer sus dudas mucho más grandes.

Cuando Jungkook subió el último escalón Jimin se dio cuenta y se levantó rápidamente para correr hasta él.

-Bienvenido a casa señor Jungkook–Jimin se forzó a sonreír pero Jungkook lo ignoró por completo. -Quería decirle que como Yejun ya está mejor volveré a la escuela...

-¿Y que quieres que haga?–Preguntó Jungkook serio.

-Nada sólo quería avisarle de lo que haré...

-No me importa que hagas–Jungkook abrió su habitación y suspiró para verlo. -Solo no me jodas...

Jimin se quedó con las palabras en la boca cuando Jungkook le cerró la puerta en la cara, intentó abrir la puerta pero está tenía seguro... Con cuidado soltó la manija y a pasos lentos se fue a su habitación.

-Tu papá llegó estresado otra vez cariño–Jimin se sentó en la cama y acarició el rostro de Yejun. -No sé como el señor Yungyeom pudo dejarte si eres una dulzura y sé de antemano que no se fue por que tu padre lo trataba mal... Él lo amaba mucho y a ti también...

Yejun suspiró y Jimin se le acostó al lado abrazandolo, estaba cansado y no sabía que hacer.

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-Pensé que no vendrías hoy tampoco–Comentó Tae y se paró al lado de su amigo.

-Hola Tae...

-Oh y te aviso de una vez por si te interesa–Tae puso la mano en el hombro de su mejor amigo con el cual no había hablado en muchos días. -Tengo un novio muy lindo...

-¿Ya son novios?–Preguntó Jimin sorprendido.

-Si, Hobi hizo un acto muy lindo en el comedor para pedirme ser su novio oficial–Tae saltó frente a él y le mostró la cadenita que colgaba en su cuello. -Me la dio por ser su novio...

Jimin lo tomó y sonrió... Miró a Tae y lo abrazó contento.

-Te felicito amigo, yo sabía que serían novios–Jimin se separó y su sonrisa fue desapareciendo al ver el rostro de su amigo. -¿Que pasa? ¿Por qué no estas feliz? Tienes un novio muy lindo...

-Estoy feliz por mi novio... Pero no estoy feliz contigo–Tae frunció las cejas. -No puedes llamarte mejor amigo si no estas cuando te necesito...

-Tae yo...

-No, para ti solo existe ese estúpido señor Jungkook.. Yo ya no te importo Jimin...

-Tae no digas eso–Jimin le iba a tomar la mano pero su amigo no lo dejó.

-Para ti solo existe Yejun y Jungkook... Pues quedate con ellos y no me vuelvas a hablar...

Jimin suspiró pesado y corrió detrás de su amigo para rogarle, no podía perderlo a él que era su único cómplice en miles de cosas.

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Jimin estaba en el salón de prácticas que quedaba detrás de la casa, no sabía que lo tenía tan enfurecido pero estaba sacando todo lo que sentía en los golpes que le daba al saco de boxeo.

Baek al verlo así dejó a Yejun en el caminador y se acercó a Jimin donde le agarró los brazos con fuerza.

-¿Que pasa?–Preguntó Baek serio. -Estas entrenando con ira..

-Estoy frustrado–Jimin suspiró pesado. -Nada de lo que hago esta bien..

-¿A que te refieres?–Preguntó Baek confundido.

-Papá y Tae están enojados conmigo por que quiero estar con Jungkook–Jimin lo abrazó y cerró los ojos. -Abrázame, hace mucho nadie lo hace...

Baek lo abrazó y le acarició la espalda con cariño.

-Baek tu también harías todo lo posible para ver a mi papá feliz.. Tu lo amas...

Baek sonrió levemente y suspiró.

-¿Por que nadie puede ver que solo quiero ver al hombre amo ser feliz?–Preguntó Jimin cansado.

-Primero... Tu padre es un gran hombre y él merece ser feliz, y si.. Puede que ame a tu padre pero eso no significa que debo someterme a hacerlo feliz, por que tengo muy claro que tu padre jamás me querrá así que no hay nada por que esforzarme–Baek separó a Jimin y le sonrió. -Tu padre aún ama a tu madre, así como el señor Jungkook aún ama al señor Yungyeom... No te diré que debes hacer por que eres un joven con mucha voluntad...

-¿Pero? Siempre hay un pero–Jimin sostuvo el aire en sus pulmones esperando la respuesta.

-Pero siempre debes saber si debes o no luchar... No todas las batallas se ganan Minnie, no puedes dejar que alguien este contigo solo por agradecimiento y no por amor...

Jimin soltó el aire y bajó la cabeza.

-Es bueno escuchar el corazón... Pero también es bueno escuchar a nuestra razón... Y ambos conocemos a tu padre, él jamás se meterá en tus decisiones, le gusta que tengas carácter y eso te servirá mucho para el futuro...

-¡Paaaaa!–Gritó Yejun y corrió en el caminador.

Jimin sonrió y detuvo al objeto que se iba a entrellar con una mesa.

-Deja tus piesecitos quietos–Jimin sacó a Yejun del caminador y lo cargó en sus brazos. -Me debo ir, Yejun debe comer...

-Ok, le diré a los chicos que lleven las cosas de Yejun después.. Vete antes de que empiece a llorar...

Jimin rio suave y llenó de besos la regordete mejilla de Yejun haciendolo reír... Todos agonizaban al escucharlo llorar y Jimin solo podía sufrir, no sabía por qué pero siempre le dolía ver llorar al menor.