Introducción

118 65 40
                                    

Quisiera volver a verlos, aunque sea un momento, ha pasado 5 años desde la última vez que los vi y esperare con ansias a que llegue ese momento para volver a verlos.

-5 Años Antes-

Hace un tiempo vivía una familia la cual la gente decía que tenían un libro el cual era capaz de cumplir todos los deseos, y también liberar temibles criaturas, aunque si caía en las manos equivocadas podría desatarse un apocalipsis demasiado catastrófico, que ningún ser humano podría sobrevivir.

-Y bueno esa es la historia familiar, aunque no sé si sea verdad.

-Entonces estás diciendo que ese libro ¿podría existir?

-La verdad no sé si en verdad exista, es solo una historia que nos han contado nuestros Padres.

-Puede que ese libro no exista.

- En la biblioteca vi un periódico de 1852, donde había una noticia sobre una destrucción la cual apenas habían sobrevivido algunas personas en especial una, se llama Robert Young, él era fanático de lo sobre natural, aunque sobrevivió, pero eso fue hace mucho tiempo ahorita posiblemente ya murió.

-Oye crees que sea tu abuelo él se apellida igual que tu Young, por algo sus padres les contaron la historia.

-La verdad no sé, pero si en verdad ese libro existiera podría ser peligroso, ya ves que dice que puede cumplir tus deseos, pero también puede desatar un desastre terrible que nadie podría sobrevivir, o simplemente te volvería loco hasta consumirte el alma.

-Enserio, y si lo encontramos y así me cumple mi deseo de que seas mi novia. -expreso burlándose.

-Ash-dije tirándole una almohada en la cabeza-Eres un idiota.

-Pero aun así me quieres.

-Por favor ya anden.

-Oh al parecer alguien quiere que le lance una almohada también.

-Era una pequeña broma, no te enojes.

A pesar de que él y mi hermano se llevaban bien básicamente los tres crecimos juntos, los quiero aunque también me gusta Aaron pero sabía que no sería fácil, sabía que él quería que fuera su novia pero... hay una chica tras de él, aunque ella era muy diferente a mí, ella se maquillaba y usaba lindos vestidos pero en cambio yo nunca usaba maquillaje, y ni me gustaba ponerme vestidos al contrario yo era playeras y jeans con tenis, la verdad es que yo no creía nada sobre el amor, a veces decía que no quería salir con nadie, pero todavía tengo miedo a enamorarme, desde la vez que veía a mis padres felices, pero después de lo que le paso a mi padre, ya nada era igual, espero que así siga siendo, sabía perfectamente que Aaron y esa chica se verían muy bien juntos.

-Bueno iré por un vaso de agua, ¿quieren que les suba algo? -exprese con una voz un poco desanimada.

-Yo no quiero nada hermana ¿y tu Aaron? -

-No gracias así estoy bien.

-Bueno- me dirigí a la cocina por un vaso con agua, cuando de repente escuche a mi madre gritar por teléfono ¨Estas seguro que ese libro está muy bien guardado recuerda lo que le paso a nuestro padre, no quiero que por ninguna circunstancia caiga en manos de mis hijos o de cualquier persona¨

-Te prometo que ese libro está en un lugar que nunca lo encontraran, ni hoy ni nunca

-Espero que así sea, porque ya sabes lo que pasa cuando me desobedeces.

-Lose muy bien, todavía no te perdono que me hayas cortado el dedo.

No podía creer lo que había escuchado como mi madre le había cortado un dedo a una persona quede totalmente petrificada que no me había dado cuenta de que mi madre se estaba acercando a mí.

-Hija ¿estas bien?, estas pálida.

-Oye, ¿vas a subir o no?

Escuchar la voz de Aaron me hizo reaccionar, aunque todavía estaba un poco en shock, asentí y subí rápido a mi habitación, aunque Carlos y Aaron estaban preocupados por mí por lo pálida que me veía me daba miedo contar lo que había escuchado, pero también sentía rabia como podía ser posible que mi madre pudiera hacer eso, sentí mi estomago cada vez más pesado por todas las emociones que sentía en ese momento, no podía explicar nada solo agarre mis llaves y mi cartera para irme, no entendía nada solo escuchaba la voz de Carlos e Aaron llamándome pero no quería seguir en esa casa, y más con lo que había escuchado, me sentía abrumada quería escapar, pero algo me decía que no podía dejar a mi hermano solo con mi madre, tenía que saber dónde podía tener el libro, tal vez podía usar ese deseo y así traer de vuelta a mi padre. Pero.... algo me decía que no lo usara la verdad es que extrañaba mucho a mi padre, aunque mi abuela me decía que siempre estaría en mi corazón, pero quería tenerlo cerca, tener un abrazo de él y que me dijera que todo iba a estar bien, tratare de ser fuerte por mi hermano, aunque él no merecía una madre así.

Aunque no sabía cómo comportarme con mi madre, después de lo que había escuchado, la verdad sentía nauseas con tan solo pensar en eso, estaba tan perdida, hasta que una voz que hace tiempo no escuchaba me llamaba.

-Lili ¿eres tú? - respondió sorprendido.

-Si, soy yo- respondí un poco confundida como era posible que supiera mi nombre, hasta que recordé que era Bradley mi primer amor, recuerdo muy bien como era la primera vez que lo vi tenía la piel clara, ojos color marrón claro, él era el chico más popular de todo el instituto, en ese tiempo quería que me mirara, aunque le había mandado una carta confesándole mis sentimientos, después de eso  el nunca apareció, todo ese amor que alguna vez sentí pensé que se había ido, pero porque tuvo que volver, esos sentimientos ¿estaban enterrados?, o ¿porque me siento confundida por el?, ¿era posible tener sentimientos por dos personas?. Tenía tantas preguntas en mi cabeza, que no podía responder con claridad.

-Hey, todavía te acuerdas de mi verdad, íbamos juntos en la escuela secundaria, la verdad es que tenía ganas de verte, desde hace mucho tiempo, pero al parecer cambiaste de número, así que fue un milagro que me encontré aquí. Ten este es mi número, por favor mantente en contacto conmigo, ¿De acuerdo?

-Claro que sí, lo prometo.

El SacrificioWhere stories live. Discover now