BLACK ANGELS

cap 11- Alas negras

Narra Julie

Habían echado a Bianka de Black Angels.

Yo estaba hablando con Fran sobre lo que acababa de pasar con Bianka y el amigo de Marco. Estábamos en la puerta de la casa cuando vimos salir a Bianka llorando. Me la quedé mirando y ella me dedicó una de sus miradas asesinas.

-Estarás contenta- Me dijo ella, caminando hacia su coche.

-Porque debería estarlo?- yo le seguí

-Ahora Marco es todo tuyo.- Respondió con una sonrisa falsa.

-No me gusta Marco.

-Si, seguro. Bueno, no importa. No puedes tener nada con el. Recuerdas tu lista de normas verdad? Mas precisamente la numero 4?

Dicho esto la bruja se subió a su coche y me "sonrió" por ultima vez.

 Cuando el coche de la chica se alejó  salió Marco del interior de la casa.

-Julie- dijo el haciendo que me girara para verle- vamos, yo te acompaño a hacerte el tatuaje.

El tatuaje... con todo lo que había pasado ese día ya se me había olvidado.

Subí al coche con Marco y fuimos hacia la ciudad.

-Nerviosa?- preguntó el al ver que yo empezaba a sudar.

-un poco- le respondí.

Yo estaba muerta de miedo, y hacía la estupidez de mirar por la ventana para ver si veía a alguien conocido para que me sacara de allí, pero nada. Lo único que pude sentir fue la mano de Marco que iba rozando la mía, asta entrelazar nuestros dedos.

Estuvimos así todo el camino, en ningún momento le mire, pero podía sentir que estaba allí.

Llegamos al taller de tatuajes .

Narra Marco.

Veía muy nerviosa a Julie, pero le entendía,tener que marcarse así, para toda la vida...

El taller de tatuajes era de un amigo mio, el hacía todos los tatuajes para Black Angels.

Entramos y Salvo (mi amigo) hizo que Julie entrara en la sala, se quitara la parte de arriba y se tumbara en la camilla. Nosotros esperamos en la sala de espera a que la chica acabara.

-Que te pasa tío?- Le dije a Salvo, lo veía muy desanimado.

-pues que mañana tengo un funeral.

-Un funeral? de quien?- dije sin pensar, quizás no quería hablar de eso.

-Ciara, la novia de mi hermano, la han matado esta mañana. Pero no se sabe ni como a sido, ni quien...

En ese momento se escucho la voz de Julie desde el otro lado de la puerta, avisando de que ya estaba.

Entré, Salvo fue a atender una llamada en recepción.  Yo seguía impactado por lo que me acababa de contar Salvo, Ciara... no sería...?no, imposible, hay muchas Ciaras en Italia.

Julie ya estaba tumbada y con los ojos cerrados, para no ver la aguja supongo.

-Lista?- Le susurré dulcemente, agachándome para estar a la altura de su cara. Ella abrió sus ojos y me miro, en ese momento me di cuenta de lo bonitos que eran, y de que me encantaban.

-No.- Respondió ella, sabia que diría eso. De repente una lagrima recorrió su mejilla y, no se si fue porque me parecía muy tierna o para que se calmara, me acerqué a ella con la intención de besarla. Cuando estábamos muy cerca, tanto que ya podíamos sentir la respiración del otro, entro Salvo a la sala.

-Interrumpo algo?- dijo el incomodo.

-No, tranquilo.- Respondió Julie rápidamente.

-bueno, pues vamos a hacer esas alas nena.- Tras decir esto Salvo se sentó en un taburete y empezó con el tatuaje.

Yo observaba el rostro de Julie, le estaba doliendo muchísimo. Me sentía culpable por ello, por haberla llevado ahí.

Unas largas horas después Julie ya formaba parte oficialmente de Black Angels, y no había vuelta atrás.

Salimos del taller y me despedí de Salvo, Julie no habló y fue directa a donde estaba el coche. Me senté en el asiento del conductor y me la quedé mirando.

-No vas a arrancar?- Me preguntó ella enfadada.

-Estas bien?- fue lo único que se me ocurrió decir.

Julie me miro y negó con la cabeza. Empezó a llorar, no soportaba verla así.

De repente nos encontrábamos abrazados, yo calmando a Julie y consiguiendo que dejara de llorar, y ella acercándose cada vez más a mi boca.