Ustedes me enseñaron tantas cosas, y me aceptaron como parte de ustedes como si fuera su propia hija, su amiga, compañera... por eso y más es que... Les agradeceré infinitamente.
—¿Donde coño estará...?— me pregunte al estar ya casi una hora buscandola.— ¡¡JODER!! ¡¿DONDE ESTAS [T/N]?!...
Narra omnipresente:
El joven rubio cenizo se encontraba en el último piso de su academia, había revisado cada esquina de cada piso y nada en busca de la pequeña [t/n].
Su última esperanza era la azotea...
—Espero que este ahí...— abrió la puerta y pasó con calma hacia la azotea.
Miro todo su alrededor y lo que vio...
—Que puto asco...— dijo al ver a una pareja besándose.
Se marchó azotando la puerta.
Corrió por décima vez en todos los pasillos.
Las clases habían acabado y era una de las últimas personas en la academia.
—No la encontraste...— escucho la voz de su profesor.
El con mala gana y un terrible dolor de cabeza lo miro.
—Katsuki...— [t/n] saco su cabeza de detrás de mayor.
—¡[t/n]!— corrió y sujeto a la pequeña entre sus brazos.— [t/n]...
—Katsuki...— ella lo abrazo con fuerza.
—Mientras la buscabas ella no pudo controlar su quirk...— le aviso el mayor.
El adolescente se sorprendió al escuchar eso y lo miro pensando que era mentira.
El mayor solo asintió.
—Lo siento mucho Bakugo-kun...— escucho una voz desconocida.
El giro el rostro y se encontró al doctor de hace unas semanas que estaba con dos policías.
—¿Que hacen aquí?— pregunto pensando lo peor.
—Lo sentimos Bakugo-kun...— dijo el doctor colocando su mano en la espalda del joven intentando "minimizar" la posible reacción agresiva del oji-rubi.— La tendremos que aislar para enseñarle a controlar ese quirk...
—No se atreverían...— el joven oculto a la pequeña con su cuerpo.
—Por favor Bakugo-kun- —
—¡¡No se atreverían a separarla de mi!!— les grito con furia en su voz.— ¡Larguense!
—K-katsuki lo siento...—
—No te disculpes [t/n]...— el chico suavizó su voz con la niña.
—Esto no puede seguir así...— el doctor quería llegar al sentido común del joven.
—¡¿Y que tanto hizo [t/n] para que quieran llevársela?!—
—Mando al hospital a unos alumnos del departamento de recursos generales...— le dijo el profesor Aizawa.— La encontré en el momento justo en donde su quirk ya estaba descontrolado y esos alumnos se quedaron en medio de ese humo aparentemente casi mortal... Creemos que ellos la quisieron ayudar y ella se alteró y no pudo controlar por más tiempo su quirk...
—¡F-fue un accidente! ¡Lo siento!— grito la pequeña ligre derramando mares de lágrimas.
—Denme un poco más de tiempo.— dijo el peli-cenizo.
—No la has "entrenado" y dudo mucho que lo empieces a hacer...— dijo el profesor haciendo que el doctor se sorprenda.
—¡Por que cada vez que le digo a [t/n] "Vamos a entrenar" se asusta al punto que no se mueve de su lugar!— grito el joven ya desesperado.— ¡Yo he estado con ella no ustedes! ¡Ella está asustada y ustedes la están asustando más!— grito señalando al doctor y los policías.—¡Solo... Solo... Denme un poco más de tiempo...
Los adultos se quedaron callados al ver que el chico estaba temblando del enojo.
—¿Por que no puede ser igual de comprensivo con [t/n] igual que lo hizo con Eri?...— Aizawa se quedó paralizado al percatarse de su falta de comprensión en la situación de su alumno.
—Váyanse por favor...—
Por lo dicho del héroe profesional el doctor se marchó con los policías al frente de el.
Dio un último vistazo hacia atrás esperando no ver al joven y la pequeña en estas circunstancias.
—Bakugo...—
—¿Que quiere?...— dijo cortante mientras suavizaba su agarre en la ligre al ver que se había quedado dormía mientras seguía llorando.
—Mañana, sábado, harás que [t/n] trate de controlar un poco su quirk, no importa como lo hagas, vendré en la tarde para ver tus resultados y te ayudaré desde ahí...¿Entendido?...—
—Ajá...—
El chico se levantó cargando con cuidado a la pequeña y se marchó dejando al mayor pensando en sus acciones.
—¿Usted cuidaria a Eri con su vida verdad?...— pregunto el oji-rubi mirando de reojo al mayor.
—Claro que si...— dijo mientras asentía.
—Yo también lo haría por [t/n] pero no quiero que por cuidarla tenga que hacer algo que de seguro le trae malos recuerdos...— dijo mientras pasaba su pulgar secando un poco las lágrimas de la niña.— Ella también puede tener una vida normal, y yo se lo haré posible...
Eso fue lo último que dijo y procedió irse a los dormitorios.
—Esa niña te a hecho madurar muy rápido Bakugo Katsuki...—dijo mientras llamaba a alguien.— Mañana tendremos compañía en tu entrenamiento... Prepárate...
Se fue pensado como hará todo mañana...
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777 palabras. Publicado:20/11/2022.
El capítulo fue corto porque he decidido que la historia terminara pronto y me estoy organizando.
