𝓕 | II

55 7 0
                                    


02. JULIETT, JULIETT, JULIETT...

Había pasado una semana después de ese desayuno, donde Hermione preguntó sobre Harry

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Había pasado una semana después de ese desayuno, donde Hermione preguntó sobre Harry.

Lyra realmente no quería que él llegara, pero sabía que no lo podía evitar, después de todo, era la casa de Sirius y él amaba a Harry.

La chica Malfoy estaba muy arrepentida por haber tenido algo con Harry y haber perdido la amistad que tenía con él, o por lo menos, que antes sí soportaban estar juntos en un mismo lugar y ahora no era así.

Ambos a inicios del cuarto año, tenían una tensión sexual que llegó hasta el punto que no aguantaron más y se besaron, y fue donde empezaron una relación, sin esperar realmente nada. Sin embargo, a finales del año, fue cuando todo acabó.

Todo terminó cuando Lyra vio cómo Harry se besaba con otra chica, después de eso, las cosas se hicieron incómodas al no haberlo hablado bien. Sinceramente, a Lyra no le dolió que Harry se hubiera besando con otra chica, sólo le molestó que lo hiciera cuando tenían algo. Y Harry, bueno, ni siquiera podía ver a Lyra a la cara como para hablar.

La relación que tenían ahora de que ni siquiera podían estar en un mismo lugar era una tontería, que no había sido solucionada por la falta de comunicación.

«Espero que cuando llegue Harry, hablemos» pensaba Lyra mientras se encontraba limpiando junto a Ginny, la hermana menor de Ron, una de las habitaciones del tercer piso que tenía demasiado polvo.

Ginny era una chica muy extrovertida y decidida, tenía el cabello pelirrojo y pecas en su rostro. A Lyra le gustaba hablar con ella sobre Quidditch y escucharla cuando ella se quejaba de sus hermanos o de lo tonto que eran los chicos.

—¿Cuando crees que terminemos de hacer esto? —le preguntó a Lyra.

—Bueno, faltan más habitaciones todavía —contestó, sin dejar de limpiar. Ginny se quejó.

—Odio esto —murmuró. Entonces se escucharon dos fuertes estampidos, eran Fred y George, se habían aparecido de la nada en medio de la habitación.

—¡Este no es el momento para aparecerse, idiotas! Mejor hagan algo y ayuden a limpiar en vez de estar jugando—les gritó Ginny a sus hermanos, que tenían el mismo cabello pelirrojo que ella.

—¡Sólo le estábamos enseñando a Juliett sobre lo buenos que somos apareciéndonos! —dijo Fred con una sonrisa. A su lado, George asintió.

A Lyra se le hizo raro verlo tan callado.

—No son tan buenos como yo —habló Juliett, apareciendo a lado de ellos.

FORBIDDEN ━ WIZARDING WORLDWhere stories live. Discover now