Final extra

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Derrotar al Devorador de Mundos debía de ser la hazaña más grande que todos los héroes de la Tierra, pero por más mutantes que hubieran y por un nuevo equipo de Vengadores después de diez años del asesinato de los anteriores, no podían contra el humanoide quien dado a su tamaño y a los poderes que tenía, derribaba por docenas a los héroes.

– ¡Galactus! – exclama una voz masculina llegando al lugar, siendo reconocida por todos los presentes, quienes se giran a ver...

Al mutante más poderoso de todos, aquel que había ocasionado un desastre en la Casa Blanca por lo cual la mayoría le metía, Magneto. A quien sin importarle las miradas hace que los grandes metales de los edificios derribados por el titan se dirijan hacia este para intentar atravesar su cuerpo, más Galactus los esquiva y elimina con su poder.

– ¡¿Crees que le tengo miedo a tus metales?! – cuestiona de forma burlón puesto que eso no lo detendría, si podía contra decenas de héroes, él no era nada

– No creo que deberías de tenerme miedo solo a mí – contesta Magneto con una sonrisa de lado

El humanoide iba a decir algo hasta que siente como algo una inmensa energía es expulsada hacia su cabeza, de inmediato, se gira para atacar, pero cuando lo hace Magneto le vuelve a lanzar todos los metales en el mismo lugar donde era atacado, su cabeza. Con la energía y los metales, el casco de Galactus termina rompiéndose. Todos los héroes al ver a Galactus débil por aquella parte empiezan a atacarlo con sus poderes.

Galactus termina derribado en el suelo e intenta pararse hasta que el Dios del Trueno invoca al poder de los padres de todo para así originar el trueno más poderoso con el cual lanza su stormbreaker hacia la cabeza del villano, hacia su cerebro. Más aun así, Galactus se resistía a morir por lo cual Magneto usando su magnetismo impulsa y hace enterrar aun más al hacha del Dios del Trueno, mientras que a su vez, cierta heroína le lanza su energía fotonica, algo característico solo de una persona...

Por lo que Thor, al igual que la mayoría de héroes ya antiguos se giran a ver a la mujer de la cual provenía aquel poder, Carol Danvers.

La Capitana Marvel estaba de regreso con su poder y con su traje, aquel que ahora no tenía sus colores vivos en brillo, estaban opacos y algo oscuros como alguna vez se convirtió en la Capitana Marvel Oscura. Pero esta vez, era diferente, ella era consciente, había dejado ese pasado atrás para volver a pelear porque esa sí era una emergencia.

Y es así como, con tanta presión que ejercían los poderes de dos de las personas más poderosas del planeta, Galactus termina muriendo. Victoria por la cual, la mayoría de héroes que estaban en los cielos, aterrizan para abrazarse entre ellos dichosos de que finalmente el caos había acabado. Claramente muchos eran amigos entre ellos, después de lo sucedido hace diez años, por más equipos que fueran, los héroes sabían que siempre debían de estar unidos.

Sin embargo, para cierta parte de los héroes, la alegría no es completa puesto que sus miradas se encontraban fijas y analizantes hacia la Capitana Marvel. Magneto al notar eso le hace una seña a la mujer para que aterrice junto a él para que ambos se dirigieran hacia la única persona que no los juzgaba por los actos terribles que cada uno había hecho.

– Erik, Carol... – los saluda Charles acercándoseles con su silla de ruedas y apartándose de sus X-Men ante la sorpresa de ellos por la actitud hacia aquellos dos – Me alegra que hayan decidido venir

– Esta era una verdadera emergencia a la cual no podíamos faltar – responde Erik con una leve sonrisa, hace mucho no veía a su amigo, desde su boda

– Si y nos alegra haber sido de ayuda – agrega Carol con sus ojos dorados brillando al ver como después de una batalla, siempre salía el sol

Capitana Marvel: La Última VengadoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora