Poliandria (+18) parte 2

Capitulo 6: El reencuentro (nuevo)

Me cuesta levantarme el día siguiente, siento que la burbuja que cree está por explotar de un todo con lo que pasó ayer, doy vueltas en la cama, y veo al techo por lo que me parece una eternidad.

Decido hablar con mi mejor amigo, contarle absolutamente todo lo que me sucedió.

Busco mi teléfono y recuerdo que ayer ni siquiera lo ví cuando llegue, me dormí y cuando desperté de nuevo solo ví televisión para dormirme de nuevo, un día libre totalmente desperdiciado.

Me levanto y me doy un buen baño, me coloco un jogger y una blusa de algodón, cepillo mis dientes. Ayer no comí absolutamente nada y ni siquiera tengo hambre.

Salgo para recuperar mis cosas y preparar algo con que alimentarme.

Nate no sé encuentra por ningún lado y siento alivio. No quiero otro show de drama y súplicas.

Me pongo hacer un delicioso sandwich de tomate, lechuga, jamón y queso. Y hago una video llamada a Jonas, quien aparece en todo su esplendor caminando por lo que creo es un pasillo de su universidad.

-Hija de puta! Hasta que resucitaste! Pensé que Nate te había matado a pollasos!

Ya lo que dice me hace reír.

-Ojala! Si supieras!

-Estoy en la universidad, tengo cinco minutos! Habla ya, porque si no me pierdo la clase!!

Resumo todo lo que puedo y quedamos en hablar apenas se desocupe, me siento más tranquila después de soltar todo.

Voy hacerme un café cuando veo que no hay.

Golpeo mi cabeza en la mesa varias veces.

Sin café no puedo existir!!

Salgo así tal cual, solo que me coloco unos botines peludos! Ni me peino.

No voy a comer si café!

El día está espléndido, hasta parece que mi vida no se volvió vergas otra vez.

Hay carro lujoso parado frente a la entrada, pero la verdad con el afán lo ignoro, sin embargo doy unos cinco pasos cuando llaman a mi nombre.

Cierto mis ojos.

Ahora estoy alucinando!

-Sky - está vez la voz se escucha más cerca y me giro.

Runner Backs. Sin piercings y vestido casual.

Mi cejas llegan hasta el nacimiento de mi cabello.

Afinó la vista porque se ve muy diferente.

-Runner? - Se que es el, pero le idiotez pregunta por mi, porque bueno... no he comido y mi cerebro no está trabajando al cien.

Sonríe, sonríe hermoso, y a él la sonrisa le llega a sus ojos grises, se ve tan bien que combina con el día. Mi rostro refleja al suyo y por inercia camino a el y lo abrazo.

-Princesa...

Suspiro de gusto, no sé si es el, si es la situación, si soy yo, solo se que siento este abrazo vomo todo lo que necesitaba.

-¿Qué haces aquí? - pregunto aún contra su pecho.

-Vine por ti.

Suspiro y me suelto, alzó mi mirada hasta su rostro que parece que está más alto que antes.

Una moto hace un estruendo haciendo que el ruido nos distraiga a ambos, la moto sube hasta la acera frenando muy cerca haciendome brincar, a mi y a los transeúntes.