Patines y chocolate caliente ⚘˖ִ໋ Yoontae

ᴄᴀᴘÍᴛᴜʟᴏ 4

Las delicadas brochas pasaban por el rostro de TaeHyung.

Polvo, sombras, rímel, labial. Maquillaje que hacía ver al Omega hermoso.
Remarcada sus facciones delicadas y le daba brillo, además de que escondía sus ojeras y la obvia falta de sol que había en la ciudad.

El traje que escogieron para que el Omega modelara era ridículo.

Unos shorts que llegaban arriba de su rodilla de color azul cielo, eran apretados, pero la tela era cómoda, tenia un top del mismo color sin mangas que dejaba ver sus hombros delicados y también le dieron unos patines negros.

El director quiso darle un aspecto artístico a la campaña por lo cual su maquillaje era exagerado, se veía bien con esa sombra de color azul fosforescente, era brillante y estaba delineado por fuera con blanco y diamantes de fantasía que pegaron a su rostro.

TaeHyung se veía bien, pero muy poco realista.

El Omega mantenía una sonrisa a pesar de que estaba congelándose, tenía hambre y muchísimo sueño, pero esta era una campaña importante de un patrocinador que lo apoyaba demasiado.

Estaba en medio de la pista, después de unas fotos cambiaron los tenis por unos patines negros que sentía un poco incómodos pero podía patinar perfecto en ellos.

Los Alfas del equipo de hockey llegaron a la pista y al ver a TaeHyung empezaron a burlarse más y comenzar con comentarios que incomodaron al Omega.

Le pedían que hiciera poses, que se viera que estaba divirtiéndose, que estaba feliz y cómodo. Por un lado no le incomodaba el vestuario y el maquillaje, lo hacían ver bonito, pero tenía frío y los Alfas juntos a él no eran de mucha ayuda.

El entrenador Kim los mando a correr pero el único que se quedó fue YoonGi con la excusa de que ya había corrido y ahora tenía que limpiar sus patines.

De vez en cuando veía a TaeHyung.

Se veía hermoso.

Sus ojos azules resaltaban.

Sus marcadas curvas no se escondían.
Su fino rostro se veía perfecto.

Además de que el Omega se veía feliz en cuanto los Alfas salieron de la pista.

La sesión terminó y YoonGi se acercó a donde estaba TaeHyung saliendo.

El Omega empezó a temblar un poco por el frío.

Min extendió su chamarra de algodón para que TaeHyung se cubriera. Al tenerla puesta la chamarra cubría técnicamente todo el cuerpo de TaeHyung, lo hacía ver adorable.

— ¿Ahora eres modelo?

Kim bajo la mirada un poco avergonzado.

Probablemente no era su cosa favorita acerca del deporte. Odiaba las sesiones de fotos, los patrocinadores pidiéndole que fuera más sexy porque de esa forma vendería más de la ropa que usa, la forma en que miles de personas lo veían como una cara bonita en lugar de un atleta, pero ¿qué podía hacer? claramente no era millonario y el gobierno no le daba el dinero suficiente a pesar de ser un atleta estatal.

Las lecciones eran caras, los patines, trajes, material, seguros médicos por si había alguna caída mala, etc. eran increíblemente caros. TaeHyung no podía simplemente vivir de lo que su padre le daba o su trabajo como entrenador de niños.

— No exactamente, es una campaña para uno de mis patrocinadores — El Omega se acercó a la banca donde estaban sus tenis.

YoonGi se sentó junto a él.

— Hemos tenido patrocinadores, nunca nos han pedido una sesión de fotos — Rió YoonGi — Creo que te gusta mostrar tu cara bonita al mundo, Kim.
TaeHyung rodó los ojos.

— Ya te estabas tardando, Min — El Omega se levantó y quitó la gran chamarra de sus hombros. Tembló por el repentino cambio de temperatura. Su abdomen, brazos y piernas estaban descubiertas.

YoonGi quiso poner sus manos en la marcada cintura del Omega para conocer si se su piel era cálida.
espera, ¿qué?

Min sacudió la cabeza, TaeHyung ni siquiera se dio cuenta de la mirada perdida del azabache en su cuerpo.

— ¿A qué te refieres?

TaeHyung empezó a caminar fuera del área de la pista para dirigirse a los casilleros. Su pesada mochila tenía su cambio de ropa normal.
YoonGi lo siguió.

— No me ignores, Kim.

TaeHyung se volteo a verlo al llegar frente a su casillero.

— ¡Siempre me demuestras lo poco que te importan todos los demás! — Se quitó el top mientras seguía hablando con Min. Era usual que se cambiara frente a otros atletas, eso no le molestaba.

YoonGi ignoró el como su mirada se desvió hacia las bragas de algodón azul marino con puntitos blancos, tenían un lazo al frente.

— ¿Me llamas egoísta?

— No exactamente, Min — TaeHyung seguía cambiándose, poniéndose unos leggins negros que eran esponjositos por dentro para evitar el frío, después se puso una blusa de manga larga térmica color azul cielo — Simplemente no te interesa estar consciente de tu alrededor, de lo que tus otros compañeros atletas tenemos que hacer para tener las cosas que tú tienes sin siquiera pedirlas.

YoonGi frunció el ceño.

— ¿A qué te refieres?

— Para poder pagar mi traje de esta final tengo que hacer cuatro sesiones de fotos, mis patines los pago un comercial con gatorade y ni siquiera bebo esa mierda — TaeHyung hizo una pausa y vio a YoonGi — ¡Los del equipo de skeleton y bobsleigh tuvieron que juntar dinero para pagar por un camión adecuado que pudiera llevar sus equipos, los de snowboard tuvieron que vender chocolate caliente y galletas por seis meses para poder pagar por tablas nuevas!, incluso los del equipo Omega de hockey tuvieron que hacer muchas sesiones de fotos para poder pagar por sus uniformes y protectores — Dijo cansado.

TaeHyung veía a YoonGi, este estaba sin habla.

Realmente él nunca tiene que pedir algo, el estado se lo daba.
Protectores, uniformes, transporte, casilleros y vestidores, ¡incluso una pista de lujo para poder entrenar! Lo último en tecnología se los ofrecían.

Nunca se había dado cuenta que TaeHyung junto con los otros atletas de este centro tenían que cambiarse en vestidores que eran extremadamente fríos.

No había calefacción en estos vestidores, los suyos tenían pero al ser Alfas realmente no lo utilizaban.

— Min, que bueno que ustedes no tienen que rogar o mendigar por nada— TaeHyung lo vio a los ojos, su maquillaje hacia que sus ojos se vieran intensos, penetrantes — Pero no todos los atletas tenemos la suerte de que nos apoyen de la forma que los apoyan a ustedes.

Sin más TaeHyung salió de los vestidores.

Su gorrito con pompón se quedó en la banca, olvidó ponérselo de nuevo.
YoonGi lo tomó entre sus manos y acarició el suave estambre.

Vio una etiqueta.

«𝚌𝚘𝚗 𝚊𝚖𝚘𝚛, 𝚖𝚊𝚖á»