Marcada por las Hadas

10. Buenas migas

Archie:
Maddie no paraba de reírse mientras Liv y Blake caían de culo en el barro. Y yo no podía estar más contento de cómo había salido todo. Sí, probablemente estábamos a punto de entrar en guerra contra los feéricos, pero había recuperado algo que había perdido hace mucho. No pude evitar quedarme mirando a Ellie, quien tenía a Maddie en brazos y ambas se reían mientras la primera agitaba su mano en el aire delante de ella. Fuera, en el campo de entrenamiento Blake y Liv volvieron a caer sentados en el barro.

    — ¿Qué pasa? — Ellie se dio cuenta de que la estaba mirando y se giró hacia mí con una ligera sonrisa en los labios. Estaba preciosa. Tenía las mejillas rojas de haberse reído tanto y no pude evitar acercarme y darle un beso en los labios. Cuando nos separamos sus ojos aún brillaban.

    — Puaj, tío Archie. — Maddie puso cara de asco sacando la lengua. Volvió a girarse hacia la ventana y Liv y Blake ya no estaban — Se fueron. —. Maddie hizo un puchero y pidió a Ellie que la bajase. — Tengo que ir a buscarlos.

En ese momento alguien llamó a la puerta, pero antes de que pudiera responder, se abrió de golpe. Entraron dos personas que reconocí al momento.

    — Serena, Ian, cuanto tiempo — dije de inmediato con un pequeño subidón de alegría. — ¿Qué hacéis aquí?

    — ¿Ya se te ha olvidado? Literalmente nos has convocado tú. — miré mi reloj sin ninguna razón.

    — Pero llegáis muy pronto. La reunión no es hasta mañana. — En ese momento parecieron darse cuenta de que había más gente en la sala.

    — Hola, me llamo Ian. — Ian se adelantó a cualquier cosa que pudiese decir y se presentó directamente a Ellie. Esta pareció sorprendida ante tan caluroso saludo.

    — Encantada, soy Elizabeth Weyland.

    — Yo soy Serena Evans. — Serena se adelantó y también saludó a Ellie.

Verlas juntas era como ver el día y la noche. Literalmente. Mientras que Ellie tenía el pelo rubio tirando a platino. Serena tenía el pelo negro largo y liso hasta casi rozarle la cintura. Iba vestida también de negro con un pantalón de traje de tiro alto y un top negro sin mangas. Ellie en cambio llevaba un vestido blanco hasta las rodillas.

    — Hola Mads — la saludó Serena en cuanto la vio. Fue en un tono mucho más afectivo que el que usó con Ellie. Maddie corrió hacia ella y esta la cogió en brazos.

Serena e Ian se habían criado en la Academia al igual que Maddie y Blake. Con Blake habían pasado más tiempo y eran como sus hermanos mayores, por mucho que Blake lo intente ocultar. Con Maddie en cambio aún habían empezado a entablar amistad hace un par de años. Cuando Maddie empezó a hablar y comenzó a meterse con Ian.

    — Me alegro de veros.

    — En realidad no hemos venido antes solo por la reunión. — Ambos intercambiaron una mirada. — Tenemos que hablar contigo.

    — Yo esperaré fuera. — dijo Ellie dando por sentado que era una conversación privada.

    — Si quieres puedes acompañarme a buscar a Liv y Blake — dijo Maddie aún desde los brazos de Serena. Esta última la dejó en el suelo.

    — Sí, claro, vamos. — Ellie pareció animarse un poco. — Nos vemos luego. — ¿Se iba a ir así como así?. Se encaminaron hacia la puerta. Maddie le había dado la mano. Me acerqué a ella rápidamente, le puse una mano sobre los ojos a Maddie y le di un beso fugaz a Ellie.

    -- Te buscaré cuando acabe — Le susurré antes de que se fueran y no pude evitar notar que se había puesto roja otra vez. A estas alturas debería estar acostumbrada, ya habíamos estado juntos antes.