Eran las doce, Kai estaba dormido en el sofá y Lloyd estaba solo, en la habitación, al lado de la ventana, listo para escapar. No empaco nada esta vez. Eso mismo fue lo que lo delató. Solo agarro su plata y le quito un poco más de plata a Kai: Por lo menos lo haría sentir enojado, eso es lo que quería. Que sienta odio consigo mismo, que se sienta culpable. Por eso, estaba decidido a escapar.
Por suerte, la casa tenía un solo piso, así que escapar por la ventana iba a ser fácil, y más si Kai estaba convenientemente dormido. Estaba 100% seguro de eso, sin ninguna duda. ¿Cómo estaba taaan seguro? Sencillo. Tranquilizante. Si, eso le puso a la comida de Kai, la cual devoro en dos segundos y medio, literalmente. Kai era un animal comiendo, cuando tenía hambre, era capaz de comerse hasta la mesa.
En fin, Lloyd abrió lentamente la ventana, mientras todo el polvo de esta caía al piso. Casi nunca abría la ventana. Menos ahora que Kai sabía que escaparía. Bueno, o por lo menos Kai pensaba eso, cosa que literalmente estaba haciendo en ese mismo momento.
Abrió la ventana (la cual hizo un leve sonido al abrirla) por completo y salió afuera de esta. Se sentía libre. No había salido de la casa desde que compraron su casa nueva. Si, Lloyd trabajaba desde casa. Nada podía hacer afuera de esta, o por lo menos sin permiso de Kai. Una vez, Lloyd quiso pasarle un papel a la cajera de un supermercado sobre todo lo que sucedía, ya saben, de que necesitaba ayuda urgente, pero, como no, el papel termino en manos de Kai y probablemente saben cómo termino eso.
Pero...pero ahora, Lloyd se sentía libre. Sentía como el viento pasaba través de sus dedos, como el pasto alto de afuera de la casa le llegaba a sus tobillos desnudos. La luna iluminaba toda la parte de afuera de su casa, incluyéndolo...lo hacía sentir con vida. Estiro sus brazos, dejando que la suave brisa lo refresque. Cerro suavemente los ojos, dejándose llevar por el momento. Una sonrisa se esparció por su pálido y lastimado rostro. Esto llego a su fin. Su sufrimiento, el sufrimiento que tanto estuvo esperando que acabara...se terminó. Este era el fin del reinado de Kai.
Empezó a correr con toda la velocidad del mundo, sin mirar atrás, sin dudarlo por ningún momento. No quería saber si lo estaba siguiendo Kai, si se había despertado. Solo corría, sin razón alguna. Solo...corría. No había hecho esto en mucho tiempo, cosa que le pareció extraña, parecía algo de todos los días: Salir a correr, sin parecer un perro detrás del culo de Kai. Se sentía completamente libre. Sentía como unas gotas de lágrimas se esparcían por su rostro, estaba realmente feliz. Feliz por todo.
Pero...la felicidad no le duro mucho cuando escucho unos pasos acelerados detrás de él. ¿Quién sería? Capaz sería un desconocido tratando de robarlo o asesinarle...o, la otra opción que es mucho peor que cualquier asesino serial, me imagino que para este punto de la historia ya saben quién estoy por decir, ¿no?
Lloyd movió su cabeza, mirando por primera vez atrás. Un enojado Kai, persiguiéndolo, como si estuviera corriendo una maratón. Imposible...si estaba dormido. No podía levantarse, era físicamente imposible. Pero Lloyd no tomo en cuenta lo fuerte que puede llegar a ser Kai, esa fue su perdición
Empezó a correr como si se tratara de un monstruo que lo estaba persiguiendo, en cierta parte, si, un monstruo lo estaba siguiendo, pero no de ese tipo con los dientes afilados ni nada de eso...algo mucho peor.
Sus piernas no daban más de correr, se sentía cansado, pero no podía parar...o sino Kai lo agarraría y vaya a saber que le iba a hacer. NO iba a permitirse que le atrapen, o por lo menos no tan facilmente. Su respiración era mucho más agitada de lo normal, estaba cansándose de verdad. Por más que la libertad este enfrente suyo, se sentía como si Kai lo estuviera estirando, empujando al otro lado, como si esa libertad estuviera lejos desde un primer lugar.
Era imposible escapar de Kai, pero Lloyd no quería admitir eso, le costaba decirlo o siquiera pensar en eso. Kai era mucho más grande, fuerte y tenía más autoridad que Lloyd. Pero, aun así, Lloyd tenía algo que Kai había perdido hace mucho tiempo: Fe.
Esa fe de que todo iba a terminar, de que iba a escapar de ese horrendo lugar que él llamaba "casa...", gracias a esa fe estaba en donde estaba ahora mismo...no iba a dejar que esa fe que lo ayudo todo este tiempo desaparezca, no se lo iba a permitir...
"La fe mueve montañas" Esa era una cosa que Wu solía decirles a los ninjas antes de que Lloyd se retirara para vivir con Kai. Desde ese día, supo que esa fe iba a vivir con él desde ahí hasta el resto de su vida. La fe siempre estuvo de su lado...por eso, no podía fallar...tenía que escapar si o si...
Pero llego un momento en el que sus piernas no podían más y cayó al piso, sin energía. Sintió como dos manos lo atajaron por atrás con suma fuerza, una fuerza que nunca sintió en su vida. Había perdido. Kai lo agarraba con cada vez más fuerza, hasta el punto de casi romperle las muñecas, cosa que era totalmente posible por lo débiles que se encontraban sus huesos...sus pobres huesos. Él y su fe no lo salvaron, o por lo menos no esta vez...
- ¿ERES ESTUPIDO O QUE? ¿CÓMO PENSASTE SIQUIERA EN HACER TODO ESTO? ¿EH? ¿ESCAPR DE LA CASA? ¿SOS IDIOTA? –Grito Kai, mientras le sostenía los brazos por atras con fuerza al rubio. –L-Lo siento...- Dijo Lloyd, con la poca fuerza que le quedaba. –Que te quede muy en claro, rubiecito, que si esto llega a pasar otra vez...lo vas a lamentar...
-Ya se Kai, p-perdón...- Se disculpó el menor. –Ningún perdón va a bastar muchachito. MIRAME CUANTO TE HABLO- Le grito Kai, mientras Lloyd movía su cabeza para atrás, así le podía mirarles a los ojos. –Te vas a arrepentir mucho, realmente mucho de esto....
De ahí, todo era negro...
...
...
...
...
VOCÊ ESTÁ LENDO
Uno no valora lo que tiene hasta que lo pierde (Ninjago GreenFlame)
FanficToda su vida, Lloyd estuvo enamorado de Kai, y, por lo que parecia, Kai tambien lo estuvo de Lloyd...pero, cuando finalmente lograron su objetivo, el cual era hacerse pareja, todo sale mal...