El banco bajo mis pies

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Fue en un día de verano que llegó el frío,

La despedida jamás fue pronunciada,

Solo vi que te habías ido,

Sin tan siquiera decir nada.

Ahora debo dejar ir tus virtudes y defectos,

En parte es mi culpa por haber creído en ti.

Lo que ayer latía, hoy se encuentra muerto,

Le di sepultura cuando esto vio su fin.

Corriendo sin rumbo hacia cualquier luz,

Apagando mi conciencia con alcohol,

Deseando que con quien duermo fueras tú,

Trato de borrar un nombre que por siempre se grabó.

La promesa de eternidad que se rompe en meses,

El juramento que parece nunca se respetó.

El trauma de abandono se hace presente,

¿Y por qué el más lastimado tengo que ser yo?

Te empeñas en darme todo, luego me lo quitas.

Construimos un futuro para demolerlo,

Dices que soy lo que necesitas,

Y mi corazón solo quiere que dejen de romperlo.

Desataste el nudo que rodeaba mi garganta,

Me bajaste del banco que sostenía mis pies,

Después las puñaladas fueron tantas,

Que hubiera preferido colgarme de una vez.

El Diario de un MonstruoUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum