VEINTITRÉS | Hija de papá

642 95 59
                                    

—me lo van a contar.—exigió Leia llegando a la mesa de la biblioteca. Hermione y Draco la miraron con extrañeza.

—¿el que?—preguntó Draco

—¿que tanto hacen en las noches?—a diferencia de Draco, quien se mostraba neutro, hermione abrió la boca con sorpresa.—los he visto, todas las noches salen, se quedan en el bosque veinte minutos y luego regresan.

—no es nada—dijo Draco.

Leia lo miro con los ojos entrecerrados con intención de sacarle información, pero Draco estaba tranquilo, ni parecía sospechoso y si Leia no supiera la verdad, diría que ni siquiera sabía de lo que le estaban hablando.

Miro a Hermione, que aun que estaba nerviosa no parecía dispuesta a decir nada tampoco. Leia suspiró y se dejó caer en una de la silla.

—escuchen—empezó a decir Leia—, no se de que se trata todo esto pero pueden confiar en mi. Soy su amiga—Draco y Hermione se miraron—, no le dire a nadie. Soy buena para ocultar secretos...quiero decir—bufo una risa y todo los ojos—ya ven lo qué pasó con Harry. Pero si creen que por eso no pueden confiar en mi, entonces....

—no es nada de eso—la corto Hermione.—es que...es complicado.

—¿complicado?—frunció el ceño.

Hermione y Draco guardaron silencio. Complicado.  Leia estaba segura de que más complicado que todos los secretos que guardaba no podría ser.

—este fin de semana hay salida a Hogsmeade—dijo Draco entonces—busca la manera de salir y encuéntranos en el claro.

Leia asintió entusiasmada.

✶✶✶

El fin de semana, Leia se escabulló por el pasadizo de Honeydukes de la misma forma que antes solo que intentando pasar desapercibida ya que no traía la capa de Harry. Afortunadamente, ya que la tienda estaba llena, nadie se fijó cuando salió por detrás del mostrador y salió de la tienda.

Camino un par de minutos hasta llegar al camino que conducía al claro. Le gusto que ya no estuviera lleno de nieve. De apoco iban saliendo flores y las hojas de lo árboles se veían más verdes. Mientras avanzaba por el camino, se encontró a Draco

—Hasta que llegas—dijo agarrándola por la muñeca—mira, tienes que prometer escuchar y no enloquecer—Leia frunció el ceño, esa no era una buena forma de comenzar—. Te conozco y se como vas a reaccionar, solo por favor escucha.

—lo haré dependiendo de lo que sea.

—no, necesito que prometas escuchar y comportarte, Leia. Si no esto no funcionará.

Se quedó en silencio unos segundos. Las advertencias de Draco no le daban buena espina pero el hecho de que estuviera tan preocupado hacia que se notara que tan importante era para su primo esto, además le daba mucha intriga.

—bien—suspiró.

Siguió a Draco por el camino de barro hasta llegar al dichoso claro donde habían encontrado a Heracles y donde había peleado con Harry. Hermione estaba en el centro y junto a ella:

—¡Heracles!—exclamó Leia corriendo hacia el perro negro, quien la recibió con un langüetazo en la cara—¿esto era? Sabía que estaba con ustedes una de esas noches, pero no pensé que se tratara de esto, no es para nada complicado. ¿Que tendría que escuchar, Draco?

—no es exactamente esto, Leia—dijo Hermione.

Leia frunció el ceño y sus amigos la llevaron a un pequeño tronco para sentarse.

HEROES | libro I : año 1 - 4 Where stories live. Discover now