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Estoy fregando los platos del almuerzo cuando me llega una notificación al móvil.

Cojo aire varias veces. Anoche la cosa con mi pareja no fue tan mala. Se quedó dormido en cuanto su cuerpo tocó la cama y yo estuve un rato mirando las redes sociales. En la cuenta de Julen hubo varias stories donde bailaba y se reía a carcajadas con los de la fiesta. Me hubiese gustado hacerme al menos una foto con él, pero no se dio la ocasión.

Me seco las manos y me doy cuenta de que es Julen.

Julen. 15:44
Hola, guapo. ¿Qué tal anoche? ¿Todo bien?

Yo. 15:45
Holaaa. Sí, todo bien. Ya he visto que os lo pasasteis genial xD me alegro
A ver si salimos de nuevo y estoy más rato.

Julen. 15:45
No te preocupes.

Le mando un sticker de un gato sonriendo y sigo recogiendo la cocina, enfrascado en mis pensamientos.

El rato que pasé con mi amigo del instituto fue genial. Me hizo sentirme como si fuese de nuevo un inseguro chico de quince años, el cual solo se tenía que preocupar de aprobar unos exámenes y llegar a su hora a casa. Suspiro con añoranza, deseando recuperar esos problemas.

Mi móvil vibra y me doy cuenta de que es una notificación de Twitter. Un usuario que se llama Susirika_X. Abro su perfil y veo que es Susana, la chica con la que estuve hablando en la fiesta. Me doy cuenta que me ha seguido también en Instagram y le devuelvo ambos seguimientos.

Me siento en el sofá y cuando procedo a cotillear un poco el perfil de la chica, me llega una notificación de Telegram de Julen.

Julen. 16:02
Oye, a ver si el martes quedamos. No se me ha olvidado :)
Si puede ser, quedemos tú y yo. Yo no traeré a nadie ni nada.
Lo he pensado y...
Fue mala idea decirte que quedáramos primero en una fiesta.
Te he echado mucho de menos y esperaba que nuestro reencuentro fuese más nuestro, ¿sabes? Dos colegas rememorando sus tonterías de instituto, no dos conocidos que nunca han sido importantes para el otro.

Yo. 16:02
¡Claro! Lo veo bien

Me quedo mirando la pantalla y veo que me ha leído. A lo mejor le he parecido demasiado escueto, pero tampoco sé qué más decir. Su mensaje me ha abrumado.

Ahora mismo veo a Julen como un amigo y él sabe que tengo pareja. Sin embargo, habla con una intensidad y con unas formas que me hacen dudar de sus intenciones. Se acercó demasiado anoche y el ambiente estaba raro si lo mirabas desde fuera. Si analizo la situación, no hicimos nada ni hablamos de sentimientos del presente, solo del pasado.

Un pasado que echaba de menos.

«No, ya no me gusta Julen. Estoy así por lo que representa: una vida más cómoda y con más alegría, porque no tenía que preocuparme por encontrar un trabajo y vivir sin la ayuda de mi familia».

Pensar en ello me hace acordarme de mi hermano mayor, Alberto. Llevaba sin hablar con él casi un mes. Tengo que esforzarme más por no perder el contacto con las personas que quiero.

Abro de nuevo el chat que tengo con Julen. Puedo empezar por él, hablarle y ser sincero. Lo primero que quiero hacer es hacerle una pregunta que no estaba seguro de si la respuesta iba a ser buena o mala, dado cómo acabó anoche la cosa.

Yo. 16:06
Oye, Julen, ¿qué te pareció mi novio?

Me fijo que está en línea durante dos minutos más y luego se va.

Sin leerme.

Me tenso. ¿Causó mala impresión? Solo fue una borrachera tonta. Santi estaba de los nervios y mi amigo es también su ídolo. Los nervios le jugaron una mala pasada. Si lo conociese en otras circunstancias seguro que se llevarían genial.

«Seguro que incluso estarían bien sin ti» me dice una voz que procuro ignorar.

Dejo el móvil en la mesa del salón y voy directo al portátil a seguir buscando trabajo, aunque en estos momentos lo hago más para distraerme. No tardo ni tres minutos en volver a coger el móvil y volverle a escribir.

Yo. 16:11
Ya sé que anoche se puso un poco idiota ^^u
Es que estaba nervioso y es muy intenso.
Ya lo viste antes, sin beber, era todo sonrisas y amabilidad.
Cuando vayamos a quedar obviamente no va a venir, porque también me apetece quedar a solas contigo, ya que tenemos que ponernos al día, pero eso, que es muy buen chico.

Aprieto la mandíbula al ver que no me responde. Me meto en Twitter y veo un tweet suyo avisando de que en breve va a ponerse en directo.

Suspiro, aliviado. A lo mejor solo está concentrado en sus cosas y no me había leído por algo totalmente ajeno a mí.

Me aparece una notificación por Twitter de un mensaje privado. Es Susana.

Susirika_X. 16:11
Holaaaaa
Soy Susana, nos conocimos anoche. Me caíste genial ^^
No me pude despedir anoche, tío. ¿Qué tal hoy?

Me quedo mirando su mensaje. Tengo bastantes ganas de hacer nuevos amigos y ella parece maja, aunque tengo el sentimiento de que debería esperar a tener un trabajo o una ocupación antes de entablar lazos con alguien. No soportaba tener que confesar que no estaba haciendo nada.

«Tampoco voy a cerrarme puertas. Quién sabe, lo mismo puede ser una buena colega con quien darme una vuelta».

Yo. 16:12
¡Hola!
Bien, bien. Siento no haberme despedido. Mi novio y yo teníamos que irnos :(

Susirika_X. 16:12
Nos dijo Julen que estabais cansados.
Espero que la cosa esté mejor hoy.
Por ciertooo, a ver si este finde salimos a dar una vuelta. El viernes hay una Jam Session por la noche. Cenamos algo y nos pasamos. ¿Te apetece? ^^

Yo. 16:12
Creo que no tengo nada urgente, así que por qué no.

Susirika_X. 16:11
¡Oleeee! Julen va a venir seguro. No creo que seamos más de seis ♥

Sigo escribiéndome con Susana largo rato porque empieza a hacerme preguntas de todo tipo; que si me gustan los animales, que si me gusta leer, cuáles son mis aficiones... es un interrogatorio agotador, pero gracias a ello descubro que a los dos nos gusta Stray Kids, leer poesía y visitar museos porque a ambos nos entra una sensación de paz y conexión con el entorno cuando estamos rodeados de silencio y cultura.

Me levanto del sofá y me asomo para ver qué está haciendo Santi. Abro la puerta del dormitorio con lentitud y observo que ya está despierto, viendo sin cascos a Julen.

Contemplo la escena unos momentos. Julen está animado, jugando a Genshin Impact en directo y riendo, contando algo que le pasó en una fiesta. Me doy cuenta de que Santi escribe cada poco en el chat y que el streamer le responde.

Después de la mirada que nos echó antes de volver a la fiesta, pensé que Julen iba a estar más seco con Santi, pero todo lo contrario. Cuando le respondía su tono era más alegre con él que con los demás.

En un momento dado, Santi le lanza unos bits para que se pueda escuchar lo que le ha escrito.

—Eres increíble, niño. Ojalá poder quedar más porque en persona eres súper agradable y simpático —reproduce el bot.

Me doy cuenta de que Julen, a pesar de estar siendo atacado en el juego, mira directamente a la cámara y guiña un ojo. Sus ojos azules están algo oscurecidos, aunque no sabía si era por la luz o por otra cosa.

—Yo también, querido Santi. Yo también.

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