Segundas Oportunidades (Saga Las Elizabeths #1)

Capitulo 26

Ambos se quedaron como suspendidos en el tiempo como si se estuviesen mirando por primera vez.

Abby no pudó evitar sonrojarse y desviar ls mirada y en eso Ralph se puso de pie y él la ayudo a levantarse y cuando se paró ambos quedaron a centimetros.

-Amor de mi vida- dijo Ralph acariciando su mejilla.

Luego con la misma mano sostuvo su rostro y apoyo la otra mano en su cintura y la atrajó hacía él.

Ella podía sentir su respiración hasta que por fin sus labios se tocaron. Y beso comenzó suave y lento hasta que Abby gimió ligeramente.

Eso fue suficiente. Había pasado tanto tiempo y había enterrado el deseo por tanto tiempo pero esa pequeña respuesta de Abby fue suficiente para enloquecerlo.

Ella también había olvidado lo que era sentir esa necesidad pero cuando Ralph profundizo el beso y sus manos comenzaron a recorrer su cuerpo, las llamas de la pasión volvieron a encenderse.

Las manos de ella buscaron los botones de su chaqueta, los desprendió y él con un movimiento rápido se la quito. Ella hizo con el chaleco y la camisa y pronto ambas prendas estaban en el suelo.

Él podía bajarle los interiores y estar dentro de ella en segundos pero se dió cuenta que no quería eso, quería verla en todo su esplendor. Había pasado tanto tiempo desde la última vez y necesitaba que nada se interpusiera entre los dos, ni siquiera un pedazdo de tela.

Comenzó quitandole el abrigo y el vestido fue la siguiente prenda que toco el suelo, seguido por la engua.

Para quitarle el corsé hizo que ella se girase y comenzó a besar su cuello mientras soltaba los lazos del corsé que pronto se unió al resto de las prendas en el suelo.

Ansiosa no puedo esperar y ella se quitó la camisilla y quedó con la parte superior del cuerpo expuesta. Ralph volvió besarla y de un movimiento la levantó y ella envolvió sus piernas por él.

Ralph la apoyo en su escritorio y rompiendo el beso, se alejó para quitarle el calzón con suma habilidad.

Se quedó un momento observandola, ella estaba desgarradoramente hermosa desnuda con las piernas abiertas y las únicas prendas que conservaba era las medias y los zapatos, los cuales los removió rapidamente pero para las medías se tomo su tiempo.

Primero agarró su pierna derecha y empezó a besar el interior de su rodilla y sus besos fueron subiendo hasta el tobillo mientras removía la medía. Lo mismo hizo con la pierna izquierda mientras Abby se retorcía de placer.

Cuando por fin quito la ultima media, Abby se encontró totalmente desnuda y ahí se fijo en su abdomen, en las cicatrices que ahora tenía a causa del embarazo y comenzo a besarla en esa zona y sin poder contenerse, entre besos dijo:

-Eres divina-

Abby solo pudo responder con una mezcla de suspiro y gemido. Lo que sus manos y sus boca lograban de verdad era lo divino. Celestial, el mismisimo paraiso.

Y para empujarla aún más al extasis, él comenzó a bajar y a besar el interior de sus muslos mientras su manos subieron hasta encontrar sus pechos.

Ella no pudo evitar gritar cuando él al mismo tiempo la beso ahí en el centro de sus piernas y con una mano comenzó a juguetear con un pezón.

Ella se retorcía apoyada en una mano mientras que la otra la entrelazaba en los risos de Ralph.

El la besó y saboreó con ganas, poniendo toda la pasión reprimita y ella no tardó mucho en llegar al orgarmo.

-RALPH- gritó ella al estallar mientras estiraba ligeramente el pelo de él.

Ralph sentía que iba a explotar y ni siquera se había quitado los pantalones. Mientras ella jadeaba recuperandose, él se quito rápidamente las botas y todas las prendas inferiores.

Sin perder el tiempo se ubico en su entrada y antes de penetrarla dijo:

-Mirame a los ojos-

Y ella lo miró y al entrar en ella, la vió gemir y fue glorioso. Comenzó a moverse y entre más se movía más glorioso se volvía. Él entraba y salía de ella mientras ella le recorría la espalda con las manos. La pasión fue aumentando, mientras los gemidos de ambos llenaban el ambiente.

-Te amo- dijo ella entre gemidos.

-Yo tambien te amo- respondió él incrementando el ritmo de sus movimientos.

Ella gritó y el ahogó ese grito con un beso. Y de nuevo ella alcanzó el cielo, explotando en un maravilloso orgasmo mientras el uso todas sus fuerzas para retirarse y terminar afuera.

-¿Por qué hiciste eso?- le preguntó Abby recuperadose, apenas podía hablar.

-No puedo dejarte embarazada- respondió él incomodo.

-Ah por supuesto- respondió ella, para el resto del mundo ella estaba esperando un hijo.

-Abby yo- comenzó a decir Ralph, quería disculparse de nuevo.

-Shhh, despues de este niño nuestro próximo hijo va a ser producto de tu semilla y mi vientre- lo calló ella, apoyando sus brazos en los hombros de él y dandole un beso.

-Abby- volvió a decir Ralph.

-Ralph sea lo que sea que estes tratando de decir, dejame decirte que voy a amar a tu hijo o hija porque te amo a tí- dijo Abby.

-No se que he hecho para merecerte- fue lo único que pudo responder Ralph.

-Ser tú- respondió ella.

Él volvió a besarla y en su mente dijo una plegaría silenciosa agradeciendole a Dios por Abby y por su perdón. Y por primera vez en mucho tiempo soño con el futuro con esperanzas.

No tenía idea de lo que le esperaba.