Palabras de un Escritor

Una mirada

Una vez me dijeron que la mirada es la puerta del alma, la entrada misma al interior de cada persona. Que toda la verdad se esconde en ella, y que en ella es donde los secretos pueden reflejarse, es la luna misma y el universo entero, todo reducido a una simple mirada.

Ahora que ha pasado el tiempo, me he puesto a pensar en ello, y veo que justo en esta etapa, es cuando eso tiene sentido. Que si de alguna manera lográramos descifrar los códigos que transmite cada mirada, todo sería mucho más sencillo, sabríamos que personas nos convienen, sabríamos mucho antes, cuando alguien no nos quiere, cuando alguien nos miente o dice la verdad, y hasta quizá, en prisiones estarían quienes de verdad deben estar.

Siempre he creído que todo pasa por algo, que el futuro tan solo es la consecuencia misma de nuestro presente, que el destino puedes modificarlo con cada una de tus acciones, y de esa manera, pienso que no hemos logrado comprender del todo las miradas, por alguna razón, no lo hemos hecho y dudo que algún día podamos hacerlo.

Y es que, es como todo misterio, una vez descubierto, deja de tener valor, deja de tener sentido.

Hay quien dice que la mirada no transmite nada, para otros, en la mirada se esconde una profunda sinceridad. Para los más románticos, la mirada es el sueño mismo, es la vida pura. Para los más ancianos, esas pequeñas miradas, se vuelven la satisfacción de haber llevado una vida plena, esas pequeñas miradas son tan solo fruto de su propia cosecha, un orgullo, un hermoso regalo que nos brinda la naturaleza.

Para los adultos, esas mismas pequeñas miradas, pasan a ser el reflejo de ellos mismos, un gran milagro en un pequeño cuerpecito.

Entonces recuerdo esa frase que me dijeron, y veo la connotación que existe dentro de ella. La mirada es tan solo la mirilla a nuestros sentimientos, y detrás de ella, se esconden misterios, un mundo cubierto en maravillas, una infinidad de sueños y pasiones dormidas.

Fuentes

07-02-18