Epílogo

445 44 12
                                    

Jamás muere el amor por un olvido

Actualidad-

—¿Acaso no sabes que todos podrían irse en contra mío? Se supone que estoy siguiendo el tratamiento, regresar solo hará que todo se arruine.

Al día siguiente Venice había buscado a su tío para tratar de convencerlo, le explico por se su corazón aún se sentía incompleto y aunque este lo había entendido, era muy peligroso regresar a ese lugar, no quería que lo poco que había avanzado durante esos años se desvaneciera con un tan solo suspiro.

—Vamos, te despedirás de él y todo podría volver a la normalidad, cuando eso se transforme en un recuerdo hermoso tu vida seguirá siendo la misma de antes.

—No sé si sea prudente, en lugar de mejorar puede que todo empeore.

—No digas esas cosas, anda vamos, será la última vez.

Kim no parecía convencido, pero tan solo pensar en que podría volverlo a ver hacía que su corazón latiera con fuerza, que sus nervios atacaran nuevamente su estómago y toda su mente se nublara en recuerdos junto a él.

Si el amor era una ilusión para todos, ¿Quién dijo que lo de ellos no era real?

—Está bien, vamos.

Con precaución salieron hasta ese lugar donde se guardaba su más perfecto secreto, al llegar sintió como sus manos comenzaban a jugar y temblar al mismo tiempo, sus brazos se sentían ansiosos por volverlo a tocar, sus labios temblaban al imaginar nuevamente ese sabor dulce llenar su boca por completo, nunca pudo dejar de amarlo, nunca.

—Te estaré esperando — espetó Venice con una sonrisa haciendo una ceña con su mirada hacía el bosque.

Con cuidado camino a pasos rápidos, su cabeza comenzó a reproducir cada uno de los recuerdos que tenía junto a él, ese amor tan grande que nunca imagino sentir, pero que su propia imaginación, se enamoró de alguien que solo él podía ver.

—Te extrañe.

Esa melodía tan perfecta resonó por sus oídos, regreso la mirada hacía la parte trasera y visualizo esos hermosos ojos cristalizados, esa sonrisa apagada aún estaba latente en sus labios, se encontraba un poco pálido, temeroso de volver a perderlo.

—Yo te extrañe aún más — respondió atrapándolo en sus brazos estrujándolo con fuerza.

—No vuelvas a irte, te necesito, no vuelvas a dejarme por favor.

Los sollozos comenzaron a presentarse mientras sus manos se aferraban a su camiseta, el dolor que le producía pensar que Kim volvería a irse de su lado era bastante insoportable, estaba enamorado de la persona que lo creo, estaba enamorado de ser parte de esa imaginación, quería seguir siendo parte de su vida, vivir para siempre junto a él.

—No puedo quedarme, aunque eres lo mejor que obtuve de este bosque, no puedes quedarte conmigo a pesar de ser parte de mí mismo.

—Otra vez no, he sufrido mucho por tu lejanía, te necesito por favor.

—Y yo te necesito aún más, siempre fuiste como lo imagine, pero estoy enamorado del reflejo de mi soledad y eso solo podía causarnos más daño.

Porschay dejo caer su cuerpo arrodillándose frente al chico mientras las lágrimas caían con más velocidad por su rostro, no podía obligarlo a que se quedara, sin importar los argumentos que tuviera no podía ser tan egoísta y pedir que se quedara junto a él para vivir esa fantasía, por qué era el amor de su vida que solo aparecía con una imaginación.

Memorias de una vieja canción │KimChayWhere stories live. Discover now