DxD El amor en el Perdon

Capitulo 14

En la cita, todo fue tan aburrido, era el típico chico amable que seguro se la paso pensando en un plan de acción para esa tarde. Bueno, debo reconocer que sabia como tratar a un chica, si hubiera tenido un cita con una chica normal, seguro habría sido todo un éxito.

El momento de cerrar el acto llego disfrute viéndolo aterrarse ante mí. Ver como ese gusano veía por primera ves a una existencia superior a el fue gratificante. Lo apuñale y pude ver como su alma agonizo dentro de sus ojos, la sangre cubrió su pecho y su piel se torno pálida. Su expresión no tuvo precio.

Me fui pensando que todo había terminado, pero me equivoque. No conté con que un demonio estaría dispuesto a traerlo de la muerte. Su hermano era entendible, ¿Pero el? No tenia sentido.

Cuando me lo encontré por segunda vez fue cuando perseguía a una monja, esa mocosa me resultaba tan repugnante como el. Tan amable y bondadoso, que patético. Lo aplaste y me lleve a la chica, estaba segura que los demonios no interferirían en mi plan.

Esa misma noche, cuando extraje el Sacret Gear de esa monja me sentí llena de gloria, y nuevamente el a apareció. Tras haber tomado a la chica y huir con ella mientras sus compañeros se encargaban de los exorcistas. Que gracioso fue verlo rezar y llorar a dios por ella.

Ya me había cansado de jugar con el, así que decidí acabarlo de una vez por todas.

No entiendo como, pero al finar me tomo por la guardia baja y termine perdiendo. ¡YO! ¡Quien se supone había obtenido un poder único! Resulta que la pieza de peón que estaba en su interior no era común y corriente, era una pieza mutada, y el poder que pidió fue el de la pieza reina.

Claro, no le duro mucho, a lo mucho unos segundos antes de caer al piso agotado y con sangre escapando de su boca y nariz.

Cuando intente escapar, para mi desgracia me encontré con sus hermanos. El chico tenía su sacred Gear activada, pero esa hermana suya lo detuvo. Ella camino asía el altar donde encontró un cuchillo de exhibición, pero a ella no le importo, con que tuviera filo le pareció suficiente. Tomo el cuchillo con fuerza y me corto la alas clavándolo en mi espalda, que humillante, fue muy doloroso. Después me apuñalo en el pecho, diciendo: "Te lo merecías por hacerle daño a Ise"

No se como, pero cuando desperté estaba en la cama junto a Issei. Pero en el momento que intente pensar en una explicación, el se despertó y se levanto de la cama, cuando lo llame me ignoro, pero cuando intente tocarlo no pude, mejor dicho me fue imposible, mi mano paso a través de el como si yo fuera una ilusión. Me volví intangible. No, creo que la mejor palara es que ni siquiera estaba presente ahí.

Me tomo un tiempo dar con la respuesta correcta, pero aparentemente mi alma se había unido a la suya. Era lo peor, no podía alejarme de el, pero no solo eso, también estaba parcialmente unida a esa monja, Asia, ella también estaba en esto.

En un principio era aburrido. Solo veía lo que pasaba junto a Issei, otras veces veía las cosas a través de los ojos de Asia. Pero me di cuanta que no era una simple observadora.

Resulta que podía influenciar el alma y la mente de Issei, era mas fácil de lo que parecía, con lo frágil que era, solo debía esperar a que se sintiera un poco mal. Darle pesadillas y verlo asustado era lo mas divertido.

También me sorprendí de sus habilidades, resulto ser un prodigio en el campo de batalla, además de ser muy listo, con eso, no pude evitar pensar que hubiera sido mejor reclutarlo en lugar de asesinarlo, tener un perro que peleara por mi hubiera sido muy beneficioso.

En su lucha contara ese Phoenix, aunque fue con la ayuda de su hermano, ambos pudieron ganarle. También enfrentar a Kokabiel-Sama, y encima darle pelea y ganarle a varios dioses. Sin duda tenia potencial, pero era un total desperdicio en alguien de temple débil como el.