El odio crece incluso cuando el amor florece

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Los castigos que recibía se volvieron más extraños de entender. No importaba cuanto se esforzaba algo terminaba haciendo mal que incluso su propio "maestro" había intervenido en estos.

Una mirada fría que congelaba al joven pero, no extinguía la llama obstinada de poder regresar el favor de que aquel que lo llamaba como una vil bestia le había otorgado. No tenía a nadie en la secta, su pequeña shijie se podría pensar que estaba apoyandole pero no era tonto como para acercarse por completo sabiendo que podría causarle problemas. Pero se esforzaba por mirarle buscando una explicación mas, con el pasar del tiempo la amargura de su corazón crecía rodeado de la gente de su secta.

No podría ponerle a todos como el origen de aquellos pensamientos reprimidos. No a alguien como su shizun que se hallaba dentro del laberinto de bambú. Un verdadero maestro que debería ser el único digno de portar aquellos ojos verdes, pero de aquellas dos gotas de aparente agua estos lo poseía alguien con un alma tan oscura que los opacaba.

En ocasiones, dentro de su mente, podía escuchar el deseo de matar a su instructor como si fuera la única manera de darle un merecido pago a su amor platónico. Mas el hecho de ser un díscipulo al que se le encargaba quehaceres que no le correspondían, e incluso muy por debajo de la figura de autoridad del lugar, detenían a penas estos deseos. Así que había elegido un camino más "tranquilo" para alcanzar su objetivo.

Si Shen Yuan no podía salir de aquel bosque de bambú entonces llegaría a ocupar una posición importante para ya no tener que venir en secreto al lugar.

Entonces en aquellos años se esforzó, saliendo en misiones importantes para dejar en alto su nombre. Aquel joven de hermosa belleza se había ganado el reconocimiento como una futura promesa aunque poseedor de una extraña aura. Muchos sugerían que en la próxima generación deberían convocarlo como sucesor de uno de los importantes doce picos, menos el señor del propio pico al que pertenecía.

Hasta el punto de dejarlo a su suerte y posiblemente llevarlo a la muerte durante la tragedia de La Conferencia de la Alianza Inmortal.  Se rumoreaba que los celos del inmortal mató a la mejor promesa de esos tiempos, incluso algunas muchachas se lamentaban al oír la historia.

El maestro del bosque de bambúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora