Preocupado por ti

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Capitulo III

Preocupado por ti

El resto de la semana Lionel, no había participado en clase incluso las veces que su profesor le realizo preguntas directas el solo respondía con un simple ''No lo sé'' o ''No lo recuerdo'' ganándose una mirada de decepción por parte del mayor, mirada a la que ya se estaba acostumbrando, trataba de no darle importancia, de hacer como si aquello no doliera pues sabía que a los ojos del mayor solo era un estudiante mas y no tenía por qué esforzarse ahora por ser notado pues ya no le encontraba sentido el hacerlo.

El fin de semana llego y Lionel se rehusó a salir con sus amigos a pesar de haber planeado aquella salida desde semanas atrás, Kun le había preguntado en privado sobre si quería que fuera a su casa para pasar el rato, Lionel no se permitió que por culpa suya su mejor amigo la pasara mal y se sumergiera en la miseria del castaño, mucho ya era que él estuviera en el fondo de ella como para arrastrar a alguien más, paso sus días libres en cama sin ganas de levantarse y cuando llego el domingo por la noche, ahí estaba otra vez el dolor agudo y molesto en su estómago denotando lo nervioso que se sentía por asistir nuevamente mañana a la escuela y ver otra vez aquellos ojos llenos de chasco.

-Respira Lio...tranquilo, no va a ser tan malo...no va a pasar algo que no esperes ya...

A pesar de tratar de calmar sus miedos y ansiedad, parecían que estos solo se alimentaban más mientras el reloj seguía su curso, acortando el tiempo en el que tendría que ver al mayor. Lionel recurriría a su As bajo la manga su Nana ella dejaría que se quedara en cama si mañana inventaba que se encontraba enfermo y realizaba la mejor actuación de su vida, decidido a llevar a cabo su idea prosiguió a tratar de conciliar el sueño cayendo en el unas horas después.

-Mi pequeño es hora de levantarse corazón, ya vas tarde anda.

La dulce voz de su Nana invade su corto descanso y aprieta el botón para comenzar con la farsa, se encomendó a todos los dioses rezando para que todo saliera a su favor.

-Nana –expresa con la imitación de una voz lastimera por el dolor inexistente en su garganta- No me siento muy bien...

La mirada preocupada que le da la mayor hace que el corazón de Lio se apriete por preocupar a su nana con mentiras, pero eso no le impediría seguir con el plan.

-Oh mi precioso niño ¿Qué es lo que tienes?

-Me...duele...la...garganta...y me siento muy débil Nana –sus bellos ojos de borrego miran a la mujer expectantes-

-Oh cariño entonces te traeré medicina, no creo que haya algún problema si faltas el día de hoy si no les decimos a tus padres, anda mi niño vuelve a dormir y en un rato te despierto para que tomes un rico té que te hare.

Lionel no puede evitar suspirar aliviado había funcionado y ahora su cuerpo se sentía más libre, aquel molesto dolor en el estómago se había esfumado, ahora debía esforzarse por mantener la farsa un par de días más.

-Gracias Nana...- ve como se despide la mayor con un dulce beso en su frente, sonríe por inercia y vuelve a cerrar los ojos esperando que llegue de cuenta nueva el sueño a su cuerpo-

El resto del día, la pasó de maravilla entre los mimos de su Nana y lo caliente de su cama, inclusive había olvidado la razón de su mentira, hasta que una notificación en su celular hizo que despertara de la burbuja de protección y felicidad que le brindaba su Nana.

Dueles tan bien.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora