Me acomodo el pelo detrás de mi oreja mientras saco la llave de casa para entrar, con una sonrisa de mejilla a mejilla. Contenta por la tarde que había pasado con Enzo, hacía mucho que hacía algo así, últimamente pasaba as tiempo dentro de casa y en los estudios de fotos que haciendo cosas normales. Cierro la puerta a mis espaldas y dejo mis cosas en la mesa del palier. Mi celular y mis llaves. Recién cuando entro a la sala me doy cuenta que están todas las luces prendidas y Julian está sentado en la mesa del comedor. Los codos apoyados en esta y con el celular en mano, que apenas me ve lo suelta y me mira. Se me borra inmediatamente la sonrisa de la cara y caigo en la realidad. Me había olvidado completamente de que me dijo que llegaba a eso de las diez.
— ¿Dónde estabas? —pregunta levantándose de la mesa mientras corriendo la silla y rodeando la madera hasta donde estoy yo, parándose en frente de mi. —, Te llamé un montón de veces —por el tono de su voz me doy cuenta que está molesto.
— Nada, fui al río con Cami —me excuso mintiéndole y sin mirarlo a los ojos mientras frunzo las cejas levemente. Me agarra la cara con una mano y me hace mirarlo.
— No me mientas, Camila subió una historia hace tres horas con el novio en el cine —esta vez me mira a los ojos y ahora si puedo ver que realmente está enojado.
Le doy un manotazo en el brazo haciendo que me suelte la cara y lo enfrento.
— En ese caso, no te importa —murmuro y arquea una ceja, de un momento a otro me agarra por el brazo y me acerca peligrosamente a él. Me quejo un poco pero le sostengo la mirada. El más que nadie sabe con quien estaba.
— ¿Te fuiste a abrirle la piernas a Enzo solo porque peleamos hoy? —pregunta entredientes apretando el agarre a mi brazo haciendo que me duela. Abro mi boca sorprendida por lo que me acaba de decirme y le forcejeo el agarre para que me suelte pero no lo hace. —, Me cansé de remar esta mierda relación, me cansé de que todo el mundo me diga que sos una trola que estuvo con media selección, me cansé de que me mientas, me cansé de vos. —cuando termina de hablar me suelta bruscamente. Contengo mis ganas de llorar y respiro hondo. Me acaricio el brazo que me soltó, no me salen las palabras en ese momento, tengo un nudo en la garganta.
— Entonces no se por qué estamos juntos —suelto mirándolo a los ojos. Los dos estamos lo suficientemente enojados como para decirnos de todo. —, Porque yo también me cansé de todo este caretaje que hacemos, de aparentar que estamos bien y en realidad peleamos diez veces al día —me muerdo el labio inferior y se me cristalizan los ojos inevitablemente.
— ¿Y te preguntaste por qué estamos así? —pregunta con amargura, no digo nada, solo me limito a escucharlo. Se acerca a mi—, Porque cuando confiaba en vos, cuando te decía la verdad y te preguntaba mirandote a los ojos si te habías cogido a Enzo, vos me decías que no —aprieta la mandíbula y me tiembla el labio inferior—, Me decías que no y ya te lo habías volteado anda saber cuantas veces —sus palabras me queman. Me agarra la cara con una de sus manos y me la aprieta sin delicadeza. —, Y hoy también te lo cogiste, ¿no? —me obliga a mirarlo y después niega soltándome—, Me generas rechazo.
Me seco las lagrimas con mi brazo y respiro hondo. No puedo creer todo lo que me está diciendo. Me duele en el alma que nos tratemos así.
— Es mejor que terminemos —suelto y me pienso dos veces lo que voy a decir después—, Ya no funciona esto, no importa cuanto lo intentemos.
Nos miramos y por un minuto se pasaron por mi cabeza todos los momentos lindos que tuvimos juntos. Reducido en esta última charla. En donde se había hundido nuestra relación. Donde habíamos intentado hasta que se nos agotó el amor y terminamos así, tratándonos de la peor manera, sacando lo peor de cada uno.
Julián se queda parado sin saber que decir. De pronto el enojo se había esfumado de su expresión y estaba perdido. Podía ver el momento exacto en el que su mirada se desmoronó y se le empezaron a salir las lágrimas, deslizándose por su mejilla.
Ese era nuestro problema, habíamos generado tanta dependencia el uno con el otro que cuando habíamos algo mal después nos arrepentíamos profundamente.
— No —sacude la cabeza volviendo a acercarse y esta vez me agarra la cara con sus dos manos, suavemente. Ambos estamos reaccionando así. —, No me dejes —le tiembla la voz al hablar y esta vez la que niega soy yo. —, Voy a hacer las cosas bien, perdón.
— No nos hacemos bien —susurro soltándome de su agarre mientras me alejo de él. Me mira y se seca las lagrimas con su puño. —, Te amo mucho pero esto ya no funciona.
— Si me amaras no me hubieses hecho todo esto.
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BUENOBUENO QUERÍA DEJAR ESTE CAPÍTULOantes de irme a dormir para cerrar el temita relación Chernobyl de Sofía y Julián porque se iban a terminar matando.
Quédense tranquilas que este no es un adiós por parte d JulianXSofia, sino un hasta luego. Paciencia 😭😭 ARRIBA LAS TEAM JULI, q no decaiga.
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Lo q mas me gusta d Oli:
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