flotando

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Eran de esos días lluviosos donde te pones a pensar en las vueltas de la vida, escuchando las gotas cayendo sobre el vidrio.

Así estaba nuestro protagonista, Julián, quien yacía en la comodidad de su sillón observando a través de la mampara el clima lluvioso, con su matecito en la mano, pensando como cambió su vida, lenta pero seguramente, cuando lo conoció a él

Enzo Fernández

☁️

Julián Álvarez, chico tímido y reservado, su círculo social era muy cerrado, le gustaba mucho jugar al fútbol y destacaba por sus buenas habilidades y técnicas a la hora de jugar en la cancha.

Una tarde, mientras los chicos calentaban para jugar un partidito, Gallardo los llamó para "hablar" con ellos, más bien les presentó a un nuevo joven que se iba a unir al equipo.

Fernández, alguien extrovertido que emanaba seguridad por donde lo vieras, era un master en socializar y hacer amenas las conversaciones, por esas razones fue que se le facilitó acloparse rápidamente al lugar y entrar en confianza con los demás.

Luego del calentamiento, fueron separados en equipos para jugar un partido, a Álvarez le tocó con Fernández, los dos dieron todo de si en la cancha, y para sorpresa de nadie, congeniaron extrañamente bien, ganando el partido y dándolo por finalizado.

Álvarez se fue a descansar un rato en las bancas tomando agua, le sorprendía la manera de jugar de Enzo, era muy joven y tenía mucho potencial

Álvarez no iba a negarlo, sí, le parecía guapo el menor, mucho, su mandíbula bien definida, su nariz recta, su lindo perfil, la manera en la que se marcaban sus músculos de los brazos, en fin, Enzo Fernández era innegablemente hermoso.

Mientras Julián seguía sumergido en sus pensamientos, no notó la presencia de una personita sentandose a su lado

- Que ondaa lindo, vi la forma en la que jugas, sos un animal, como te llamas? - Preguntó Enzo en esa forma tan él, con esa sonrisa matadora que tenía.

- A-Ah, hola no te vi, me llamo Julián y gracias - Le sonrío amablemente el mayor mirando detalladamente al contrario.

- Julii, lindo nombre - Dijo sonriente, haciendo que el mencionado tenga un leve sonrojo en su cara por el apodo.

Así estuvieron unas horas hablando, conociendose, hasta que se estaba haciendo de noche y el de limpieza los estaba prácticamente botando, intercambiaron números y cada uno yendose a su casa con una sonrisa en sus labios.

A partir de los siguientes meses, se volvieron muy cercanos,
a Julián le gustaba la presencia de Enzo, a Enzo le gustaba la presencia de Julián.

Desde que Álvarez empezó a relacionarse con el morocho, dejó de ser ese chico tímido e introvertido que era y progresivamente era más seguro, de sus decisiones, de si mismo. Y todo era gracias a la ayuda de el menor, le encantaba esos momentos con él que se la pasaban riéndose de cualquier pavada, hablando de cualquier tema, el solo pasar tiempo con Fernández y estar a su lado,
le hacía sentir como estar flotando.

Una noche de diciembre, los dos estaban en la casa de Enzo viendo una peli en su cuarto, los dos en la cama, específicamente el menor recostado en el pecho del mayor mientras este le acariciaba suavemente el cabello, Álvarez ya no lo podia negar, estaba enamorado de su mejor amigo, pero no sabía si el contrario sentía lo mismo, así que decidió acabar con esa duda que lo carcomía durante días.

Dirigió su vista de la tele a su amigo que estaba acostado sobre él, lo movió un poco para tener su atención y lo consiguió.

- Enzi, quiero decirte algo - musitó nervioso haciendo levantar al menor, preocupandolo un poco por el tono que usó.

- Si Juli decime que pasó - lo miró con total atención.

- Bueno no se cómo empezar, y tampoco quiero andar con rodeos, me gustas Enzo, desde que te vi por primera vez en el entrenamiento me pareciste el pibe más guapo que vi, estoy tan enamorado de vos que ya no creo que pueda dar vuelta atrás - terminó Julián, nervioso por la respuesta.

Enzo quedó viendolo por unos segundos, que para el mayor parecían los más eternos, para luego sonreir, agarrarlo de los cachetes y plantarle un largo beso

- Yo también estoy enamorado de vos Juli, me encantas de una manera y quiero pasar mis días a tu lado - Habló el morocho, aliviando al castaño sonriendo, dándole un beso más profundo.

Y el resto es historia

☁️

Recordar todos esos momentos vividos junto al menor, como se conocieron, su primer beso, su primera cita, su primera vez, su primera pelea, su primera reconciliación, todas esas situaciones, para Julián era como abrir una cajita de videos, porque, por más que hayan pasado 6 años, siguen esos vivos recuerdos como un fuego flamante.

- En que tanto pensás, mi amor? - Por detrás del mueble se acercó un morocho tatuado dándole un beso en el cachete al castaño sentandose a su lado poniendo su brazo alrededor de sus hombros.

- En nada gordo, en solo nosotros y como nos conocimos - Le sonrió y le dio un pico - te acordas como fue nuestra primera cita?

- Como querés que me olvide eso, te invité a mi casa a una cena que preparé yo, que me salió para el orto y tuvimos que pedir delivery, pero te veías tan hermoso como siempre - El menor lo miraba y hablaba con una sonrisa en la cara y podía jurar que tenía un brillo en sus ojos.

Julián supo que, por más que pasen los dias, los años, Enzo le seguiría mirando con ese amor en sus ojos, sabía que él iba a estar a su lado cuando despierte, sabía que era de verdad, no era un sueño, que sí había alguien que iba a estar con él hasta el fin de sus días, Julián estaba tan enamorado de este hombre que no le daban las palabras para expresarlo.

Y Enzo estaba igual o peor.

blouse - enzo x juliánWhere stories live. Discover now