Narrador desconocido

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—Lo siento

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—Lo siento. Lo hice porque no tenía otra opción —dice tratando de disculparse —yo jamás lo hubiera hecho.

Camina sola de un lado a otro eufórica, en su propia habitación, debido a algún tipo de sustancias los cuales recrean recuerdos amargos.

La veo por la pantalla y no puedo sentir que más pena por ella. Entrar en la vida de las chicas y sobre todo en la de ella, fue demasiado sencillo.

Todos están tan metidos en sus propios asuntos que olvidan el verdadero significado de la amistad, pero no creo ser la persona adecuada para hablar de ello. No cuando no confió en absolutamente en nadie, ni en mí, sobre todo en mí.

Se que a veces puedo llegar hacer cosas que ni yo mismo creí capaz, pero no estamos aquí para hablar de mí. Yo no soy lo que importa ahora, mientras tanto «¿A qué no se imaginan quien es el especial de este capítulo?»

«Si, acertaron»

Brandy Fuller, para hablar de ella necesitamos un poco de contexto. Es hija de un entrenador de baloncesto en una escuela secundaria y una mujer lo suficientemente preocupada, por pasar el día entre amigas y fiestas. Su familia no es perfecta, pero los une un hábito heredado: el alcohol o el de algunos miembros en específico, sustancia que los haga escapar de la realidad.

Como pueden notar, sus padres son fieles aficionados a las bebidas alcohólicas. Solo con saber que sus hijas tiene nombres de bebidas, es suficiente para conocer su obsesión: Brandy y la hija mayor, Margarita, quien desde muy temprana edad estuvo expuesta a los vicios y al libertinaje.

Todo se remonta cuando Maggie tenía solo once años. Era una niña tan talentosa como muy hermosa, solo bastaba mirarla para saber lo lejos que iba a llevar. Tenía una enorme desenvoltura al momento de cantar delante de millones de persona, a tan corta edad, los cuales quedaban embelesados al momento de recitar cada pieza.

Tener esa presión a su corta edad fue mucho para ella, porque pronto comenzó a juntarse con personas mayores, que la incitaban hacer cosas que rompieran las reglas. Hasta que paso por lo que las madres cuidan tanto a su hijas, quedo embarazada y no solo eso, quedo embarazada de un hombre tan perdido en la droga como ella

La lucha para tratar de rehabilitarla fue dura y extensa, por lo que Brandy pasó toda su infancia viendo como caía una y otra vez su ejemplo a seguir, pero ella es capaz de hacer lo que sea por su hermana, aunque ahora parecía haber mejorado un poco, «pero no hay que olvidar que los golpes dejan secuelas graves, que nos marcan para el resto de la vida» 

Después de unas horas, cuando se le había pasado un poco el efecto, fue a la casa de su hermana y encontró al niño completamente solo y con las puertas abiertas.

—¿Estas bien pequeño Sam? —le pregunto a su sobrino.

El niño asintió sin entender muy bien su tono de preocupación, mientras jugaba con su pequeño carrito. Cuando toda la casa estaba asegurada, acostó en su cama y ella se sentó junto a ella.

Sabe perfectamente que ella nunca seria una de esas persona que pudiera llegar tan lejos. Nadie de su familia lo era y vivía con el constante miedo, que el pequeño Sam tampoco fuera lo suficiente para lo que mundo espera de las personas.

Cuando el pequeño se queda dormido, sale al balcón y prende un cigarro, mientras mira la luna.

«¿cómo es que una sola persona puede cargar con tanto remordimiento en su vida?»

«Es como si fuera una herencia familiar, dañar siempre todo lo bueno»

«Es como si fuera una herencia familiar, dañar siempre todo lo bueno»

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Bajo la superficie [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora