Regresare

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Narr Shen Jiu

Cuando vi a Shen Yuan desde la habitación de Qiu Haitang el miedo recorrió mi cuerpo, si alguien tan distraída como ella lo noto tan rápido seguramente otra persona ya lo a notado, después de todo no es como que su pelaje blanco pasara desapercibido, salí de la habitación de Qiu Haitang a toda prisa después de hacerla prometer que no mencionaría al zorro que vimos, a nadie, llegue al cobertizo con la esperanza de encontrarlo ahí, pero al entrar vi que estaba vacío, las dudas golpearon mi mente haciendo que el temor creciera pero la más grande de todas es ¿Dónde esta?, lo espere ahí todo lo que pude pero al llegar la noche tuve que regresar a mi habitación para evitar ser golpeado por los guardias, al llegar me tiré en la cama y cerré los ojos con fuerza, está noche no podría dormir bien.

A la mañana siguiente tuve que hacer deberes en la cocina a primera hora, las criadas hablaban de uno que otro chisme que estaba circulando por el lugar, uno en particular llamo mi atención, decían que un cultivador deshonesto había llegado al pueblo y que parecía ser bastante hábil, el único problema era que tenía mal carácter, además de que visitaba el pequeño burdel del pueblo todas las noches, hace unos días conocí a este cultivador, Qiu Haitang le había pedido permiso a su hermano de pasear por el pueblo, de alguna manera logro llevarme a mi con ella, mientras mirábamos los puestos que llamaban su atención un hombre que se veía fuerte pero ya un poco mayor se acercó a nosotros, se presentó como Wu Yanzhi y dijo estar interesado en tomarme como su discípulo, pero antes de que pudiera contestarle adecuadamente Qui Haitang interfirió diciendo que no tendría tiempo para eso ya que pronto nos casariamos, me moleste muchísimo pero no podía decirle nada por miedo al castigo que me daría su hermano si la hacía llorar, el hombre no tan convencido se despidió de nosotros diciéndome que lo pensara y que estaría hasta el fin de mes en este pueblo, regresamos a la mansión después de eso, al acabar con mis deberes en la cocina salí a barrer los jardines, aun no sabia nada de Shen Yuan, ni siquiera sabia si había dormido en el cobertizo, pare de golpe mis pensamientos al darme cuenta de algo, en que momento me había empezado a importar lo que hacia esa bola de pelos? 

-Hey, Shen Jiu-al escuchar la voz del antes mencionado empecé a buscarlo con la mirada hasta que lo encontré, sentado en una roca cerca del lago artificial que tenia el jardín

-Tú ¡¡- planeaba reclamarle por haber desaparecido pero me recordé a mi mismo que no era buena idea gritar en este momento, llamaría la atención de los guardias y eso nos pondría en peligro a los dos así que suspire y hable casi en un susurro -¿Donde has estado?- 

-En el bosque- dijo como si fuera lo mas obvio del mundo, que acaso esta bola de pelos no era consiente del peligro?, aunque pensándolo bien, no era mas bien lo normal que Shen Yuan prefiriera dormir en el bosque?, después de todo era un zorro, uno que podía hablar, tenia habilidades curativas y tenia un raro pero llamativo pelaje blanco, que según  sabia no era muy común que digamos -vine a decirte algo importante- la voz Shen Yuan me saco de mis pensamientos, asentí con la cabeza para que este siguiera hablando -me iré por unos días-  parecía querer decir algo mas pero no pude evitar interrumpir 

-¿Te iras?- sin querer soné algo afligido

-Solo por unos días-  

-¿A donde? - 

-Iré al pueblo-

-¿Acaso te has vuelto loco?- realmente me había empezado a preguntar que tan cuerdo estaba este zorro

-Claro que no- dijo un poco ofendido- mira, ya se como salir de aquí, pero una vez que salgamos tenemos que alejarnos todo lo que podamos y rapido, así que iré al pueblo para ver si tenemos alguna manera de irnos sin que nadie nos note- eso tenia de cierta forma algo de sentido, después de todo es cierto que tenemos que irnos lo mas rápido y lejos que podamos, pero aun así no me sentía tranquilo al dejarlo ir solo, entonces recordé lo que había pasado hace unos días en  mi salida al pueblo con Qiu Haitang 

-Conocí a un cultivador errante hace unos días, dijo que tenia un talento natural para el cultivo y me ofreció ir con él, me advirtió que estaría aquí hasta el fin de este mes- si elegíamos bien el día de nuestro escape podríamos irnos con ese hombre y pasar desapercibidos

-Es una buena idea, cual es su nombre?- 

-Wu Yanzhi- ese cultivador no me había dado buena espina pero soy consiente de que en este momento nadie me da buena espina y si era una oportunidad de escapar de aquí entonces estaría dispuesto a tomar su oferta 

-Le echare un vistazo mientras estoy en el pueblo- decidió Shen Yuan, mi intención era que dejara de lado la idea de ir al pueblo, pero ahora además quería seguir a un cultivador  

-¿planeas seguir a un cultivador?- asintió alegremente como el tonto que era -¿estas consiente de lo que eres?, diablos Shen Yuan si te ve obviamente querrá cazarte- le dije con la esperanza de que lo pensara de nuevo, no solo ese viejo querría casarlo, todo el pueblo estaría interesado en tener su pelaje, pero este solo soltó una pequeña risa juguetona y dijo

-Tengo algunos trucos bajo la manga, así que no te preocupes- de verdad era un tonto, aunque sonara bastante seguro de que podía ir y regresar sin ser atrapado no podía dejar de pensar que era una locura, pero en realidad podía detenerlo?, ni siquiera éramos amigos, que intentara ayudarme a escapar de aquí ya era mas que suficiente como podría decirle que realmente no quería que se pusiera en peligro, que lo quería cerca, que el miedo de que le pasara algo me estaba comiendo por dentro, no podía decirlo

-Bien- acepté de mala gana -mas te vale regresar- si no regresas no se que haría

-claro que regresare y nos iremos muy lejos de aquí- parecía estar realmente seguro de lo que decía -volveré en unos días- se volteo y avanzo unos cuantos pasos -por favor cuídate-  dijo antes de salir corriendo, parecía ser una suplica un poco triste y por un momento pensé que tal vez no era el único que estaría preocupado

-Tú también cuídate- dije aunque ya no quedaba rastro de la bola de pelos.                                      



Quédate conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora