Una historia en donde dos almas destinadas a encontrarse y conocer el amor, enfrentar los diferentes mundos y sentimientos para fortalecerse como uno solo.
O un mundo en donde se aman con fervor, pero eso no sirve para evitar su destino.
☆ Yoonmin
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- ¿Segura que es por aquí Yeji? -Debido a la fuerte lluvia, todo estaba oscuro, las nubes cubrieron en su totalidad la radiante luz de la luna, dejándolos en la sombra de la oscuridad, encontrar a esa chica realmente iba a ser un desafío
- ¡Creo que la vi! - Debido a que todo el tiempo, Jimin estuvo tomando la mano de Yoongi, no tuve que ponerse a buscar ahora al mayor, y Yeji simplemente con la ayuda de, su favorecible, buen oído, no tardó mucho en dar con ellos - Dios, si es una niña
A regañadientes, Jimin tuvo que soltar la mano del pálido, incluso olvidó toda la conversación que tuvieron hace un rato, olvidó el dolor que sintió cuando Yoongi le confirmó todas esas cosas horribles que le dijeron de él. Oh, vaya que olvidó todo eso, y algo más invadió totalmente desconocido para él; se sintió como la soledad invadía cada parte de su cuerpo, se sentía vacío completamente, como si Yoongi ... no, no estaba en posición de ponerse a sobre pensar, ahora solo tenían que sacar a esa niña de la oscuridad del bosque y ponerla a salvo, luego vería como metía sus pequeñas manos entre las de Yoongi.
Como pudo, Yoongi tomó el cuerpo de la niña entre sus brazos, la pequeña niña acomodó los brazos que colgaban a los costados para evitar que chocaran con cualquier rama en el camino que pudieran hacerle algún más daño de lo que realmente aparentaba. Dios, como odio ver eso, aunque luego se odio más por tener ese tipo de pensamientos.
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- Coloca este trapo en su frente Yoongi, tenemos que bajar su fiebre - Yeji le extendió el trapo blanco, húmedo en agua tibia, pero antes de que pudiera tomarlo, el rubio se le adelantó y se lo quitó
- Yo mismo lo haré - Caminó y colocó casi con cierto cuidado el pequeño trapo sobre la frente de la niña
Sin darle importancia, Yoongi siguió picando las verduras para la sopa que estaba preparando para cuando la niña sin nombre despertara, ya que al hacerlo, tenía que alimentarla bien y recuperar las fuerzas que había perdido
- Bueno, Jimin - El nombrado ni se inmutó - Que dices si me ayudas a cambiarla, o prefieres terminar de hacer la sopa y que Yoongi venga a ayudarme - Ahora el menor tenía toda su atención en ella
- No, yo te ayudo - Miró por última vez al pálido y fue donde Yeji a cambiar las mojadas ropas del cuerpo yacido sobre su cama, estaba tan pálida y fría, debió de haber estado mucho tiempo tirada bajo la lluvia, pero también sonaba casi imposible el echo de que alguien pudiera sobrevivir a esas temperaturas sin ningún tipo de abrigo - ¿Crees que venga del mismo lugar que llegó Yoongi?
