Capítulo 43 🐰 No todo está perdido

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#ViernesDeRTR

Capítulo dedicado a caosfaby por responder correctamente la pregunta del capítulo pasado 

Capítulo dedicado a caosfaby por responder correctamente la pregunta del capítulo pasado 

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Un líquido ácido me subió a la garganta. Estaba a punto de soltar una arcada. Me sentí asqueado a causa de la situación y el hecho de no saber cómo había llegado hasta ese lugar me tenía confundido. Era una maraña de sensaciones desagradables de las que quería desprenderme, pero mientras más pensaba, estas más se aferraban a mí.

En mi desesperación, hice el torpe intento de levantarme de la cama. Mis extremidades pesaban y no reaccionaban como deseaba. Las piernas se me enredaron con las sábanas y tropecé. Fue pura misericordia del destino —o lo que sea que exista— lo que me ayudó a sostenerme de la cama. Gracias a eso me di cuenta que no estaba completamente desnudo, sino que llevaba puesto los pantalones, mismos con los que había ido a esa condenada fiesta.

Pensar en qué sucedía causó que una punzada en la cabeza me cerrar los ojos con fuerza, al punto en que al abrirlos no vi más que partículas de colores en el aire. Detrás de ellas, Bonnie observaba maravillada la patética escena que montaba.

—¿Qué me hiciste?

Las palabras me rasparon la garganta.

—¿Yo? —su voz impostada me recordó a la que yo solía hacer para fastidiar.

Y tenía todo el sentido del mundo, eso era lo que Bonnie buscaba hacerme sentir: fastidio, molestia, enojo. Ella quería provocarme para divertirse por mi ignorancia.

Eso hacía más repulsiva la situación.

—Sí, tú, ¿qué demonios me hiciste?

Quería que mis palabras sonaran cortantes y pausadas, pero hacerle entender que estaba molesto solo la satisfacía, al fin de cuentas, por fin la necesitaba para algo.

Se incorporó, cruzó las piernas sobre la cama y apoyó los brazos.

—¿Estás enojado porque estoy usando tu playera? —tras su pregunta metió un dedo en el cuello de la prenda y se la llevó a la nariz para olerla.

Intenté ponerme derecho, pero casi resbalé. Las náuseas volvieron a subirme a la garganta cuando el mareo regresó por mis movimientos. Con los ojos entrecerrados pude ver cómo mi sufrimiento le sacaba una sonrisa torcida a Bonnie.

—Creo que deberías volver a recostarle. —Su mano acarició el lado de la cama donde yo antes estaba.

—Dime qué me hiciste y por qué estás usando mi ropa —Fui firme.

Las risas del video volvieron a reproducirse. El video que Bonnie veía en su celular estaba en repetición. Para mi desgracia, por más que quisiera ver de qué trataba, estaba lejos y mis ojos no distinguían bien los objetos a la distancia.

Rompiendo tus reglas ✨Nueva versión✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora