Relato IV

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Hoy ante ustedes diré todas las verdades que he ocultado, la soledad es una amiga que a veces es compañía y otras solo te quiere para ella. Pero en verdad te enseña quien vale la pena...

Aprendí que la mujer es una reina que se le tiene que tratar con respeto durante el día y ser su mejor amante en la noche, también a ser su almohada cuando esté triste.

Ante el cielo y la tierra confieso que he descubierto la verdad sobre el amor, que puede ser la base para uno seguir aguantando un poco más y estar más cerca de esa Catta que tanto ama. No fue fácil conquistar a mi Diosa, al inicio no quería admitir que estaba enamorada de su alma.

Hasta que sin ninguna razón, una noche miré al cielo y sonreí al pensar en ella, cada noche la pensaba como tonto enamorado y abrazaba mi almohada pensando que era su silueta...

— ¿Qué tanto estás dispuesto a hacer por la mujer que amas?— Preguntó mi madre.

  Y sólo le pude responder: 

— La muerte es mi único límite.

Es mi adoración más perfecta esa gordita hermosa que a veces me hace sentir emociones nuevas y me ha demostrado que la vida vale la pena si esta ella... Se convirtió en mi felicidad y mi fe. Y algún día espero contarle a Destiny que su madre valió cada segundo de mi vida, que ella será tan hermosa como su mamá y si en un futuro lejano... Consigue a un hombre, espero que la ame como yo amo a su mamá, mis mejores testigos son la lunas y las estrellas que han visto cuanto rezo por amarla y dedicarle todas las vidas que tenga este poeta vagabundo.

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⏰ Última actualización: Jan 26, 2023 ⏰

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