Capítulo 4: Una flor por tu nombre

54 4 0
                                    

「花」

"Te quiero como la planta que no florece, pero lleva
la luz de esas flores, escondidas, dentro de sí misma,
y gracias a tu amor, el estrecho aroma que surgió
de la tierra vive poco en mi cuerpo".

- Pablo Neruda, 'Cien sonetos de amor: XVII'

————————————————————

 ————————————————————

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

——————————————————

—Hyung, no llores. Odio cuando lloras. Odio cuando estás triste—.

—No puedo evitarlo, Taehyung ah. Si no quieres verme llorar, ¿por qué no sigues adelante y te vas a casa? No te preocupes por mí; estaré bien aquí—.

—No me digas que te deje en paz hyung. Nunca puedo dejarte solo—.

—Taehyung ... —

—-Déjame tu tristeza, hyung. Lloraré por ti. Atiré tu dolor, por ti, para que no tengas que sufrir más—.

—No digas tonterías, Taehyung. Solo haz lo que estás haciendo ahora. No estoy triste cuando me abrazas así—.

—Hyung, quiero cuidar de ti. Te prometo que cuando sea mayor, ganaré lo suficiente, compraré una casa, lejos de tu familia, y viviremos allí, solo nosotros dos. Pasaremos todo el tiempo juntos, y nadie puede detenernos—.

—No seas tonto, Taehyung, no estoy hecho de vidrio. Yo también contribuiré a nuestro futuro. Trabajaremos juntos para que suceda. No lleves todo sobre tus hombros—

Contigo hyung, no me importaría. No me importa, frente a todas las dificultades. Si eso significa que serás feliz, y nosotros estaremos juntos—.

—Taehyung...—

—Te quiero, hyung—.

Los ojos de Seokjin se abrieron.

Se sentó directamente en su cama, frotándose la frente, desorientado, mientras respiraba profundamente, y trataba de calmarse y calmar su corazón acelerado.

Había pasado un tiempo.

Se puso una mano en la cabeza, tratando de discernir, inseguro de si lo que había soñado era más que eso, solo un sueño, o algún tipo de recuerdo confundido.

Al igual que el día en que Taehyung lo acompañó a casa.

De pétalos, de oscuridad, de humedad, de toques suaves y afecto agridulce.

Se sonrojó un poco, pellizcándose las mejillas, haciendo un gruñido cuando pellizcó un poco demasiado fuerte, balanceando las piernas fuera de la cama, abriendo las cortinas para dejar que entrara la luz del sol, caminando hacia el baño con los ojos entrecerrados un poco de la inundación de luz, cepillándose los dientes cuidadosamente.

In Remembrance - TaeJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora