#22Casarnos.

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Gusu Lan.

Cloud Recesses.

Los murmullos, que comúnmente eran prohibidos en los nichos de la nube, en esta ocasión inevitablemente fueron rotos, ya que cada pocas horas llegaban un grupo de adolescentes con invitaciones a estudiar arduamente por un año en representación de sus sectas, más en esta ocasión y pese a la algarabía de los jóvenes, estos no habt ufflaban de ellos si no de la escena a unos pasos de ellos. Y es que era verdaderamente imposible no cotillar, si veían, no sólo a un Lan, si no ha tres, comportarse de forma ansiosa y desesperada, aunque dos, los más jóvenes, lo disimulaban mejor.

Más no el mayor, no el estricto y perfeccionista maestro Lan QiRen.

-Shifu -susurro Lan XiChen, mirando como un cachorro perdido de su tío a las escaleras de piedra y de estas a su tío- Tía Yu vendrá ¿verdad? -pregunto preocupado-

Hace dos horas ya que la secta de Yunmeng Jiang debía a ver llegado pero no veían ni una sola túnica de color morado.

Los cuatro Lan ahí reunidos comenzaban a temer lo peor.

-Debería ir a buscarlos -dijo inquieto Lan WangJi, cerrando con fuerzas una de sus manos sobre la empuñadura de su espada-

QingHeng-Jun, quien había salido de su reclusión hace cinco años y se había enterado en ese tiempo de muchas cosas que hubiera querido no saber de su pequeño hermano, sonrió tenuemente hacia su dramática familia, aun así no dijo nada con respecto a su inapropiado comportamiento y solo se dedicó a saludar a los discípulos que ingresaban, a quiénes por cierto su hermano y sus hijos estaban ignorando olímpicamente.

-Iré yo -hablo de pronto QiRen con seriedad- debí haberlo he- -las palabras del de blanco murieron en su boca cuando un par de risas, que el muy bien conocía, comenzaron a llenar Cloud Recesses-

Cinco figuras captaron rápidamente la atención de la rama principal de la secta Lan, adolescentes con diferentes expresiones faciales rodearon a una mujer mayor, quien trataba de reír discretamente pero las lágrimas al borde de sus ojos hicieron notar lo mucho que se contenía.

-¡Tía Yu! ¡No le creas! -reclamó con un fuerte sonrojo Xue Yang-

El menor iba caminando frente al grupo mientras le daba la espalda a las escaleras, golpeando de vez en cuando con su codo a un risueño Wei WuXian, quien lo tenía abrazado con su brazo por el cuello e imitaba el caminar del más joven.

-Oh~ A-Niang, debiste verlo -conturreo el azabache, alzando de forma sugerente sus cejas- cuando esos cultivadores errantes se acercaron y le hablaron parecía que no existía nadie más que mi pequeño Shidi~ -rio-

El grupo rápidamente se unió a las risas y las burlas, recordando aquella extraña escena.

-A-Yang enseguida huyó asustado -aporto a las burlas YanLi, tomada del brazo de su madre-

-¡SHIJIE! -grito ruborizado-

A-Yang en ese momento, debido a la intensidad y la familiaridad con la que le hablaban, había creído que querían secuestrarlo.

-Te caíste metros después -rio Meng Yao, tomando la mano de Yu ZiYuan-

Había escuchado de sus hermanos marciales que su tía se había caído años atrás por estas escaleras, así que con miedo, y mirando mal las escaleras de vez en cuando, tomó como tarea ayudarla a caminar con cuidado y protegerla en caso de caer.

Más no era el único que tenía eso en mente.

-A-Niang, debiste verlo -se rio a carcajadas Jiang Cheng a un costado de su hermana-

¿¡Soy La Araña Violeta!? -MDZS- [En Pausa]Where stories live. Discover now