A Life of Colors - Yoonseok

15

La mujer se hizo a un lado, dejando entrar a ambos, sentía que le faltaba el aire al ver a Yoongi de la mano de Hoseok.

— ¿De qué deseas hablar cariño? — preguntó la mujer, llegando a la sala y tomando lugar, de lo contrario sus piernas no soportaría mucho tenerla de pie.

Yoongi y Hoseok tomaron asiento, sin dejar de ver a la mujer.

— Creo que sabes de que quiero hablarte madre. ¿Por qué le pediste a Hoseok que se alejara de mi? No, formule mal mi pregunta. ¿Por qué le ofreciste lo que fuera para que se alejara? — Yoongi trataba de mantenerse sereno frente a su madre.

— Cariño, de verdad le vas a creer a este, sabes que yo seria incapaz de hacer algo como eso, soy tu madre, mi único deseo es que seas feliz — habló la señora Min, tratando de mantener su vista únicamente en Yoongi.

— Hoseok es mi felicidad — respondió Yoongi acariciando la mano de Hoseok, quien sonrió ante las palabras, sabía que aquellas palabras eran demasiado ciertas.

— Vamos cariño, sabes que no es cierto, tu felicidad es con Wendy, por ella viste los colores, no puedes negarlo cariño — explicó la mujer tratando de ignorar el hecho que su hijo siguiera tomando la mano de Hoseok.

— Yo nunca vi los colores por wendy, por Hoseok si, el también ahora los puede ver — murmuró Yoongi, el contrario se tenso un poco, pero se relajo para que la señora Min les creyera.

— Es un bonito abrigo color marrón señora Min — Hoseok la observó, la mujer le dirigió la mirada por primera vez.

— Esto no puede ser cierto — la mujer se puso de pie, todo lo que había conseguido se estaba arruinando.

— Si puede, por que lo es, Wendy es muy linda y todo, pero jamás pudo ver los colores por mi, fue por Jin, ¿acaso creíste madre que jamás lo sabría? — Yoongi observó con atención a su madre.

— Todo fue por tu bien, siempre pensé en eso Yoongi, estar con un raro como Hoseok no te traería nada bueno, en cambio, Wendy es de buena familia, es linda, educada, lo tiene todo — habló rápidamente observando a Yoongi.

— No es mi alma gemela y no tiene mi amor, el dueño de eso es Hoseok — respondió Yoongi.

La mujer guardo silencio, observando a la pareja, Yoongi se acercó dejando un beso en los labios de Hoseok, quien sonrió a pesar de sentir como su corazón saliera del pecho.

— Basta — la mujer se acercó, separando a su hijo, tomando directamente a Hoseok.

— Tú, debiste irte cuando te lo pedí, aunque habría sido mejor que murieras en aquel accidente, todo estaba perfectamente planeado — habló la mujer sintiendo el enojo de ver a su hijo besando a Hoseok.

Yoongi reaccionó rápidamente, separando a su madre de Hoseok, quien quedó con algunas marcas hechas por la mujer, Hoseok quería preguntarle a qué se refería, al igual que el pálido, pero la mujer entendió antes de que la pregunta fuera dicha.

— Estabas aprendiendo a manejar, debías ser tu quien condujera el auto cuando el accidente sucedió, pero fue tu padre — la mujer habló sin pensar antes en sus palabras.

Hoseok se quedó inmóvil ante aquellas palabras, jamás imagino todo de lo que sería capaz de hacer la madre de Yoongi.

— ¿Qué estas diciendo Min SuHee? — Yoongi la llamo por primera vez por su nombre, la mujer reaccionó volteando a ver a su hijo.

— Jamás permitiría que estés con un raro como Hoseok, tu estas hecho para muchas cosas mejores, ni te imaginas por todo lo que tendrías que pasar si terminas con él, por eso, cuando Wendy vino a mi, llorando por que a pesar de que te amaba ella no podía ver los colores, le aconseje mentirte, quizá mi primer plan fallo, pero Hoseok se fue con su madre, dejandote solo, lloraste muchas noches, por eso le pedí a aquel chico que te empujarla por las escaleras, todos pensarían que fue un accidente, cuando el médico dijo que habías bloqueado a Hoseok por algún recuerdo doloroso, probablemente era por que Hoseok dejó de responder tus llamas o tu de recibir las suyas, yo bloquee el número y cualquiera que fuera del lugar de donde vivía Hoseok — habló la mujer sin dejar de ver a Yoongi, quien se sentía roto, al ver cómo la figura de su madre, de aquella mujer que tanto amo, se rompía frente a sus ojos, pero le dolía por todo lo que tuvo que pasar Hoseok a causa de su madre, todo por haberse enamorado.

Hoseok con la fuerza que le quedaba al escuchar toda aquella historia, busco su móvil, enviándole aquel mensaje en que habían quedado si aquello se salía de control.

— Cuando volvió y seguías sin recordarlo, todo iba bien, tu estabas con Wendy, pero entonces él, te comenzó a meter sus ideas, ni siquiera con esas fotos que le pedí a wendy que tomará, para que Hoseok se alejara, por que tu no puedes ser raro como el cariño, tu eres un Min, el debía marcharse de tu vida, lo estabas superando, lo estabas olvidando, no puede ser tu alma gemela bebé — habló la mujer, entre sollozos.

Yoongi en otro momento eso le habría conmovido, pero ahora no, había pasado toda su vida infeliz, sintiendo que algo le faltaba sin saber que, llorando sin saber por qué cada noche, todo por que su madre no aceptaba aquello.

— ¿Como supo de nosotros señora Min? — la voz de Hoseok se escuchaba rota, le estaba hablando a la persona que le arrebato a su padre, él mejor de todos.

— Una de las tantas veces que estabas en esta casa, subí a dejarles algunas botanas y bebidas, cuando abrí se estaban besando en la cama de Yoongi, cerré tratando de no hacer ruido, estaba furiosa en aquel momento, saber que mi hijo era de esa forma por tu culpa, no podía soportarlo — la mujer observó a Hoseok, con una mirada llena de rencor.

Yoongi se apartó, dejando a la mujer hablando sola, diciendo demasiadas incoherencias.

— Hobi — habló acercándose al menor, estando al pendiente aún de su madre —. Sé que no repararse nada, que has sufrido demasiado por mí culpa, pero perdón solecito, perdóname por todo lo que has tenido que vivir — Yoongi comenzó a llorar soste iendl las manos de Hoseok.

El menor observó a Yoongi, después a la mujer, que parecía como si hubiera perdido la razón, para volver a ver al pálido.

— Yo no tengo nada que perdonarte a ti Yoongi, tu no tuviste la culpa, tampoco fue mía por enamorarme de ti, pero... — quitó las manos, poniéndose de pie con calma —. Me tengo que ir — murmuró alejándose un poco.

— No Hoseok, por favor — trato de acercarse, pero se detuvo cuando Hoseok retrocedió un poco más.

— La policía viene para acá, entenderás que es lo correcto, yo necesito tiempo — dio otro paso, esta vez Yoongi no se acercó.

— Por favor no, Hoseok, no te alejes de mi amor — pidió Yoongi sin dejar de verlo.

Hoseok se retiro las gafas, dejándolas en una mesa que estaba cerca.

— Lo siento Yoongi — Hoseok salió de la casa.

El pálido lo siguió, deseaba detenerlo, pero vio cómo se subía a un auto, reconoció a Jimin como conductor, lo iba a seguir cuando las sirenas se escucharon, no podía irse, debía declarar en contra de la mujer que le dio la vida, pero que en realidad no conocía como tal.