Uno de Febrero

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Durante el receso un joven -de cabellos rubios y ojos verdes- tomo la iniciativa de ir al pupitre de uno de sus compañeros. ¿Qué hacia allí? Pues estaba dejando una dichosa carta, cuyo destinatario era nada menos y nada mas que el dueño del pupitre Ishigami Senku.

—Ginro ¡Eres un genio! —dijo para si mismo el chico mientras completaba la etapa 1 de su grandioso plan.— Ahora nada mas tengo que esperar a que venga y la vea —dijo para luego colocar la carta en medio de uno de los cuadernos del Ishigami.

Luego de haber dejado aquella carta debajo del cuaderno del chico, el decidió ir a la cafetería a pedir un jugo y una galleta, pues antes de ir al colegio había desayunado y no tenia hambre, por eso nada mas pidió esas dos cosas. Al terminar su galleta y su jugo fue a buscar a su hermano para pasar el resto del receso con el -quien estaba en la biblioteca leyendo el reglamento del colegio para memorizarlo-.

—¿Kinro? —se asoma a ver desde la puerta para localizar a su hermano, hasta que lo ve en una esquina con el libro de reglas del colegio y se le acerca. —¿Leyendo de nuevo el reglamento? —pregunto sentándose a la par de este.

—Todas las escuelas tienes reglas y la mayoría de veces son distintas pero, ''Reglas son reglas''. —respondió sin titubear mientras apartaba la vista de aquel libro y miraba a su hermano— ¿y tu que vienes a hacer? —observo como el rubio sonrió— ¿Qué estupidez hiciste Ginro?

—Nada nada~ —canturrea mientras coloca sus brazos sobre la mesa, toma sus propias manos y coloca su cara en ellas.— Es solo que —mira hacia ambos lados y luego susurra— le deje una carta a Senku en su pupitre —dijo muy feliz.

Al escuchar eso Kinro se sorprendió y quedo procesando lo que acababa de escuchar... es decir.. ¿Su hermano? ¿Dejando una carta? ¿Expresando sentimientos? Eso sin duda parecía sumamente falso.

—Estas bromeando ¿verdad? —cerro el libro mientras miraba seriamente a su hermano, y este negó con la cabeza repetidas veces— ¿Me juras que no estas mientiendo? —Ginro asintió varias veces.— No puede ser...

—Si puede ser

—No puede ser...

—Que si

—Que no

—Que si

—... te voy a creer... pero era anonima?

—Obvio, esa es solo la primera de muchas que siguen ¡Duuh! —expreso con bastante obviedad mientras rodeaba sus ojos.

—Y.. a todo esto ¿Por que?

—Pues porque empezó febrero, y de ninguna manera pienso pasarlo solo otra vez, o sea el 14 de febrero

—¿Qué tiene de especial el 14? —pregunto, pues al parecer se olvido del significado de el mismo.

—Dia dela mor y la amistad, San Valentín, día de los enamorados etc.. etc... —cambio su posición a sentarse recto mientras hacia ademanes con sus manos.

—Ah, eso, ya recordé, ¿y quieres que sea Senku con quien lo pasaras obligatoriamente?

—Si, tiene que ser el porque es la persona que me gusta.

—Okey pero.. hay mejores opciones no se.. —intentando convencerlo de que no sea Senku, pues de una u otra forma como que le caía mal.

—No hay —negando con la cabeza algo molesto.— no existe alguien mas perfecto que el y no pienso discutirlo contigo —le saca la lengua.

Mientras tanto.

Senku regresaba al salón por su cosas y mientras las guardaba una carta salió de entre uno de sus libros, el chico estaba confundido y decidió abrirla viendo que en esta decía:

Tus hermosos ojos carmesí me cautivan tanto que cada vez que te veo a los ojos mi corazón empieza a palpitar mientras mi respiración se entrecorta.
Tu mirada tan enigmática y concentrada me fascina, hace que luzcas mucho mas guapo de lo que de por si eres.
Tu seria voz es otra cosa que me encanta de ti, al igual que tu manera de expresarte al hablar, aunque digas cosas que no entiendo me encanta escucharte hablar y me gustaría escucharte hablar mas.
<3

—Wow... esto si que es inesperado.. —observa la letra— es una letra muy bonita, y las frases estaban bien escritas.. un poco cursis pero bien escritas —miro con detenimiento la carta— algo me dice que esta no será la ultima carta que reciba de quien sea que la haya dejado... —sonríe con su típica sonrisa mientras cerraba los ojos y negaba con la cabeza.

Little Letters in febraryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora