Yoongi y Taehyung ingresan por fin a su último año de secundaria, volviéndose parte de la clase 2-A, clase conformada por chicos que a lo largo de la secundaria se han vuelto bastante populares, volviéndose así la clase que esta en boca de todo el I...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Jungkook se encontraba en su habitación, viéndose al espejo, tratando de ordenar el desastre que era su cabello, siempre pasaba lo mismo, incluso trataba de peinarlo cuando aún estaba húmedo, pero nada funcionaba, así que mayormente solo lo dejaba ser, pero había días malos, ese era uno de esos, las puntas se habían rizado, usualmente se lo habría planchado, pero ese día no estaba de ánimos, estaba cansado, así que solo intento verse de alguna manera presentable y cuando estuvo contento con como se veía decidió dejarlo y rezar porque se quedará así todo el día.
Se acercó a su mesita de noche, tomando su celular de este, verificando la hora, aún iba bien, así que soltó un suspiro, no le gustaba llegar tarde a clases, además que ese día tenía literatura a primera hora y su profesor solía cerrar la puerta.
Metió su celular en su bolsillo y tomo los accesorios que siempre usaba, luego tomo su mochila y salió de su habitación, mientras le enviaba un mensaje a Seokjin, avisándole que ya estaba listo y que seguramente en 20 minutos estaría en la puerta de su casa.
—Joven Jeon.
Ante el llamado de una de las empleadas, el pelinegro levantó la mirada de su celular, prestándole toda su atención.
—El chofer esta listo.
—Gracias, ¿y mis padres?
—Ellos ya se fueron a trabajar, joven.
—¿Ya se fueron? Pero apenas son las 7, ¿Mamá no entraba hasta tarde hoy?
—Al parecer surgió algo de emergencia, y tuvieron que irse temprano, pero me dijeron que le avisará que hoy llegarían temprano y que puede agarrar el dinero del almuerzo de la mesa de noche de su madre.
—Claro, salir temprano, siempre dicen lo mismo, gracias de todos modos— Jungkook paso al lado de la mujer castaña, quién solo lo vio con un poco de pena, era una lástima que el menor pasará tanto tiempo sin sus padres, llevaba alrededor de seis años trabajando para los Jeon y eran pocas las veces que había visto a los señores compartir tiempo de calidad con su hijo.
—¡Que tenga buen día joven Jeon!
—¡Gracias señora Eunji!
La mujer soltó un suspiro, viendo al chico avanzar en dirección a la habitación de sus padres, y sintió una indudable nostalgia, ya no era un niño como cuando ella llego, ya era todo un muchacho.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
