ANATOMÍA Y UNICORNIOS

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-¡Dios!, Es súper tarde- Mi reloj marca las 10:00 am y se supone que debía estar a las 8:00 am en el salón de clases, cómo me mata Anatomía, pero a la vez la amo.

Me levanté de la cama, comencé a buscar mis cosas, joder como odio el no acomodar mis cosas un día antes, tome la mochila que más me gusta, la negra con ositos de colores; deberías madurar, eso es para niños. Dicen todos los de mi salón.

Nunca me han importado las criticas de los demás, son mis gustos y para gustos están los colores, pero si es cierto que debería madurar aunque sea un poco.

Baje a desayunar, me daré el lujo de desayunar, para mí suerte mi mamá dejo una nota con el desayuno a un lado; "Te dejo esto, espero te guste, tengo que irme al hospital para una operación de emergencia, te amo hija".

Mi mamá es una de las Médico Cirujano más conocidas de todo Monterrey, ama servir a los demás, sobre todo cuando se trata de salvar vidas.

Un rico desayuno, unos hotcakes en forma de ositos, juego de naranja y fresas, con esto queda claro que hasta para mí mamá soy inmadura, porque si, amo los osos.

Comí lo más rápido que pude, subí a mi cuarto por mi mochila, baje lo más rápido que pude, ví las llaves de los carros y tome la del Mercedes, tengo que llegar a la universidad en menos de media hora, tengo que llegar a la próxima clase.

De camino a la universidad comenzó a sonar en la radio una canción, odio las canciones en español, más cuando son de jóvenes, no los soporto, tienen una voz tan chillona y ahora todo mundo se cree cantante.

*suena en la radio*

Los dejamos con esta canción que se titula "El poe..."

Apaga eso Faty, dicen voces en mi cabeza esas voces que me hacen creer que soy esquizofrénica. Logré ver la entrada de la universidad, Tecnológico de Mty, te amo, te amo.

-Buenos días, bueno casi buenas noches, te estuve esperando para la primera clase y veo que traes cara de muerta- Dice Regina, Regina ha sido mi mejor amiga desde los 4 años de edad, cómo amo a mi güerita de ojos azules.

-Si, ya se, perdón, me dormí.- Le digo mientras cierro la puerta del carro y veo pasar al chico que me gusta, ese niño que está en el equipo de los borregos, el número 04, joder como me encanta.

-Huy, cierra la boca hermana, se te va a caer la baba, ya deberías hablarle.- Me toma del menton y me sacude la cabeza.

-Tonta, me duele la cabeza de tanto estudiar-. La tomo de la mano y me la llevo corriendo al salón.

Ser doctora es mi prioridad, no quiero enamorarme, no quiero ser tonta.

Pasaron más de 3 horas de clase, hicimos actividades en equipo, mi grupo me cae bien pero no soporto a un grupo de chavos que se la pasan diciendo que somos mataditas, estos chicos de ahora, cómo molestan.

-¿Vamos a comer o qué?.-Pregunta Regina.

-Les recuerdo que para mañana tienen que traer el proyecto que deje hace dos semanas.- Nos dice el profe mientras toma su portafolio y sale del salón.

-¡Excelente, no he terminado esa tarea!- Estaba Santi dando vueltas en la banca, Santi se cree piloto de carreras, el Tec encontro una manera de mantenernos activos con sus sillas de rueditas.

-Bueno, veo que alguien no cumplió con la tarea-. Le hice un gesto de desaprobación, santi está en mi equipo y se supone haría una parte del trabajo.

-Insisto en ir a comer, vamos faty, vamos al Starbucks por una café y luego platicamos sobre la tarea.- Salimos del salón directo al Starbucks, pedí un café alto como el de siempre (Latte Macchiato).

El chico del OxxoWhere stories live. Discover now