LA PIJAMADA

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Estábamos detrás del Oxxo, cuando un chavo encapuchado nos tomo por la espalda -Hijo de puta, nos metiste un susto- Santi pego un brinco, me quito una zapato y lo estaba apunto con mi pantunfla.

-¿Quien coño eres?-. Pregunte.

-Lo siento pero deben irse-. Regi me jalo del brazo una y otra vez.

-¿Acaso...? Osea tu también eres un asaltante o que pedo-. El chavo me tomo del brazo y me jalo a la carretera.

-Les dije que se tienen que ir y es mi última palabra, están en propiedad privada- Me enoje y me solté de su agarre, me le iba a ir encima pero Santi me detuvo.

-Esperate perra, tranquila, mejor vámonos, vámonos... Regi calma a Faty-. Santi tomo las llaves de la camioneta y arranco mientras Regi y yo subíamos a la parte trasera.

A lo mejor alcanzamos a escuchar lo que aprecia ser una canción. -Y dime cuand...-. Santi encendió la música.

-Ahora a dónde vamos a comprar las papas, está de noche y el Oxxo más cerca está a 20 minutos sin tráfico-. Dice Regi tomando su celular para marcarle a alguien.

-Pues yo sé que se, mira que estos hijos de la tostada no dejaron que entraramos-. Me di cuenta que Santi dejo mi pantunfla en el Oxxo.

-Tengo una idea, ¿Si le marcamos a la policía y decimos que están robando el Oxxo?-. Nos mira Santi con una mirada llena de picardía.

-¿Y que crees que estoy haciendo?- Dice Regi que tenía el celular en las manos.

-Bien que sabe- Nos reímos.

Santi detuvo el auto a una cuadra después del Oxxo, le cogieron la llamada a Regi y comenzó a hablar con la policía, dijeron que llegaban en menos de 3 minutos.

Gracias a Dios la patrulla estaba cerca del Oxxo, llegó súper rápido, escuchamos las sirenas, nos echamos para atrás para ver el chismecito.

-Ya vieron que ya llegaron nmms- Se bajaron unos marinos con las armas en mano, caminando cuidadosamente hasta el interior, cabe aclarar que desde donde estábamos no se veía ni una mierda para la parte delantera del Oxxo.

-Esperen, voy a bajar por mi pantunfla de unicornio, es mi favorita-. Me baje minuciosamente de la camioneta.

Solo quería que no me vieran porque si no, iban a saber que habíamos sido nosotros los que dimos el aviso.

Logré escabullirme entre los matorrales y logré ver mi pantunfla, escuché a los marinos hablar con dos chavos pero no entendí mucho. Solo escuché que les dijo que por favor los acompañaran.

Agarre mi pantunfla pero me gano el chisme así que me acerque más, mire atrás, vi a Regi y a Santi viendo desde la ventanilla de la camioneta.

-Como le dije joven, entendemos esto, pero nos tiene que acompañar, es por rutina- Dice uno de los soldados que tenía a uno de los dos chicos esposado.

-Oiga pero ya le dijimos que estábamos haciendo...- El solado lo pego contra el suelo y vi a varios correr a dónde estaban los chicos.

-Esperen, están cometiendo un error-. Por andar de chismosa tire una botella que estaba arriba de un bote de basura, me di cuenta y quise salir corriendo.

-¿A dónde va señorita?-. Mierda ya vali, se me acerca uno de los marinos.

-Emm... No... Este... Es que yo vine con mis amigos a comprar pero vimos que estaba ocupado y se me callo mi pantunfla-. Saco mi pantunfla y se la enseñó para que me deje ir.

Un chavo de cabello castaño obscuro, ojos cafés intenso, cejas bien pobladas, de tez blanca, labios ligeramente rosas y con... Con cabellos de axila rascada. Fatima por favor, es un momento serio.

Se me quedó viendo y levanto una ceja.-Esta chava, ella...- El marino no lo dejo terminar. Era el chico que nos topamos unos momentos antes.

-Puede irse señorita-. Ni me dijeron dos veces cuando salí corriendo.

Corri sin detenerme, en mi mente quedó grabada la mirada de aquel chico asaltante, que guapo.

Subí a la camioneta y nos comenzamos a reír, no paramos de reinos hasta que llegamos a casa, sin papas, pero casi en la cárcel.

-Que pedo faty, que te dijeron-. Dice Santi tomando su mochila.

-Pues nada, solo le dije a lo que iba y el chavo que nos topamos casi le dije al marino que habíamos estado allí-. Tome el control y puse una película.

-Oigan, me van a matar pero...-. Saca unas papas de su mochila y nos las enseña.

-No mames Santiago, la Faty casi acaba encarcelada por tu culpa-. Toma las papas y las abre con coraje, lo que sea de cada quien, pero están buenas.

Regi con la boca llena de papas y yo más enojada que nada pidiendo una explicación.

-¿Y no que no las habías comprado?-. Lo quería fusilar, por poco nos metemos en un asalto, casi me llevan, bueno no, pero casi.

-Ya me acordé que después del entrenamiento las fui a comprar y soporten-. Santi se paró a apagar la luz y nos pusimos a ver una película, cuando de la nada sonó el timbre.

Me levanté del suelo y me dirigí a la puerta, tome la perijá de la puerta y abrí.

-Disculpa, buenas noches, le traigo sus papas-. Okey pero nosotros no pedimos nada, me saco de onda y el chavo vio que me saque de pedo.

-Ammm, disculpa...-. Bien sacada de pedo las agarre.

-Ah si, es que escuchamos que iban por unas papas, así que los seguí y se las traje-. Mire por arriba de su hombre y alcance a ver varias camionetas negras.

De reojo logré ver al pelos de axila rascada, me miraba con suspenso y comenzó a subir la ventanilla del auto mientras me enseñaba la britni señal... Ya saben, el dedito malo, el dedito de enmedio.

-Ah, dile al pelos de axila rascada que no quiero nada, sabrá Dios si es un sicario o yo que chingados se-. Le tire las papas encima y le cerré la puerta en la cara.

Apague la luz, me fui al suelo con los chicos y pose mi cabeza sobre el hombro de Santi.

-Wey quien era, se escuchó el portazo-. No pensaba decirles, se iban a preocupar.

-Ah no es nadie, veamos la peli...-

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Se me había olvidado la historia JAJAJAJJAAJ perdón. Regrese, nuevo cap mañana o dentro de un mes, no se, tengo memoria a corto plazo.

Comentario o like para acordarme, besitos 💋

Ig // rosepalacioss

El chico del OxxoWhere stories live. Discover now