LA CONVENCIÓN

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-¡Por los huarachitos del niño Jesús y las chanclas de Moisés!- Nos quedamos super dormidos después de una larga noche de películas, teníamos una clase mega importante a las 9:00 am en la sala de convenciones de la universidad. 

Tome una almohada y comencé a pegarle de almohadasos a Santi y Regi.-¡Despierten, despierten! ya es tarde, tenemos menos de 30 minutos para arreglarnos- Regi como pudo se levanto y comenzó a abrirle los ojos a santi.

-Santi nmms pareces una pinche piedra, despierta que ya es tarde- En lo que Regi intentaba despertar al dormilon de santi yo subi a mi habitación a bañarme lo más rápido que pude, me aliste en menos de 10 minutos, me puse lo primero que encontré, un pans de la clase de gimnasia, una sudadera y una blusita blanca básica. 

-Apuraté Fátima, vamos tarde- Gritaba Regi desde abajo, le escribí a mi mamá una nota y la deje sobre la mesa.

Salimos corriendo, gracias a Dios no nos dicen nada por como vamos vestidos a la universidad, literalmente es nuestra segunda casa y vamos como queremos.

-No debimos hacer una pijamada en plena semana no se pasen, ni desayunamos- Santi tenía un punto, ni me acorde que no desayunamos así que le mande mensaje a Ana Sofía una amiga de la facultad que nos pidiera unos chilaquiles. 

-Tranqui que ya le dije a Sofía que nos pida algo de desayunar-. Trate de maquillarme un poco en lo que llegábamos a la uni.

-Perfecto bebé, siempre piensas por nosotros-. Sí, siempre soy yo la que hace todo por estos cara de bola.

De camino a la universidad nos topamos unas camionetas, de copiloto iba un chavo muy lindo y alado de él...

-Oigan miren, ese chico que va manejando se parece al asaltante-. No debí decir eso, se supone que no les vimos la cara, Regi volteo a verme y me miraba con cara de "Pero chica".

-¿Y tú cómo sabes?-. Evadí la pregunta.

Pasamos el semáforo y no pude dejar de ver por la ventanilla, si era él, es muy guapo. No manches faty deja de pensar en el pelos de axila rascada.

Llegamos a la universidad, bajamos pero si corriendo, corrimos lo más rápido que pudimos a la sala de convenciones y claro que ya había comenzado la exposición.

Está exposición era muy importante pues estaban presentes los cirujanos mas importantes de México incluyendo a médicos extranjeros, escucharlos hablar sobre temas súper interesantes era de suma importancia para mí preparación.

Nos sentamos en la parte de hasta arriba en dónde se encontraba Sofi con los chilaquiles y un rico café.

-Me salvaste Sofi-. Me acerque a ella y le di un beso en la mejilla dejando mi labial sobre ella.

-De nada Faty, ya sabes que estoy para lo que necesiten...Oye por cierto, tú mamá está aquí y me preguntó por tí, le dije que llegarías un poco tarde-. Mi mamá venía, no sabía eso.

-Ah si gracias, ¿Quieres?.- Le extendí mis chilaquiles verdes.

-No gracias ya desayune-.

Pusimos atención las dos horas siguientes, muy interesante la exposición, de verdad me fascina la medicina, vengo de una familia de médicos, todos ellos importantes y no me quiero quedar atrás.

-Ya me aburrí-. Regi siempre aburriendose y no se cómo le hace para sacar las mejores notas.

Al fin acabo la primera exposición así que salimos un rato al punto blanco. Es un lugar en la universidad en la que hay cojines y en medio un círculo que refleja un punto con la luz del sol.

El chico del OxxoWhere stories live. Discover now