diesiseis pingüinos~

30 3 3
                                    

Narra Soobin

Eran las cinco y media de la mañana cuando mi mamá entro en mi habitación, zarandeandome como si fuera una maraca.

— Párate de esa cama Soobin, que tú te tardas mucho en arreglarte— dijo mi amada madre.

Yo la amaba pero en las mañanas como que ese sentimiento se convertirá en otra cosas.

Me levanté, coloque mis pantuflas y me quedé mirando fijamente el zapato al otra lado de la habítacion. ¿Que hacía ese zapato hay?

Cómo tres minutos pasaron hasta que espabile, no vaya hacer y la jefa me meta un coñazo. Camine hasta el baño, lave mis dientes y me di un ducha caliente.

Arregle mi uniforme mientras me veía en el espejo.

— Diosmio que bello soy— alage mi reflejo, pero que si soy es presioso.

Coloque mi zapato derecho, cuando fui a ponerme el otro, los recuerdos de anoche llegaron a mi mente haciendo que sonríe inconscientemente.

Se había puesto tímido por qué tome su mano.

Kai se comportaba de una manera muy tierna, y era muy difícil para mí no querés darle cariño o querer besarle los cachetes.

Y sabía que era solo conmigo que era asi, porque con Yeyo solo lo trataba formal siempre diciendole hyung como si fuera Taehyun o así.

Y era inevitable  no sentirme algo especial, ni que mi corazón se agite como si me fuera morir. Pero sabía que debía ser paciente y hacer las cosas lentas.

Y estoy bien con eso.

— ¡Soobin son las seis y media, apúrate!— apareció mi mamá de nuevo en el umbral de la puerta, asustandome.

No me dejan pensar en mi chico en paz.

— Voy— dije aburrido, terminando de poner mi zapato.

Tome mi bolso y baje como flash.

— ¡Mami!— llame cuando estuvimos en el auto, ella me miró de inmediato— ¿Podemos pasar por alguien antes?

Por otro lado Kai apenas se levantaba, tomo su teléfono para ver la hora, sentadose en su cama de repente al ver que eran las seis y media.

Su alarma no había sonado y no contaba con su madre ya que ella se iba más temprano que el.

Se levantó corriendo metiéndose al baño, lavando sus dientes lo más rápido que pudo.

Sin bañarse ni nada, se cambió de ropa.

Coloco su uniforme lo más rápido que pudo, y es que no se podía dar el lujo de darse su tiempo porque el tomaba el transporte público y si no estaba a tiempo lo perdería.

Con su cabello desordenado y la corbata fuera de lugar, tomo su bolso y corrió escaleras abajo. Abrió la puerta fuertemente dispuesto a salir pero se hecho hacia atrás al ver a alguien parado  al frente.

Soobin soltó una risita al notar lo desordenado que estaba el menor.

— Te paso un remolino por encima o ¿como?— cuestiono Soobin.

Kai se sonrojo fuertemente avergonzado, ¿que hacía Soobin hay?

— ¿Q-que hace aqui?

— Vine por ti— Sonrió ladinamente— creí que no estarías pero la suerte a estado de mi lado.

Kai asintió, desorientado pero no le prestó mucha atención, sin darse cuenta Soobin lo había salvado de una larga caminata.

Observó atrás del mayor una camioneta gris 4x4 dónde una linda señora iba al volante.

un amor como los pingüinos/ sookaiWhere stories live. Discover now