Preparados...listos... a las camionetas

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///Crédito al autor de la imagen///

Fue una mañana larga, despertó como siempre con los golpes en su puerta de Samuel Pens un hijo de Hebe un chico muy guapo pero muy complicado que siempre quería tener el control de la situación por eso hace unos años dejo que dirigiera la cabaña omega en el segundo piso de la casa grande allí dormían todos los hijos y legado de Dioses sin cabaña desde hace generaciones, bueno en resumen lo hizo para ver quien sería un buen capitán cuando él ya sabes...ya no estuviera entre los vivos, tristemente para Samuel, él seguía vivo.

-Si siguiera siendo el capitán de esta cabaña estaría levantado desde las 5 de la mañana.

-Pens estoy despierto desde hace horas, porque no vas y molestas a alguien más, hoy no estoy de humor para soportarte.

No se escuchó nada solo un resoplar de parte de Samuel.

-Eres un pésimo líder.

-Lo dice la persona equivocada.

Samuel golpeo su puerta con furia y después se fue escuchando sus pisadas yéndose a quien sabe dónde, volvió a estar solo esperanzado de que nadie lo molestaría hasta las 7:30, minutos antes del desayuno. Pensar era algo que siempre había sido un problema para él, su TDAH a veces era tan fuerte se perdía de cosas importantes en la escuela como la vez que en una clase de Transformaciones con McGonagall se había quedado tanto en sus pensamientos que McGonagall había tenido que golpear su escritorio cuando noto que estaba ausente mentalmente, así de metido estaba en sus pensamientos, pero solo tenía cabeza para Beckendorf y como había muerto, sentir la muerte no daba una respuesta acertada de cómo había muerto solo lo sentía... había sido rápida, se había ahogado en el mar hasta morir o.... solo pensaba en eso, en los millones posibilidades que había.

Pero un pensamiento contrario llegaba a su cabeza, << talvez murió otra persona que conocías...como Epitelio >>, pero a la vez sabía que no era cierto, Charles Beckendorf había muerto en la Princesa Andrómeda junto a muchos seguidores del ejercito del titán, el primer chico que le hablo después que volvieron del año lectivo, el que se presentó voluntario en su primera misión, cuando lo subió en sus hombros cuando regresaron después de su primera misión, él chico que lo consoló cuando empezó a fallar en las misiones, quien le dio una paliza a Lester Doller cuando revelo sin consentimiento su sexualidad a todo el campamento, o las largas tardes en donde él lo veía en las fraguas y conversaban de cosas interesantes pero también tontas o enseñándole a como construir una espada desde cero, ese chico que había sido su primer amigo en ese mundo mitológico ahora yacía en el mar con otro millones de cuerpos en donde no podría darle una sepultura digna pero sabiendo que su alma estaba en los elíseos...

Alguien abrió su puerta de golpe, una hermosa mujer de cabellos castaño ojos marrones y piel clara pero ligeramente quemada por él sol, llevaba una de las nuevas variantes de la camiseta del campamento cambiando el Pegaso por un animal o un objeto que representara al padre o madre divino, la chica una la variante de Nike. Odilia Wood acaba de regresar al campamento después de dejar a su hijo con su madre.

-Ya me enteré- fue lo único que dijo antes de sentarse a su lado- ven a mí.

Su cuerpo actuó solo y se recostó sobre Odilia y simplemente empezó a sollozar solo queriendo que alguien que ya no estaba entre ellos volviera.

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Después del desayuno llegaron las inspecciones de cabaña y como siempre 4.5/5, llegarían a 5 si Samuel no hiciera una huelga de ropa sucia en su cuarto que ahora compartía solo después de que Clovis su compañero ya no aguanto más y se mudara a su habitación en la parte en donde había esto Tylor el año pasado, Clovis era un chico tranquilo y que siempre dormía (no por todo era hijo de Hipnos) y alguien muy ordenado aunque en vez en cuando encontraba un pantalón o una camisa tirada eso era lo mínimo.

El legado de HadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora