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en este multiverso, los hibridos eran vistos como una raza inferior a los humanos, que eran más ingenuos y se podían amansar facilmente.
en este mundo los hibridos son vendidos como mascotas o sirvientes a cualquiera que pudiera p...
El día siguiente fue un poco más calmado, gracias a que bueno, era sábado y no tenía ir a la escuela.
Despertó con bastante pereza, no tenía ganas de levantarse ... O hacer algo en general.
Sintió unos brazos apretar la zona de sus cintura, recordó que el oso se había dormido con él, aunque no fue para nada incómodo, todo lo contrario la verdad estaba bastante cómodo.
Hoy aunque no quería hacer algo planeaba enseñarle cosas al híbrido, tal vez a decir al menos una oración coherente u otra palabra que no sea araña o Jan.
Con mucho cuidado logro sacarse del agarre del oso y bajo a la cocina para hacerse el desayuno, él sabía que estaba solo, su padre estaba en la iglesia y su hermano anteriormente le había dicho que no estaría.
Tenía toda la casa para él y para Spreen.
Mientras comía escucho un fuerte golpe arriba como si algo grande de hubiera caído con bastante fuerza al suelo.
Fue corriendo a ver qué pasó y se encontró con el oso en el suelo, al parecer se había caído.
Se tento bastante, no quería reírse del hibrido pero es que no podía evitarlo.
Aunque la cara del oso le saco todas las ganas que tenía de reírse, se veía triste parecía que iba a llorar.
Rápidamente se acercó a él agachándose para quedar a su altura y lo abrazo con bastante cuidado.
— no no no, tranquilo Spreen, no pasa nada ¿Estás bien? ¿Te lastimaste mucho? —
Acaricio el cabello del híbrido mientras hacia su mejor esfuerzo para calmarlo, podía escuchar como respiraba erráticamente.
Tal vez algo lo asustó en sus sueños y despertó bastante agitado.
Suspiro mientras esperaba a que se calmara, lo que poco a poco parecía dar resultado, cuando Spreen estuvo algo más calmado lo yudo a levantarse para ir a la cocina.
Le dio algo de comida y le indico que lo esperara mientras iba a buscar algo que pudieran hacer.
Volvió con las mismas cartas que estaba usando ayer para enseñarle algunas palabras, si quería que pasara de ser inadvertido debía aprender a hablar al menos.
- vamos Spreen, al menos inténtalo, esto es un gato, di gato -
No había forma, Spreen simplemente o no quería aprender o no entendía nada de lo que quería que hiciera.
Dejo las cartas de lado y decidió mejor ponerse a hacer tareas, mejor tarde que nunca.
Dejo al oso sentado en una de las sillas, no le importaba que hiciera, mientras no rompa nada todo bien.
Pasaron exactamente dos horas, dos horas de trabajo, su cabeza estaba que explotaba de tanta información, debía tomar un descanso.
Volvió a la sala para ver qué estaba haciendo Spreen, tal vez este haciendo algo entretenido para poder unirse.
Aunque, cuando llego a la sala el oso seguía sentado en ese mismo sillón, no parece que se haya movido de ese lugar.
Extraño ¿Enserio se quedó sentado ahí dos malditas horas?
- eh ... Spreen tu ¿Estuviste sentado ahí todo este tiempo? -
Spreen asintió con una sonrisa bastante grande, como si hubiera hecho algo bien.
Juan estaba entre desconcertado y algo preocupado por eso ¿Porque? Bueno porque esto solo demuestra que el oso no tiene una mente independiente.
Básicamente que no puede hacer cosas sin que alguien le diga que tiene que hacer ...
- Spreen¿Sabes que puedes hacer lo que quieras verdad? No tienes porque esperar a que yo te diga que tienes que hacer -
Juan intento aclararle eso al hibrido, pero solo recibió una mirada confundida.
¿Hacer lo que quisiera? ... ¿Cómo se hacía eso? ¿Cómo puede hacer lo que quiera sin que Jan le diga que tiene que hacer?
Demasiada información para Spreen.
Aunque, ahora Juan tenía otra cosa que podía enseñarle a Spreen, le enseñaría a tener un pensamiento independiente para que pueda hacer lo que él quisiera sin tener que esperar alguna orden.
Será bastante difícil obviamente, pero tampoco imposible.
Bien, primera lección, explicarle a Spreen que es un pensamiento independiente.
- a ver, Spreen, quiero que me respondas algo ¿Ok? -
Al oso asintió, Jan dijo que jugarían a algo pero no sabe a qué exactamente aún así no le importo, quería jugar a cualquier cosa.
- ¿Alguna vez tu quisiste hacer algo o quisiste tener algo? Repito TU quisiste, no que alguien más te haya ordenado o te haya dicho que lo querías -
Esa pregunta dejo pensando al oso ... ¿Algo que él quería? ...
Su mente hizo click, recuerda que cuando era más pequeño vio a un niño humano con una cosa bastante extraña en sus manos, tenía forma de animal pero no era un animal ya que no se movia y parecía más esponjoso que uno.
Un peluche, para ser mas claros.
Pero nunca pudo tener uno, porque los cuidadores le dijeron que eso solo era para humanos y que él no tenía el derecho de pedir nada.
Así que Spreen asintió ante la pregunta de Juan, una vez si quiso algo.
- bien, eso es bueno, muy bueno y dime ¿Aún quieres esa cosa o hacer eso? -
Lo pensó otra vez, sonara estúpido pero ... Si, aún quería tener ese animal pequeño y esponjoso, así que volvió asentir
- ¡Perfecto! Entonces vamos a buscar eso que tanto quieres, pero tu tendrás que buscarlo, yo no haré nada -
Bien ... Este plan puede salir o muy bien o muy mal
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Denle un peluche al osito 😔😔
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