¡𝗗𝗲𝘃𝘂𝗲́𝗹𝘃𝗲𝗺𝗲 𝗮 𝗺𝗶 𝗻𝗼𝘃𝗶𝗼! | 𝐂𝐇𝐀𝐍𝐌𝐈𝐍

Capítulo 13.

Seungmin tenía el dolor de cabeza más grande que había tenido en toda su existencia, se levantó del sofá en el que se encontraba y despertó a Christopher con sus movimientos.

—Buenos días Seungmin... —Chan tenía su cabello desordenado y sus ojos lucían cansados debido a lo poco que había dormido.

Entonces el menor recordó aquel beso y sus mejillas se encendieron, se sintió consternado por dentro, intentó tranquilizarse y hablar con su voz tranquila.

—Buenos días hyung, te vez cansado... ¿Estás capacitado para manejar?, si quieres pido un taxi y después vienes a recoger tu auto —preguntó Kim preocupado.

—Por supuesto que sí puedo manejar Seungmin, yo no tomé como lo hizo alguien por ahí.

Kim sintió pena por él mismo y deseó que la tierra se lo tragase.

Cuando se levantó se sintió mareado, Chan lo notó y le tomó del brazo para ayudarlo a levantarse.

—Vamos por una sopa para que te quite la resaca, yo pagaré —habló el mayor mientras miraba el estado del teñido.

—No, ya la pagó hyung, usted hizo mucho con traerme y ahora me llevará.

—Vamos Seung, me siento culpable por tu estado, dejar que Jisung te diera todos esos tragos fue un error, muy grave...

—Fue mío porque yo los acepté por gusto propio, así que no debe sentirse mal por ello.

Christopher y Seungmin acordaron pagar entre los dos lo que se comprarían, una vez dentro del auto el silencio fue tan grande que ninguno se atrevía a romperlo.

—Sobre el beso... —habló el menor al fin—. Me siento culpable.

—No, yo... —intentó decir Bang, sus manos temblaban debido al rechazo de Seungmin, ya que a él sí le había gustado besarle.

—Deja que termine de hablar... yo me siento verdaderamente culpable por no arrepentirme de ello, y me siento peor por querer repetirlo... —dijo el chico con la cabeza gacha, permitiendo que sus cabellos taparan un poco sus ojos.

—Per... —Chris quería decir algo, pero Seung siguió hablando.

—Sus labios son tan suaves... ¡Nunca creí que besar a alguien se sintiera así!, usted es alguien que sabía no podía tocar y lo hice... ¿Ahora qué le diré a Joo-hyun? —las lágrimas se salían a flote y el pelinegro se sintió culpable.

—Seungmin... estás pensando en los demás y no en ti.

—Pero es inevitable... ¡La culpa me acecha!

Chan tomó el rostro del menor entre sus manos y le obligó a verlo directo a los ojos.

—Entonces piensa en mí, ¿que harás ahora que sabes que yo quiero repetirlo y que jamás me cansaría de ello?, si tanto piensas en los otros ahora piensa en esto, me gusta tu compañía Seungmin, me di cuenta de eso el día en el que te quedaste a dormir en mi departamento, jamás había llevado a alguien allí, que durmieras junto a mí me hizo sentir completo, pero no quería aceptarlo por la misma razón que tú, ¿ahora piensas en mí?, deseo compartir más momentos contigo y no quiero pensar en lo que dirán los demás.

Seungmin quedó perplejo, si no estuviera sentado juraría que sus piernas le jugarían una mala broma desfalleciendo.

—Chris hyung... ¿Qué se supone que deba contestar?

—No estoy buscando una respuesta de tu parte hoy Seung, la quiero escuchar cuando inicies tu nuevo semestre —dijo plantando un beso en la frente del menor para luego arrancar en su auto.

Chan se había propuesto una misión: volverse dictador de los sentimientos de Kim.

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