Luego de haber sido regalado por su padre por haber nacido omega, Jimin termina siendo emparejado a la fuerza con un alfa del que no sabe nada.
Una marca en su cuello y sus cachorros lo obligan a permanecer por siempre a su lado.
¿Podrá alguna vez...
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CAPÍTULO XX:
La mañana había iniciado muy temprano aquel viernes para el pequeño omega. Jimin se había despertado debido a que Jihwa se había tirado encima de su padre alfa mientras chillaba que tenía hambre. Jungkook no había querido despertarse al principio balbuceando incoherencias con tal de que su bebé lo dejara seguir durmiendo. Pero Jihwa había continuado jalándole el cabello a su padre y abriendo sus párpados con sus deditos a propósito a la vez que no dejaba de repetir lo mucho que quería que su appa le preparara de sus panqueques especiales que él solo sabía hacer.
Debido a toda la bulla, Jimin había terminado por abrir los ojos. Perezoso le había pedido a Jihwa que dejara a su appa dormir un poco más, después de todo, se habían quedado hasta tarde viendo una película de dibujos animados por insistencia del pequeño bebé castañito. El niño había obedecido a su madre por unos minutos hasta que nuevamente se había escabullido a donde su padre con el afán de despertarlo. Pronto, el pequeño niño había logrado su cometido. Su padre alfa se había despertado y tras asearse lo había llevado con él a la cocina para preparar panqueques "mágicos."
Jimin los había seguido una hora más tarde. Él se había despertado con el llanto de Jinah, la cual ya lloraba por su alimento. El pequeño omega, se había estirado y tras salirse de la cama cuidadosamente (pues no quería despertar aún a Jungmin ni a Eunwoo), había ido a amamantar a su cachorrita. Jinah había estado encantada cuando pudo degustar de la leche de su madre. La bebé bebía su leche mientras movía los piecitos inquietos y miraba a Jimin con grandes ojos curiosos.
Una vez que el omega hubo terminado de alimentarla, cerró su camisa y la llevó a su hombro para sacarle los eructos. La bebé se dejó hacer e incluso no le causó problemas a su madre cuando este la empezó a desvestir para cambiarle el pañal y colocarle un conjuntito de diario. Jimin le colocó un enterizo amarillo pastel que tenía en la parte de la pancita el dibujo de un pollito. A Jinah le quedaba absolutamente todo bien. Se veía preciosa y parecía una princesa con toda la linda ropa que Jimin le compraba y su abuela le regalaba.
Cuidar de un bebé tan pequeño era una tarea difícil y Jimin lo sabía muy bien. Había pasado por cuatro bebés antes de Jinah, por lo que ahora él mismo se consideraba todo un profesional. Al menos, con Jinah había recibido mucha ayuda de parte de su suegra y, sobre todo, de Taehyung y Hoseok, los cuales siempre estaban a su lado cuidándolo. Jungkook también había estado atento a Jinah. La cuidaba y jugaba con ella. Le daba de comer y la ayudaba a vestir, pero no era muy hábil a la hora de cambiarle el pañal o limpiarla. Tendía a hacer un desastre, por lo que Jimin había decidido no prestarle más ayuda en esos casos.
Cuando su bebé estuvo lista, bajó con ella en brazos a la cocina. En esta se encontró a su alfa junto a Jihwa, Eunwoo, Jungmin y Eunsoo. Los tres cachorros mayores comían sus panqueques llenos de miel y crema de batir, mientras que Eunsoo, en su silla de comer, jugaba con su compota de duraznos.
