~𝓛𝓪𝓻𝓰𝓪 𝓥𝓲𝓭𝓪 𝓐𝓵 𝓡𝓮𝔂~ ᴋᴛʜ & ᴊᴊᴋ

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—¿Ya todo está listo?- Jungkook ciertamente preocupado,preguntó sin dirigirle la mirada al joven doncel que caminaba unos pasos por detrás suyo.

—Sí, Majestad. Ya hemos preparado sus pertenencias para el viaje y los carruajes que pidieron ya fueron revisados y están listos para usarse- El doncel respondió recibiendo un pequeño asentimiento por parte del rey consorte.

—¿Mi marido en donde se encuentra?- Está vez,por sobre el hombro miró al joven sirviente,el cual amplió los ojos al tener la mirada del consorte encima.

—S-se-se me informo que Su Majestad estaba en la sala de música junto al joven Park- Con leve tartamudeo, nuevamente respondió,siendo su tono inseguro lo que hizo a Jungkook fruncir levemente el ceño.

—Bien- Fue lo único que contestó al respecto,girando por un pasillo a la derecha,dispuesto a ir a la sala de música. Tenía que terminar de conversar de algunas cosas con Taehyung antes de partir a Incheon,al día siguiente. No podía esperar a que anocheciera.

Estaba nervioso y sentía como el suave mareo que se ha estado haciendo notar desde la mañana se hacía más fuerte debido a la ansiedad.

Cuando llegó saludo brevemente a Yoongi (quien cuidaba las puertas de roble que daban al interior de la sala de música) recibiendo una reverencia por su parte,correspondiendo su saludo. Jungkook,mirando nuevamente por sobre el hombro al doncel detrás suyo,hizo un movimiento con la mano en su dirección,dándole a entender que debía retirarse.

El joven doncel que le servía,reverenció profundamente ante él,acatando la silenciosa orden y en cuanto desapareció de la vista de Jungkook al girar por un pasillo,el consorte destenso los hombros,desviando la mirada al mayor de cabellos rubios delante suyo el cual,bajó y alzó la cabeza rápidamente en una reverencia breve,mientras le daba paso por las puertas que protegía,al abrirlas y dejarle pasar.

Lo primero que el castaño vio,al ingresar a la amplia sala llena de instrumentos,fue la expresión llena de indignación de Jimin y el puchero de Taehyung pero en cuanto él puso un pie dentro de la habitación,la expresión de ambos se suavizó y el azabache sonriendo cálidamente en su dirección,se levantó para recibirlo con un breve pero suave abrazo y un pequeño pico en los labios que logró hacer que Jungkook relajará por completo el cuerpo,casi pareciendo derretirse entre los brazos que le sostenían.

Llevaban desde la mañana sin verse y en ese momento,ya era de tarde. No pudieron desayunar juntos y en el almuerzo sucedió lo mismo. Habían estado más atareados ese día por el viaje de mañana.

—¿Cómo estás? Ah,te extrañe mucho- Taehyung volvió a estrechar a Jungkook brevemente entre sus brazos,ignorando por completo la presencia de Jimin cuando comenzó a llenar el rostro del menor de pequeños besos,priorizando su frente y nariz con suaves besitos.

—Estoy bien Taehyung y,nos vimos esta mañana- El castaño rió alegremente,ignorando al igual que Taehyung,la presencia del mayor de cabello mieles. Más concentrado en llenarse del cariño que se le daba que en preocuparse en si aquello se vería inapropiado,al estar con un espectador acompañandoles.

—Para mi fue una cruel eternidad- Taehyung susurró sobre los labios del menor,besando lentamente sus labios luego de culminar sus palabras.

Y Jimin,sentado en el sofá largo justo detrás de los reyes,fingió arcadas por la empalagosa escena,desviando la mirada a la arpa arrinconada al otro lado de la habitación,en un intento por no ver la intimidad que se mostraban los menores delante suyo,sin siquiera importarles su presencia. Jimin se sintió bastante incómodo. El tercero,el innecesario,la lámpara en la esquina,etc.

¿Es que estoy pintado o lo hacen a propósito? Jimin pensó,con las mejillas rojas y de brazos cruzados,mientras miraba fijamente y sin pestañear aquel instrumento que a sus ojos ahora se veía sumamente interesante. Pero a pesar de sus pensamientos y la incomodidad que sentía,no pudo evitar dejar ir una pequeña sonrisa. Aliviado y feliz de ver el amor que los menores se mostraban,notandose a simple vista el cariño sincero que se tenían mutuamente.