Hasta Siempre ✅

Capítulo 37

Le envie un mensaje a los chicos, y quince minutos después, estábamos esperándolos en la pizzería, y pues claramenrte, mi mejor amigo, tenía que tocar eln tema.

—¿Qué onda con Jeremy?

—Nada, no hablamos.

—Julia, nunca fueron una buena pareja, pero ahora sé, más que nunca, y estoy seguro que tú también, que debes acabar con esto. Por una vez en tu vida hazme caso.

—Es lo que haré.

—Y ni se te ocurra decirme…—frenó—, ¿qué? ¿Qué has dicho?

—Que terminaré con esta farsa.

—Repítelo, creo que no oí bien.

—Olvídalo—reí.

—Me alegra saberlo—suspiró aliviado.

—Sí pues…me estaría mintiendo, nos—corregí— estaría mintiendo.

— ¿Necesitas respaldo? —preguntó Alisson.

—No, es algo que me corresponde a mí.

En ese momento, aparece Amber, se sentó junto a nosotros queriendo saber de qué hablábamos, cuando le conté no lo podía creer.

¿Por qué no lo podían creer?

—¿Qué onda?—se acercaron Maca y Liam.

—Julia por fin acabará con Jeremy—se adelantó Morgan.

— Ya era hora.

—Bueno, basta—intervino Chris—, sí, es verdad, ya era hora, pero dejen a la chica en paz por Dios, que al menos se dio cuenta.

—Gracias—susurré. Él me abrazó de costado.

—¿Cuándo lo harás?

—Mañana a primera hora.

—Avísanos si necesitas ayuda.

—Claro...

<<No lo harás, ¿cierto?>>

No, este es mi problema, no quiero involucrar a nadie.

Mi móvil vibra, lo desbloqueo para leer el mensaje.

—¿Cómo te sientes?

Me atraganté con mi propia saliva al ver el mensaje que me llegó de Sebastián. Liam me alcanzó un vaso con agua y el resto me preguntaba o que me pasaba, o me daban aire.

Liam me quitó el móvil leyendo el mensaje que Sebastián me había enviado. De él, pasó a Morgan, de Morgan a Brie, de Brie a Alisson, para acabar por fin,  en las manos de Chris. Tecleó la respuesta y el muy caradura lo envío, ni siquiera pude dar la aprobación.

Se lo quito para leer lo que puso.

—Mal, estuve bajoneada todo el día y lloré. Pero vino Chris y me sacó de casa. Ya quiero que sea la próxima sesión para verte.

—

¡No!—me paré.

—Es la verdad.

—¡¿Te has vuelto loco?!

—¿Qué le pusiste?—inquirió Alison.

—Mira.

—Wow.

Todos se pasaron el móvil y rieron.

—¡Contestó!—exclamó Liam dejándolo en medio de la mesa.