CAP 5. Caballero

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Ese año llovía mucho, en la misma temporada años atrás no llovía tanto, en cambio ese año llovió casi todo el mes habiendo solo dos días soleados.

Shen QingXuan sabía cómo entretenerse y a pesar de estar encerrado en la habitación, tampoco se angustiaba sino que escuchaba el sonido de la lluvia pacientemente.

El sonido de las gotas de lluvia cayendo sobre el umbral, las hojas, las jarras... captar esos pequeños sonidos y distinguirlos, era algo divertido también.

Las flores en el patio revoloteadas por las gotas de lluvia dejaron esa elegancia atrás adoptando otro aura. Cuando Shen QingXuan se entretenía con ellas incluso las dibujaba por diversión. 

Por la noche, tras cenar, se bañó en agua caliente con aroma de hierbas medicinales, no fue cuando le dio la fatiga que llamó a los sirvientes con el pequeño timbre.

Esa noche, hubo otra tormenta.  

Shen QingXuan sabía que YiMo no vendría esa noche por lo que se acostó temprano sin embargo no fue capaz de conciliar el sueño, simplemente puso una pequeña mesa con un tablero de ajedrez chino sobre su cama mientras seguía los pasos que en un antiguo libro le indican.

Las piezas blancas y negras a veces estaban dispersas por el tablero otras parecían estar estrechamente relacionadas entre sus manos como una enorme tropa de soldados y jinetes.

Justo cuando estaba concretado, una esquina de la cortinilla de seda fue volada por el viento.

Shen QingXuan levantó la cabeza sorprendido y miró hacia la cortina.

En la habitación no había nadie más pero sabía que había venido. Rápidamente levantó la cortina saludando al vacío.

Al sentir que se acercaba un aire frío, Shen Qingxuan recogió el tablero sacando del armario pincel y papel, escribiendo: Llueve mucho y hace mucho viento, aguarda un momento aquí.

La cama repentinamente se movió, al igual que las sábanas bajo el tablero se arrugaron levemente.  

La lluvia hacía un sonido de plic plac cuando golpeaba la ventana, Shen QingXuan pensó que no iba a venir por lo que llevaba una prenda interna color blanquecino, la horquilla que usa para recoger el pelo también había sido retirada dando una sensación perezosa.

Hasta que YiMo se sentó frente a él, se dio cuenta de su estado, escribiendo rápidamente: Pensé que no ibas a venir. Al terminar de escribir posó su mirada hacia el frente, sin embargo no recibió respuesta alguna de la otra parte.

Shen QingXuan se extrañó, desde que se conocieron hasta ahora, por más friolero que fuera. YiMo nunca dejó una pregunta abierta sin respuesta

¿Qué pasó hoy? 

Justo que estaba pensando, el papel de la mesa fue tomado por el hombre desviada hacia su sentido.

Las letras sobre el papel empezaron a aparecer, era una despedida.

YiMo se iba a marchar de la montaña yéndose a otro sitio.

La primera reacción de Shen QingXuan fue miedo, perdió toda su compostura arrebatando el pincel y papel escribiendo rápidamente a dónde iba y el cuándo volvería. 

En breve, la hoja y papel fueron tomadas por el hombre escribiendo cada letra firmemente. Era algo que el viejo yao llevaba buscando hace milenios, durante esos días recibió noticias de ello por ello tenía que bajar de la montaña e ir a recogerlo.

Shen QingXuan por fin se tranquilizó. 

Tras una breve pausa, Shen QingXuan no pudo contener su curiosidad preguntando qué era para que YiMo fuera tan impaciente en recuperarlo.

Encuentro con serpiente | 遇蛇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora